Imágenes de páginas
PDF
EPUB

que tengan presente que escribimos de España y para España, donde su influencia es vital, la preocupacion grande, y el asunto poco esclarecido, presentando los hechos recientes y sus consecuencias, al par que las doctrinas y causas, confirmando unas con otras.

Solo el amor á nuestra desgraciada patria, el deseo de esclarecer ciertos hechos poco conocidos, y de abrir los ojos á la verdad de muchos hombres sensatos pero ilusos, nos ha inducido á esta publicacion, corta en volúmen, pero muy sustancial á nuestro parecer : porque, como dice un publicista moderno, de todas las historias la que ménos conocemos es la de nuestro pais, y la que mas imperfectamente sabemos es la de los sucesos contemporáneos.

ADVERTENCIA.

Tiempo hace que la España sufre una serie casi no interrumpida de convulsiones mas ó menos violentas, pero siempre producidas por el contraste del bien público con el temporal del clero. A su influjo, á su poder y al estado de la cultura y necesidades de los pueblos, deben atribuirse los acontecimientos que solo pueden parecer estraordinarios á los que, sin tomarse el trabajo de subir hasta su origen, paran la atencion únicamente en el desórden é irregularidad de su curso. En él estan marcados de un modo indeleble los pasos de la ilustracion del siglo, á pesar de los esfuerzos empleados en ofuscarla. Es bien cierto que en el año de 1808 Godoy (á quien Pio VII llamó coluna de la Fé, por haber circulado la Bula Auctorem fidei contra el dictámen del Consejo de Castilla) no hubiera caido de los altares en que le colocó la lisonja mas impía, si no hubiese dispuesto y ejecutado

la venta de fincas pertenecientes á capellanías y otras instituciones eclesiásticas. Lo es así mismo, que la España no hubiera visto en aquel año el movimiento simultáneo de los pueblos, ni la resolucion marcial de los Merinos, Tapias, Salazares y demas clérigos y frailes que tomaron las armas, si los franceses no hubieran demolido los conventos y amagado con la reforma del clero. Las Córtes de 1810 à 1813 que al cabo de tres siglos restituyeron la vida à las mácsimas sepultadas en nuestros fueros y leyes antiguas, asi como la corona abdicada y el reino invadido á Fernando VII; ésta reunion de obispos, abades, curas, canónigos, grandes, letrados, labradores, comerciantes, militares de todas graduaciones y de otros españoles de ambos hemisferios, educados en diversas y remotas provincias, segun el método de estudios designado por el despotismo político, é infanda Inquisicion este impávido y memorable Congreso, donde por voto libre y uniforme se vieron restablecidos y proclamados los principios de la libertad civil bajo el fuego voltario de los franceses, no hubiera sufrido los sarcásmos é impugnaciones de periodistas buscados, asalariados y recompensados con breves pontificios,

ni fenecido, como feneció en 1814 por la seduccion de las tropas de Elío, si no hubiera derrocado la Inquisicion, reformado los monasterios y acotado las rentas y abusos del clero. Y el sistema representativo de 1820 ecsistiera largo tiempo, no obstante los defectos y vicios de su constitucion y de sus agentes, si no se hubiese rozado con los intereses temporales de esta corporacion numerosa y estendida por todos los reinos católicos.

Pero la accion continua en que se ha tenido este resorte poderoso, fué sensiblemente debilitando su elasticidad y su fuerza. En 1808 tuvo la necesaria para contribuir poderosamente à levantar toda la nacion. En 1814 no pudiendo ya con solo su peso inclinar la balanza á su provecho, tuvo que apoderarse del rey en Valencia, seducir las tropas y alucinar à los incautos con las protestas y promesas del decreto de 4 de mayo, en que se ofreció convocar las Córtes, proteger la seguridad individual, la libertad de imprenta y sostener los derechos inviolables del pueblo, renunciando al absolutismo y á la idéa de gravar y disponer de las rentas del Estado, sin acuerdo del reino. Y en 1820 viendo disipado el prestigio por la fuerza in

contrastable de la razon pública y que no era posible mover los brazos de una nacion ya despierta, ni recuperar el predominio con promesas falaces, con decretos artificiosos, tuvo que apelar al medio único que le restaba : al estremo precario y ominoso de llamar las fuerzas estrangeras, lisongeando la tendencia de un gabinete vecino, seducido y precipitado por las arterías de la negra Congregacion, identificada con la política de la Santa Alianza, reducida á sostener y multiplicar los tronos absolutos y á no dejar en Europa ni un simulacro de las libertades públicas.

El refuerzo de cien mil bayonetas que lanzaron del suelo español las luces y los hombres capaces de contrariar sus designios, puso en sus manos todos los medios de asaltar el poder. Repuestos entrambos cleros con la adquisicion de los bienes agenos y con la facultad de alucinar, seducir, recompensar, y arredrar á los oprimidos, se multiplicaron á proporcion de las concesiones y privilegios. Dueños del gobierno que erigieron, redoblaron sus esfuerzos para que

no

volviese á salir de sus manos. Dispusieron y disponen á su antojo de todos los ramos de la administracion pública, sin dejar ley ó regla

« AnteriorContinuar »