Dividense las tercerias y los terceros en coadyuvantes y escluyentes: los primeros son los que toman parte en el pleito, ayudando ó sosteniendo el derecho de uno de los litigantes: los segundos son los que personándose en el juicio incoado, alegan un derecho peculiar suyo, sin ayudar ni sostener ninguna de las pretensiones de los primeros litigantes, sino por el contrario escluyéndolas. Los coadyuvantes pueden serlo en favor del rco ó del actor. De sus demandas se contierc traslado á la parte contraria, para que tenga conocimiento de la nueva pretension y pueda impugnarla, con ellos hay que entenderse en lo restante del litigio; porque por medio de la tercería vienen á ser partes legitimas; pero el juicio seguirá, segun el estado en que se halle, basta su terminacion, sin que los terceros puedan hacerlo retroceder ni obtener plazo alguno que ya haya pasado. Asi, por ejemplo, si ha pasado el término probatorio, cuando comienzan la tercería, no podrán probar nada de lo que solo dentro de él haya debido probarse. la observacion es un conocimiento exacto, que presenta á litigar en un pleito que otros están presta la naturaleza y que adquiere el médico siguiendo, y su pretension y las actuaciones observando atentamente todas las circunstan- á que da origen se designan con el nombre de cias que se desprenden del enfermo, y la espe- terceria. Puede haber tercerías en cualquier riencia es el resultado de las tentativas que ha clase de juicios; pero son mas frecuentes en hecho el práctico con el fin de conocer la rea- los juicios ejecutivos y en los de apremio. lidad de alguna cosa: tampoco debe confundirse la esperiencia con los esperimentos: el médico que esperimenta pregunta á la naturaleza y la esperiencia depende del resultado constante de muchos esperimentos repetidos. Asi se ha adquirido el conocimiento de la utilidad de ciertos medicamentos contra determinadas afecciones. De estas dos interesante bases de la terapéutica, la observacion y la esperiencia resulta el tino práctico, por medio del cual el médico que lo posee cjerce con mayor facilidad y acierto su profesion: por él adquiere el médico una especie de esperiencia que puede llamarse individual, porque es propia del que la tiene, sin que pueda casi esplicarla ni comunicarla á los demas: consiste en una habilidad particular, en un modo especial de ver y observar, por lo cual con un solo golpe de vista, si asi puede decirse, conoce el práctico la enfermedad que va á tratar, el método curativo que ha de emplear y aun en muchos casos las esperanzas que puede concebir, ó sea la terminacion que el mal debe tener: el tino práctico, lo mismo que el espi- Las tercerias escluyentes pueden ser de doritu observador, no es igual en todos los mé-minio y de prelacion: las primeras tienen por dicos, aunque hayan procurado adquirirlo con objeto el desembargo de bienes que no pertela misma aplicacion y conato, pues participa necen á un deudor ejecutado; pero que fueron en gran parte de esa disposicion innata, de embargados, creyéndose que le pertenecian: ese don particular de que hemos hablado; na- el objeto de las segundas es que con el valor die podrá, empero, conseguirlo sino á la vista de los bienes embargados se haga pago al terdel enfermo, libro el mejor de la ciencia. La cero con preferencia al que antes habia ejecuterapéutica es el complemento y perfeccion de tado, por tener su crédito algun privilegio. Pala ciencia médica; constituye esencialmente ra que se admita esta última especie de terceel arte de curar; suprimida ella, la medicina ría es necesario que el deudor no posea mas no es mas que una ciencia puramente teórica bienes que los embargados, ó que los demas é iconográfica, es una rama seca de la histo- que le pertenezcan y hayan quedado libres no ria natural, un objeto de estudio del natura- basten para reintegrar al