El escritor que nunca duerme

La historia sigue a Yoatad Azaswa, un escritor atormentado por su incapacidad para dormir. Debido a circunstancias desconocidas, perdió la capacidad de soñar, por ende, vive en un estado de constante vigilia. Su búsqueda eterna de la palabra perfecta y su insomnio crónico lo han convertido en un ser sombrío, bastante obsesionado por la creatividad. Sin embargo, su cuento da un giro inesperado cuando es brutalmente asesinado y se encuentra en un reino más allá de la realidad, donde enfrenta un juicio peculiar por sus actos en vida. A medida que explora esta dimensión, se sumerge en las profundidades de su pasado, reviviendo momentos clave y enfrentando las consecuencias de sus elecciones.

En su pasado el protagonista se ve envuelto en una búsqueda de respuestas sobre su propia muerte. A lo largo del relato, conocemos a una serie de personajes que forman parte de la vida del escritor, cada uno con su propia historia y motivaciones, convirtiéndolos en posibles sospechosos del crimen.

Desde Laura hasta Galiana, pasando por Demon, Freddy y otros más, estos personajes acompañan al escritor en su viaje por descubrir la verdad detrás de su muerte. La trama se teje entre saltos en el tiempo, explorando temas profundos como la amistad, el poder, la familia, el más allá, la reencarnación, lo transcendental, el significado del tiempo y las complejidades de la moralidad humana. Además, incorpora una crítica social abordando otros fondos como la corrupción, la injusticia en el sistema de justicia, la desigualdad laboral y la falta de oportunidades en la sociedad. Estos elementos añaden profundidad y relevancia a la historia.