E pluribus unum: viajes, costumbres, tradiciones, etc

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F. Fé, 1893 - 80 páginas
 

Términos y frases comunes

Pasajes populares

Página 65 - Estos, Fabio, ¡ay dolor! , que ves ahora campos de soledad, mustio collado, fueron un tiempo Itálica famosa. Aquí de Cipión la vencedora colonia fue: por tierra derribado yace el temido honor de la espantosa muralla, y lastimosa reliquia es solamente. De su invencible gente sólo quedan memorias funerales, donde erraron ya sombras de alto ejemplo.
Página xvi - Chimborazo, jamás exploradas por las razas vivientes, sólo resuenan con la voz del trueno y del huracán, y sólo muestran en sus erguidas frentes las injurias del rayo y las huellas de los volcanes. Sus desnudos picos y nevadas breñas están fuera del imperio de la vida y de la muerte. Monumentos eternos, obra de la primera creación: los vientos y las nieblas que vagan por la redondez de la tierra, un día os levaron por anuncio: ¡La humanidad existe! Algún día, contados ya los tiempos, los...
Página 55 - ... llamado Rio-frio, pero los trabajos de la arquitectura solo comienzan desde el caserón, que es un torreón muy fuerte y muy antiguo, situado al principio del camino que sale de la ciudad para el real sitio de San Ildefonso: para que el agua tuviera un movimiento mas acelerado dieron sus artífices á toda la obra un declive de un...
Página xiii - El autor ha dedicado un interesante capítulo al suicidio, asunto éste en que toda legislación , para evitarlo, sería ineficaz. El suicidio no es, en general,, un acto espontáneo de la voluntad del hombre. En la mayoría de los casos , el estado cerebral de los que resuelven desasirse de la vida, les induce y les arrastra á consumar el hecho. Hay, por supuesto , ocasiones en que la calma , la reflexión y la más completa sangre fría, determinan el accidente. Decir que son...
Página xiii - Pero no debemos culparles por tales demostraciones, que son más automáticas en la forma que sinceras y raciona fc.1 fondo. El día en que el Gobierno español suprima esta bárbara costumbre, y como asunto de administración pública disponga que las ejecuciones se efectúen al amanecer en las mismas prisiones, sin previo aviso al público, y sea suprimida la capilla y se notifique al reo su inmediata ejecución como en Francia, mi amigo Llorente verá que la farsa de la piedad española no tendrá...
Página xi - ... pero no comprendo cómo pueda suprimirse en absoluto de la legislación de un país la pena de muerte para los asesinos, los incendiarios y otros delincuentes parecidos, pues éstos no temen las prisiones, ni las penitenciarías , ni los trabajos forzados. La muerte es lo único que temen, y por ser lo único que temen debe dárseles. Por lo demás, la pena de muerte es una institución de derecho natural. Todo hombre puede aplicarla en...
Página ix - ... viajes, trata el escritor en este libro diferentes materias que interesan en alto grado á la sociología. Si á esto se agrega el estilo natural del autor, corriente y fácil, podrá decirse y lo digo, aunque para tanto no me crea juez competente, que el nuevo libro de Llorente reune todas las condiciones que se requieren para ser ameno é instructivo. La semblanza del rey Alfonso XII me ha gustado sobre manera, porque siempre gusta todo retrato que se parece al original.
Página x - Al contrario, creo, como él, que la pena de muerte debe existir en toda sociedad bien constituída, para ser aplicada, por ministerio de la ley, á los autores de delitos atroces que no pueden ser castigados sino con la total supresión de sus personas. Aplaudo que la legislación moderna de algunos países haya suprimido la pena de muerte para los delitos políticos , porque en éstos habrá siempre que reconocer que las causas determinantes son de ordinario complejas y hasta cierto punto...
Página xii - Apenas transcurren quince minutos entre la terrible notificación y el cumplimiento dela sentencia. En Madrid no sólo se acuerda á los reos un plazo •de veinticuatro horas para ser ejecutados — plazo durante el cual deben sufrir horriblemente — sino que la sociedad en masa tiene que ocuparse por fuerza en el asunto al ver discurrir por las calles de la coronada villa un sinnúmero de santeros que van pidiendo limosna, al son de campan1llas, para el alma •del que van á ajusticiar.
Página xii - ... veinticuatro horas de capilla. Esto es atroz, verdaderamente inhumano, y no se concibe cómo tal costumbre, herencia de otros siglos menos civilizados que el nuestro, pueda existir todavía en España. En este respecto , la costumbre francesa me parece mucho más piadosa y conforme con la solemnidad de las circunstancias. Se previene la ejecución al reo...

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