tercero; pues, sienlista, como la mineralogia y la zoologia; crece do bastantes para cubrir los créditos de amla terapéutica, adelanta en sus trabajos y apa-bos, los dos cobrarán sin necesidad de terrece entonces la medicina grande, magestuo- cería. sa como la ciencia mas útil y sublime, como el arte divino por escelencia: los medicamen tos revelan al sacerdote médico los profundos secretos de su admirable poder como cosas inaccesibles é inescrutables á la debilidad del espíritu humano: en esta parte, como en to das las demas de la medicina, es inadmisible el esclusivismo; ni los orgameistas, ni los vitalistas, ni los brousistas, ni los estáticos, ni los humoristas, ni ningun sistema, en fin, es suficiente á comprender con una doctrina única todas las verdades de la terapéutica: es, pues, necesario, que tomemos de cada uno de ellos las verdades que contienen para formar un código de los verdaderos principios de la ciencia médica. TERCERIA. (Jurisprudencia.) Llámase tercer opositor en el lenguaje forense el que se Algunos escritores tratan de las tercerías que interponen las mugeres para el reintegro ó devolucion de su dote, como si fuesen de distinta especie que las que ya hemos clasifcado; pero en realidad no lo son; pues si el dote fué estimado, en cuyo caso no tiene el marido mas obligacion que la de devolver el precio de los bienes dotales, la terceria, que se interponga para conseguir esto será de mejor derecho, y si cl dote fué sin estimar, estando el marido obligado á conservar y devolver los mismos bienes que le entregaron, la tercería que con este fin se interponga será de dominio. Como las tercerías escluyentes son una nueva demanda que ha de producir un litigio diferente del que se está sustanciando, no deben admitirse sin que antes se haya celebrado Juicio de conciliacion con el actor y con el reo. Toda tercería por regla general debe interponerse en el juzgado donde se siguen los autos principales, porque son casos de acumulacion necesaria; y aunque las escluyentes sc interponen con mayor frecuencia en la via de apremio, es indudable que todas ellas pueden ser interpuestas en cualquier estado del juicio. dido por falta de compradores haya de hacerse pago con su adjudicacion, serán adjudicados á aquel que tenga mejor derecho. Si la tercería suspende el juicio, se van uniendo al ramo pendiente los escritos y actuaciones relativas à ella, mas cuando aquel y esta se han de seguir á la vez, debe formarse ramo separado para la última con el objeto de evitar confusion y entorpecimientos. Cuando los bienes de un deudor ejecutado En los escritos en que se interpongan terse han vendido y con su precio se ha hecho el cerias escluyentes debe decirse que sobre su pago al demandante, no es admisible la terce-admision se forma articulo de previo y esperia de prelacion; asi como no lo es la de do-cial pronunciamiento; para que se entienda minio, cuando de los bienes vendidos se ha hecho entrega al comprador. En el primer caso no queda al nuevo acreedor otro medio que esperar hasta que el deudor adquiera otros bienes: en el segundo podrá reivindicar la cosa vendida, dirigiendo su demanda contra el comprador. que estas pretensiones han de sustanciarse con audiencia de las otras partes, y decidirse por medio de un auto separado del que recaiga sobre la principal cuestion del pleito. Propuesta la terceria escluyente, se confiere traslado de ella al actor y al demandado. En la práctica por lo general solo contesta el À la demanda de tercería han de acompa-primero y con él se sigue hasta la terminaçion; ñar, como á todas las demas, los documentos que sirvan para justificarla; mas esta regla no obsta para que la demanda no documentada se admita, si no hay documentos ó se ignora por entonces su paradero, porque en el término de prueba podrán probarse los fundamentos del derecho que se