Repertorio americano, Volumen8

Portada
J. García Monge, 1924
 

Otras ediciones - Ver todas

Términos y frases comunes

Pasajes populares

Página 98 - Vino, primero, pura, vestida de inocencia. Y la amé como un niño. Luego se fue vistiendo de no sé qué ropajes. Y la fui odiando, sin saberlo. Llegó a ser una reina, fastuosa de tesoros...
Página 147 - Y como se conoce, en suerte y pensamientos se mejora; el oro desconoce que el vulgo ciego adora, la belleza caduca engañadora. Traspasa el aire todo hasta llegar a la más alta esfera, y oye allí otro modo . de no perecedera música, que es de todas la primera.
Página 271 - ¡Qué bien que me acuerdo! La tarde de lluvia; las velas grandotas que olían a curas; y tú en aquel catre tan tiesa, tan muda, tan fría, tan seria, y así tan rechula! Mamá, soy Paquito; no haré travesuras".
Página 55 - Porque es áspera y fea, porque todas sus ramas son grises, yo le tengo piedad a la higuera. En mi quinta hay cien árboles bellos: ciruelos redondos, limoneros rectos y naranjos de brotes lustrosos. En las primaveras, todos ellos se cubren de flores en torno a la higuera. Y la pobre parece tan triste con sus gajos torcidos, que nunca de apretados capullos se viste.
Página 279 - ¡Honra y prez a sus padres denodados! Entre ellos se encontraba vuestro abuelo; Hoy descansa su espíritu en el cielo, Noble atleta vencido por la edad. Venid en sus recuerdos impregnados, Y llena el alma de filial ternura, Su venerada, humilde sepultura, Con flores y con lágrimas regad. Tomad ejemplo en él; y cuando un día Emprenda yo mi viaje sin retorno, Erigidme una cruz, y de ella en torno, Sin una mancha en la tranquila sien, Llenos de amor, de paz, que es la harmonía, Podáis decir de...
Página 98 - Y se quitó la túnica, y apareció desnuda toda... ¡Oh pasión de mi vida, poesía desnuda, mía para siempre!
Página 279 - AT HOME Bella es la vida que a la sombra pasa del heredado hogar; el hombre fuerte contra el áspero embate de la suerte puede allí abroquelarse en su virtud. Si es duro el tiempo y la fortuna escasa, si el aéreo castillo viene abajo, queda la noble lucha del trabajo, la esperanza, el amor, la juventud. Hijos, venid en derredor; acuda vuestra madre también ¡fiel compañera! y levantad a Dios con fe sincera vuestra ferviente...
Página 60 - Tómame ahora que aún es temprano y que llevo dalias nuevas en la mano. Tómame ahora que aún es sombría esta taciturna cabellera mía. Ahora, que tengo la carne olorosa, y los ojos limpios, y la piel de rosa.
Página 231 - Si queréis que entre las rosas ría hacia los matinales resplandores de la vida, sea lo que Vos queráis. Si queréis que, entre los cardos, sangre hacia las insondables sombras de la noche eterna, sea lo que Vos queráis.
Página 102 - Río de cristal, dormido y encantado; dulce valle, dulces riberas de álamos blancos y de verdes sauces... El valle tiene un ensueño y un corazón; sueña y sabe dar con su sueño un son triste de flautas y de cantares.

Información bibliográfica