Imágenes de páginas
PDF
EPUB

La suerte de las poblaciones árabes en nada mejoró con este cambio de dominacion. Sujetas como antes á una raza berberisca, aun fué más humillante el yugo que tuviero que sufrir con esta segunda conquista. Al fin los Almoravides no habian podido olvidar que sus mayores eran originarios del Yemen, y aun conservaban con los árabes algunas atenciones, bien que los tratasen como á un pueblo vencido. Los Almohades, africanos puros, hacian del orígen árabe un título de proscripcion. Así poco á poco fué desapa reciendo la antigua raza, y pronto la poblacion muslímica de España quedó reducida á moros africanos.

Almoravides y Almohades en los tulos desde el 26 al 44. árabes de Conde, part. III. capí

CAPÍTULO IX.

PORTUGAL.

Origen y principio de este reino.—Cuándo empezó á sonar en la historia el distrito Portucalense.-Primer conde de Portugal Enrique de Borgoña. Su ambicion; sus planes; inutilidad de sus esfuerzos por apropiarse una parte de Leon y de Castilla.-Su esposa doña Teresa.Proyectos ambiciosos de la condesa viuda.-Tratos, alianzas, guerras y negociaciones durante el reinado de su hermana doña Urraca de Castilla.-Tendencia de los portugueses á la emancipacion.-Pactos y guerras de doña Teresa de Portugal con Alfonso VII. de Castilla.Revolucion en Portugal.-Sus causas.-Es espulsada doña Teresa y proclamado su hijo Alfonso Enriquez.-Guerras y negociaciones del príncipe de Portugal con el monarca castellano.-Tratado de Tuy.— Famosa batalla de Ourique.-Fundamento de la monarquía portuguesa.-Tregua de Valdevez.-Conferencia y tratado de Zamora.-Es reconocido Alfonso Enriquez primer rey de Portugal.-Cuestion de independencia. Recurre Alfonso de Portugal à la Santa Sede para legitimarla.-Carta del emperador al papa.-Contestaciones de los pontifices.-Separacion definitiva de Portugal.

Cuando el feliz acaecimiento de la union de Aragon y Cataluña parecia impulsar la España hácia la apetecida unidad, otra parte integrante del territorio español se iba poco a poco desmembrando de la corona de Castilla hasta erigirse en reino independiente, segregándose así dos estados que la naturaleza parece habia formado para constituir dos bellas porciones de un vasto imperio, de la monarquía española, que con

ellas seria una de las más ricas y poderosas naciones de Europa. Veamos por qué pasos llegó Portugal á separarse de Castilla y á alcanzar su independencia.

La antigua Lusitania habia corrido en todas las épocas y dominaciones la misma suerte que todos los demás distritos de la península. Otro tanto sucedió en los primeros siglos de la restauracion. Hácia el siglo X. comenzó ya á nombrarse el distrito de Portucale ó Terra Portucalensis; porque así como Coimbra era la poblacion más importante sobre el Mondego, Portucale era á su vez la más notable sobre el Duero (1). Cuando el rey de Castilla y de Leon Fernando el Magno rindió á Coimbra, encomendó el gobierno del territorio comprendido entre el Mondego y el Duero, en que estaba la tierra portucalense, al mozárabe Sisnando, que habia sido wazzir del rey árabe de Sevilla (2), el cual le gobernó con prudencia y sirvió fielmente á todos los príncipes hasta que murió en 1091. A los últimos del siglo XI. comenzaba ya á sonar como provincia distinta, y en la distribucion de reinos que hizo Fernando el Magno tocóle á su hijo García la Galicia con Portugal (3). Pasó luego sucesivamente al dominio

[blocks in formation]

de Sancho II. de Castilla y de Alfonso IV. de Castilla y de Leon, siempre como una parte de Galicia, ya fuese esta considerada como reino, ya como provincia regida por condes dependientes de los monarcas de Leon y de Castilla. Pero aquella provincia y sus distritos, con las agregaciones que fué recibiendo de los territorios de Algarbe conquistados á los musulmanes, formaba ya un vasto estado bastante apartado del centro de la monarquía leonesa, y los condes de sus distritos, sujetos unas veces à un conde superior de Galicia, otras bajo la autoridad inmediata del monarca, participaban de las ideas de independencia de aquel tiempo, á las cuales favorecia la distancia á que se hallaban de la accion del rey.

Contamos entre los errores del gran monarca Alfonso VI. la desmedida proteccion que dispensó á los dos condes franceses Ramon y Enrique de Borgoña, que habian venido á España á guerrear contra los infieles y á buscar fortuna, y á los cuales no se contentó con darles en matrimonio sus dos hijas Urraca y Teresa, legítima la una y bastarda la otra, sino que les adjudicó por vía de dote y con una especie de soberanía el condado de Galicia al primero, el de Portugal ó del distrito Portugalense al segundo (1). Desde esta época se ve al conde Enrique, unas veces en su distrito de Portugal, otras en la córte de Alfonso VI.

(1) Part. II. lib. II. cap. 3 de nuestra Historia.

auxiliando al rey su suegro en las guerras contra los árabes, y aun se menciona una batalla que Enrique les dió en 1100, á las inmediaciones de CiudadReal (1): hasta que en 1101 á consecuencia de una nueva cruzada publicada por Pascual II., el conde Enrique de Portugal fué de los que llevados del espíritu aventurero cayeron en la tentacion de ir á buscar ó más gloria ó más fortuna en la Tierra Santa, dejando de combatir á los infieles de casa para ir á guerrear con los de luengas tierras. Mas en 1106 estaba ya otra vez en España y en la córte de Alfonso VI. En su ausencia gobernaba doña Teresa su esposa el condado de Portugal.

Hácia este tiempo comenzaron ya los dos condes. extrangeros, el de Portugal y el de Galicia, á mostrar hasta dónde rayaba su ambicion, y cómo pensaban corresponder á las excesivas preferencias con que los habia favorecido su suegro el monarca de Castilla. Bajo la inspiracion y direccion del viejo abad de Cluni su compatricio y pariente, y con arreglo á las instrucciones enviadas por conducto del monje Dalmacio, juraban los dos primos un pacto secreto para repartirse entre sí el reino, anulando la sucesion legítima del infante don Sancho hijo del rey (2). Trasluciérase

(1) Gayangos, trad. de Almakari, vol II. Ap. A.-Anal. Toledanos en la Esp. Sag. tomo 23, págica 403.

chery en su Specilegium, eran: que à la muerte del monarca, Enrique sostendria fielmente el domínio de Ramon, como su señor (2) Las condiciones de este cé- único, ayudándole á adquirir tolebre tratado, publicado por D'Ac-dos los estados del rey contra cual

« AnteriorContinuar »