alega. mas cuando el reo quiera defenderse, deberá ser oido como parte legitima y no menos interesada que el actor en la esclusion del tercero. Para contestar este traslado hay nueve dias de término, como en cualquiera otra demanda y los trámites restantes asi en la primera como en la segunda instancia son los de un Es doctrina en que están conformes nues-juicio ordinario; porque á esta clase pertenctros jurisconsultos, y que ademas está apoya-cen las tercerias, aunque la demanda se preda por la práctica de los tribunales, que un acreedor, cuyo plazo para pedir no esté vencido, puede legalmente interponerse como tercero; tanto porque el derecho de prelacion existe desde que se contrajo la obligacion, cuanto porque, á no ser así, el acreedor que habia pedido, conseguiria reintegrarse de su crédito, no obstante haber otro que debiera ser preferido, el cual, no reclamando hasta que no venciese el plazo, podria no encontrar bienes con que ser pagado. sente apoyada en un documento ejecutivo. Asi, pucs, por regla general toda terceria escluyente debe sustanciarse en via ordinaria, porque son un nuevo pleito y no un artículo incidente de aquel en que se interponen. Cuando se propusieren dos ó mas tercerías contra un solo demandado, deberá procederse de otra manera; pues, pidiendo judicialmente tres acreedores contra un mismo deudor, debe ser éste declarado en concurso, y entonces el juicio es universal y de muy distintos trámites. El efecto inmediato de la tercería escluyente es suspender la ejecucion ó el apremio, En los pleitos mercantiles hay tambien lucuando sea dotal, ó cuando se presente con la gar á las tercerías; pero con sujeción á leyes demanda un documento fehaciente en el caso especiales. Segun la ley de enjuiciamiento pade ser dominio; mas si el tercero no presenta ra los negocios y causas de comercio, el teresta clase de documentos, aunque proteste cer opositor debe fundar su derecho en docupresentarlos en el término de prueba, no sementos fehacientes, única prueba que se adsuspenderá ni la ejecucion ni el apremio; si- mite para justificarlo. Propuesta la tercería se no que seguirán su curso, siguiéndose & la par suspende el juicio ejecutivo: 1.o cuando la acla tercería. Tampoco produce esta la suspen-cion deducida es de dominio: 2. cuando prosion de procedimientos, cuando se interpone en jnicio criminal, siendo regla general que en estos casos debe conocerse de ella, formando ramo separado. viene de dote estimada. De la oposicion se confiere traslado al ejecutante y al ejecutado por término de tres dias, y despues de la contestacion se recibe el incidente á prueba, á Cuando la tercería sea de prelacion, pucs- peticion de cualquiera de las partes, si se creto que el tercero y el demandante pretenden yere necesario; y si no, se procede con citacobrar sus respectivos créditos, se deberá con- cion de ellas á la decision de la tercería. El tinuar el juicio hasta la venta de los bienes término probatorio es de veinte dias perentoembargados; pero llegado este caso, debe es-rios, á cuyo vencimiento se entregan los auperarse que se decida la terceria para saber á tos á los interesados por dos dias precisos paquien se ha de pagar primero. Entre tanto el, ra que se instruyan, pasados los cuales, y heprecio de los bienes debe permanecer en sc-cha la citacion para la vista, se sentencia en guro depósito, y cuando por no haberse ven- definitiva. Firme la sentencia, si es favorable TEREBINTÁCEAS. (FAMILIA DE LAS) (Botáni al tercero, se le mandan restituir los bienes, nuestras costas del Océano, del Mediterráneo embargados, siendo la tercería de dominio. y del mar Rojo y junto la isla de Francia. ViSi ha sido de prelacion se forma para sustan- ven en la arena ó dentro de tubos compuestos ciarla ramo separado, y se continúa el juicio de fragmentos de conchas ó de conchas enejecutivo hasta la venta de los bienes, cuyo teras. producto se deposita para entregarlo en su dia al acreedor que obtenga la preferencia. Cuan-ca.) Las terebintáceas, que toman este nombre do tenga el deudor otros bienes, ademas de del pistacho terebinto, ofrecen muchas espelos embargados puede el ejecutante pedir que cies notables por las sustancias balsámicas, se amplie el embargo á ellos, luego que se gomosas ó resinosas que producen. En esta haya propuesto la tercería, y si resultare que familia encontramos los árboles ó arbustos de son suficientes para cubrir ambos créditos, se los cuales se sacan la resina elemí, el bálsacontinuan los procedimientos à instancia del mo de la Meca, la mirra, la trementina de actor, segun su estado, y el tercero usará de Chio, etc. Algunas contienen leche caustica, su derecho contra los comprendidos en su ter- como el zumaque venenoso y otras especies cería. del mismo género. Varios ofrecen frutas pulTERCETO. (Literatura.) El terceto es una posas y refrescantes, ó bien almendras buecombinacion métrica muy usada por los poe-nas para comer y llenas de un aceite dulce, tas españoles, italianos y franceses. Se com- como el pistacho. Las hay, en fin, cuya cortepone de tres versos endecasilabos, de los cua-za astringente se emplea en medicina, como les el primero va rimado con el tercero y ella del schinus molle, ó en las fábricas de cursegundo rima con el primero y tercero del si-tidos, como la de varios zumaques. En geneguiente, observándose este órden en toda la composicion, por larga que sea. Por ejemplo: Fabio, las esperanzas cortesanas Y el que no las limare ó las rompiere, Que el corazon entero y generoso ral las terebintáceas tienen flores poco aparentes; pero en casi todas ellas el follage es muy elegante, y en las regiones ecuatoriales se encuentran algunas especies que forman árboles magníficos. Los caractéres distintivos de esta familia son: Arboles & arbustos de jugos propios resinosos, gomosos ó lechosos. Hojas sin estipulas, alternadas, sencillas, ó bien imparipennatas, rara vez paripennatas. Florescencia terminal ó axilar, dispuesta de diversas maneras (la mayor parte del tiempo en paniculas); flores pequeñas, regulares, bracteadas, generalmente diclines ó poligamas. Cáliz inadherente, persistente ó pocas veces caduco, pentasépalo (á veces tri, tetra ó El terceto se usa generalmente por nues-heptasépalo), idiadelfo ó sinadelfo, casi siemtros poetas en las sátiras y epistolas, sin que pre provisto en el fondo de un disco anular ó por eso deje de emplearse con buen éxito en urceolar; estivacion imbricativa. otro género de composiciones. En todas ellas, Corola idiadelfa (por escepcion nula ó sila conclusion es una cuarteta tambien de en-nadelfa por la base), inserta debajo del disco decasilabos. ó en su ausencia en el fondo del cáliz; pétalos en nismo número que los sépalos y alternos con ellos; estivacion imbricativa ó valvaria. TEREBELA. (Historia natural.) Las terebelas son annélidos de los mares de Europa, pertenecientes al órden de los cefalobranquios Estambres con la misma insercion que la y á la familia de los sabelarios ó anfitrites, y corola, en igual número que los pétalos é inse caracterizan de este modo: anélidos setige-terpositivos, ó bien en número doble y alterros, con cuerpo prolongado y subcilíndrico, nativamente opositivos é interpositivos; filacompuesto de anillos diversiformes, ensan-mentos libres ó algunas veces monodelfas por chado en su tercio anterior y adelgazado por la base; antenas bilobadas, introrsas, longitudetrás; cabeza poco distinta formada de tres dinalmente dehiscentes (nulas en las flores segmentos y superada por barbillas que sirven machos). para la prehension; torax con doce anillos; Pistilo: á veces con una sola histrela uniabdomen con muchos artejos y sin tentáculos; locular, monostila; otras con dos á cinco hisbranquias en forma de arbolillos y dispuestas trelas, igualmente uniloculares, monostilas, por pares en los tres primeros segmentos to- conjuntas, ora por sus ovarios solamente, ora rácicos; pies desemejantes, los torácicos con por sus ovarios y por sus estilos, ó bien sedos remos y los abdominales provistos única-paradas; estigmas libres ó confluyentes en su mente de sedas con ganchos. Dividense en tres tribus, que son: las sencillas, las ficelias y las idalias. Hallanse en base; óvulos solitarios ó gemineos, ascendentes ó caidos; funiculo mas o menos largo que empieza desde lo hondo de la cavidad. Pericarpio: nuez uni-quinque-locular ó carcérula o folicula. Semillas anatrupas (ó á veces campulitrupas), generalmente solitarias; tegumento simple ó doble; perisperma nulo; embrion dicotiledóneo, rectilíneo unas veces, curvilíneo otras. Las terebintáceas presentan muchas relaciones con las celastríneas, las rhamneas, las rutáceas, las rosáceas y las leguminosas. Por su aspecto, se acercan mucho á esta última familia, de las cuales difieren notablemente por sus hojas no estipuladas. Este mismo carácter las distingue de las rosáceas. En ellas admite hoy el ilustre autor del Genera los cuatro grupos siguientes, que varios célebres botánicos consideran como otras tantas familias distintas, reservando á la primera de estas secciones el nombre de terebintáceas. Zona ecuatorial: América, 60; Asia, 40; Australia, 2; Africa, 31. Total, 133. Zona templada: Cabo de Buena Esperanza, 44; Chile, 2; China, 3; Japon, 4; Nepal, 2; region mediterránea, 3; Canarias, 12; Estados Unidos de América, 3; Canadá, 10. Total, 83. Daremos fin á este artículo con algunas nociones históricas sobre las terebintáceas mas interesantes. El alfonsigo (pistacia vera, Lin.) oriundo de Persia y del Cabul, se cultiva hoy en todo el litoral del Mediterráneo. Sus almendras, de un hermoso color verde, son muy nombradas por su escelente sabor. Pueden emplearse, en vez de almendras dulces, para emulsiones. La almendra del anacardium orientale (Lin.), es muy buscada en la India y en las islas Molucas. Su nuez cordiforme va sostenida por un pe zon en espiral, carnoso y mas grueso. La cor1.o Anacardicas ó terebintáceas verda- teza de esta nuez contiene un jugo acre y cáusderas: cáliz provisto de un disco, estivacion tico, que se emplea en veterinaria y en las ende la corola imbricativa, filamentos libres; pis- fermedades cutáneas, y que sirve tambien patilo sencillo ó compuesto de varias histrelas ra la fabricacion de una tinta indeleble. Varios conjuntas en una caja ó cápsula unilocular; autores pretenden que las plantas de este géneóvulos solitarios, colgantes; embrion curvilí-ro tienen la propiedad de exaltar las facultaneo; cotiledóneos carnosos foliáceos: á este des intelectuales. La caoba de manzanas ó género pertenecen los zumaques y los alfón- anacardium occidentale, Lin., ó cassuvium sigos. 2.° Burseraceas: cáliz provisto de un disco; estivacion de la corola valvularia por lo regular; filamentos libres; dos á cinco histrelas conjuntas en una caja bi-quinquilocular; óvulos geminados; estilos soldados ó nulos; drupa de dos á cinco huesos monospermos; embrion rectilíneo; cotiledones carnosos. Ex. bursera. 3. Espondiáceas: cáliz provisto de un disco; estivacion de la corola imbricativa; flamentos libres; cinco histrelas conjuntas en una caja quinquilocular; estilos libres; óvulos solitarios; drupa de hueso bi-quinquilocular. Ex. el mombin ó cirulo de las Antillas. 4. Connaráceas: disco nulo; estivacion de la corola imbricativa, rara vez valvularia; separadas en número de cinco ó en menor número, por causa de aborto; óvulos geminados ascendentes; foliculos monospermos; embrion rectilíneo; cotiledones carnosos. Ex. el connara. pomiferum (Lam.) crece en las Antillas y en la América Meridional. Su fruta es una nuez sostenida por un pezon en espiral y carnoso, y del tamaño de una pera gruesa. Esta parte suculenta es astringente antes de la madurez, pero acaba por ponerse azucarada y de gusto vinoso. Su zumo, mezclado con agua, proporciona una bebida agradable y refrescante, y fermentado, da un licor espirituoso. La cáscara de la nuez contiene un aceite caustico con el cual se hace una tinta que marca la ropa de una manera indeleble. La almendra se come cruda ó tostada. El spondias mombin y spondias purpurea, (Lin.) árbol indígeno de la América Ecuatorial, produce una fruta del tamaño y. de la forma de una ciruela, de donde proviene el nombre de ciruelo de las Antillas que aqui se le da, ó de ciruela de España que se le da en las colonias. La pulpa de esta fruta es ácida y aromatica. Las frutas del spondias amarillo, (spondias cutea y spondias myrobalanus, Lin.) son Se conocen unas ciento ochenta especies mas apreciadas que las del rojo. De este géque puedan con seguridad referirse á esta fa- nero hay otra especie, que es el nervy ó milia. Estas especies pertenecen casi esclusi- árbol de Citeres, (spondias dulcis, Forst; vamente á la zona ecuatorial y á los paises spondias cyterea, Lam.), oriundo de Taití, se poco distantes de los trópicos. Las pocas que cultiva generalmente en los establecimientos crecen en las zonas templadas desaparecen coloniales de la zona tórrida. Sus frutos tiemucho antes de alcanzar los limites septen-nen un gusto de manzana y con ellos se pretrionales. Tambien crecen algunas especies de para una bebida análoga á la sidra. La fruta zumaques en la América Septentrional y en del mangifera indica, (Lin.) es una de las proel Canada; pero de todas las que se encuen-ducciones mas deliciosas de los paises cálidos. tran en el antiguo continente ninguna resiste De ella se cuentan unas cien variedades, de con facilidad un invierno rigoroso en el clima forma, de color y de sabor diversos, que se de París. tienen por depurativas y antiscorbuticas. La distribucion geográfica de las especies es la siguiente: El alfonsigo lentisco pistacia lentiscus, Lin.) es un arbusto indígena de la Europa Aus num, Lin.) En fin, la corteza del zumaque de los curtidores de pieles, (rhus corriaria, Lin.), arbusto indígena del Mediodía de Europa, es objeto de un comercio bastante general, en razon del gran consumo que de él se hace para el curtido de cueros. tral, de Berbería y de Oriente. De él, y por me- so barniz con el jugo de un árbol que llaman dio de cortaduras en su corteza, se obtiene la tsi-chou y es quizás el mismo que el rhus veralmáciga. Esta resina aromática es en la actua- nia del Japon. La goma copal mana de las lidad mucho mas empleada por los perfumis-incisiones que se hacen á la corteza de un zutas que por los médicos. Suelen mascarla las maque que crece en Méjico y en la parte memugeres griegas del Archipiélago, para darseridional de los Estados Unidos (rhus capalliun aliento suave y agradable. La tercbentina ó trementina de Chio se recoge en esta misma isla, del alfonsigo terebinteo (pistacia terebinthus), especie conocida en toda la region mediterránea. De una epecie de amyris (amyris opobalsamum, W.), comun en Arabia, mana el bálsamo de la Meca, al cual se atribuian tantas Los nogales, que al principio calificó moncualidades maravillosas. Otra especie del mis-sieur Jussieu en la categoría de las terebintámo género, el katas de los árabes (amyris ka- ceas, forman hoy un grupo distinto, el de las taf, Forsk.) produce la mirra; asi á lo menos juglandeas. Esta pequeña familia es intermelo atestigua el célebre Forskal. Esta goma re-dia entre las amentáceas y las terebintáceas y sina se emplea todavía como estimulante y tó-se compone de árboles mas o menos elevados, nico. De un boswellia de la India (boswelia ser- de semillas oleaginosas en su mayor parte rata, Roxb.) se saca una resina muy análoga al buenas para comer. verdadero incienso ú oliban, que proviene del Ademas del nogal comun (juglaus regia, thuya articulata, arbolito de la familia de los Lin.), oriundo de Persia y de Cabul, este geneconiferos, descubierto en el Atlas por Mr. Des-ro ofrece varias especies, no menos interesanfontaines. tes, de los Estados Unidos de América. Nos li El nogal oliva (juglans olivaformis, Aic.) Sus nueces tienen la forma de aceitunas, y la almendra que encierran produce escelente aceite. El nogal blanco ó hikory (juglans alba, Lin., juglans tomentosa, Mich.) produce nueces de poco valor; pero se aprecia por su madera, que se emplea en una infinidad de usos. TEREBINTINA. (V. TREMENTINA). El género zumaque ó rhus de los botáni-mitaremos á citar las siguientes: cos es el único del cual existen en el centro El nogal negro (juglans nigra, Lin.), áry el Mediodía de Europa especies que salen en bol enorme, cuya nuez se conserva fresca duplena tierra. De este número es el fastete (rhus rante muchos meses. colinus), que crece espontáneamente en la Europa Austral y se distingue por su hermoso follage verde claro. Las raices de este arbusto producen un color amarillo ó rojo, con el cual se tiñen las telas. El zumaque lampiño (rhus) glabrum, Lin.), el zumaque de Virginia (rhus typhinum, Lin.) y el zumaque elegante (rhus elegans, Ail.) los tres oriundos de los Estados Unidos de América, son muy comunes en los vergeles y en los plantios, y forman cuando TEREBRANTES. (ANIMALES) (Historia natusu follage adquiere un color de púrpura, en ral.) De todas las particularidades que en los otoño sobre todo, árboles de muy buen efecto. animales se observan, la que mas teme el homEl zumaque venenoso (r. toxicodendron, Lin.) bre es sin contradiccion la costumbre que tiearbusto sarmentoso, indígena tambien de los nen algunas especies de taladrar los cuerpos Estados Unidos, es célebre mucho tiempo ha sólidos de varias clases, que emplea para sapor sus cualidades deletéreas. Su jugo, pucs- tisfacer sus necesidades fisicas é industriales. to aunque sea en corta cantidad en contacto Bajo este punto de vista pueden reunirse tocon la piel, basta para producir ampollas, y dos los animales que para proporcionarse su hasta crisipelas y obstinadas hinchazones. Se sustento, depositar sus huevos y hacerse una asegura, sin embargo, que hay personas que habitacion, se sirven de sus instrumentos nano sienten los efectos de este veneno. Algu-turales para perforar ó terebrar los cuerpos nos médicos han empleado el jugo del zuma- sólidos, en cuyo interior encuentran los meque venenoso en dosis muy pequeñas, para el dios de conservarse como individuos y como tratamiento de la epilepsia y de las enfermeda- especie. des cutáneas inveteradas. El zumaque para el El estudio comparativo de la terebracion ó barniz (rhus vernix, Lin.), que, segun dicen, perforacion que esponemos aqui muy sucintacrece tanto en el Japon como en la América mente, comprende tres órdenes de consideraSeptentrional, no es menos venenoso que el ciones que son relativas: 1." las unas á los toxicodendron. Su jugo, que se coagula fá- animales terebrantes: 2." las otras al fenómecilmente al contacto del aire, proporciona un no de esta accion ejercida en sustancias de dibarniz, del cual sacan gran partido los japone-versa naturaleza, por medio de agentes diverses. Cuenta Kocmpfer que las emanaciones de sos y para varios objetos especiales: 3." otras, esta sustancia hacen hincharse los labios y las en fin, á las consecuencias de la terebracion narices y causan á los operarios que le mani-para él hombre que puede utilizarla ó preserpulan dolores de cabeza; para evitarlo se cu- var de ella los cuerpos de que hace uso. bren con caretas. Los chinos hacen un hermo- Nunca deberian las simples picaduras ó 2174 BIBLIOTECA POPULAR. T. XXXIII. 5 |