Imágenes de páginas
PDF
EPUB

de los juicios de aguas de Valencia: los que deseen mas detalles pueden consultar la obra escrita (para vergüenza nuestra) en francés por Mr. Jaubert de Passa, única que trata latamente de este asunto, y traducida por D. Juan Fiol en 1844. Nuestro compatriota Ferrandis, ha pintado últimamente en Paris un excelente cuadro que representa el tribunal de acequieros, adoptando para darle mas carácter, los trajes de principios del siglo.

PROVINCIAS VASCONGADAS.

CAPITULO PRELIMINAR.

Importancia de la cuestion de orígen.-Oscuridad histórica de los primeros tiempos. Las provincias durante las épocas romana y gótica.-Los vascongados no fueron cántabros. -Fueron vascones.-Opiniones diversas sobre la ocupacion romana y goda.-Invasion árabe.-Los moros no dominaron el territorio vascongado.-Razones de esta opinion.

Preparados teniamos nuestros trabajos sobre la legislacion de las provincias vascongadas, cuando en uno de los cuerpos colegisladores se suscitó la cuestion general de los fueros en todas sus fases y detalles, adquiriendo gran importancia de actualidad, por el interés que inspiran de un lado, las antiguas costumbres y usos de un país que ha resistido por muchos siglos ciertas innovaciones, y de otro, el deseo de nivelar las provincias vascongadas al resto de la monarquía. La gravedad de esta cuestion que parecia amortiguada, pero que surgió de repente, nos aconsejó retirar nuestros trabajos, hacer nuevos estudios, investigar detenidamente, y profundizar todos los detalles del derecho ó derechos relativos y comunes que puedan alegar las tres provincias vascas, al respeto de sus instituciones, y á la conservacion de unos fueros que no provienen como se ha supuesto de privilegio, sino de contrato paccionado, y que aunque provinieran de privilegio, no solo se hallan elevados á ley y reconocidos y jurados por los monarcas, sino que forman parte de las condiciones con que

las provincias vascongadas en su mayor parte, se unieron á la corona de Castilla.

Dedúcese naturalmente, que para Vizcaya, Álava y Guipúzcoa es capital la cuestion de orígenes, y esencialísimo fijar para las tres, la situacion positiva en que se encontraron, ya con los reyes de Navarra, ya con los de Leon y Castilla durante la edad media, para conocer su existencia social, política y civil; las relaciones que las unieron con los estados vecinos; los compromisos solemnes que estos adquirieron con ellas; las condiciones de alianza, y las bases políticas de anexion formuladas y pactadas de poder á poder, que han sido el fundamento en España de la unidad monárquica.

Que las tres provincias vascongadas comprendiesen mas ó menos territorio: que sus jefes naturales se llamasen señores en vez de reyes: que en las historias y crónicas no figuren como una ó tres naciones desde el principio de la reconquista; ό que su anexion à la corona de Castilla haya sido anterior á la de otros estados de España, en nada influye ni puede influir, para que una vez reconocido el derecho de conservar sus fueros, usos y costumbres al tiempo de anexionarse, deba ser tan respetado, como lo fué por algunos siglos el derecho de Aragon, Cataluña, Valencia y Navarra á conservar sus instituciones, hasta que por causas independientes de la justicia y del derecho, las perdieron en la parte política.

Dejamos á los escritores de antigüedades el cuidado que tanto los ha ocupado, de narrar las vicisitudes del territorio comprendido en las provincias vascongadas desde que segun dicen vino Tubal á España; pasamos por los tiempos fabulosos y por las invasiones de pueblos extraños, y vengamos á la dominacion romana, donde empieza la verdadera época histórica. No han faltado autores como Beuther y otros, que han supuesto no haber sido nunca ocupadas ni aun por los romanos las provincias vascongadas, pero la fundacion de la colonia Flavio Briga por el emperador Vespasiano y el Portus Amanum, ó sea Bermeo, de origen tambien romano, demuestran, que si no la re

parro

pública, el imperio al menos ocupó aquel territorio. Además, en Forua (Vizcaya) se encontraron el año 1762 monedas de plata de Tiberio César, y al hacer una obra en 1770 en la quia de la anteiglesia de Morga, aparecieron en las excavaciones varias piedras con inscripciones casi ilegibles, y en una de ellas del tamaño de media vara en cuadro se leia:

F SEMPRONIE

CONIUGI SUE

POSUIT

MEMORIA

CONS. CCCC

Que Augusto vino á España y que le costó dos sangrientas campañas la reduccion de la Cantabria, es un hecho demostrado, si bien aun hoy existen dudas acerca de si el territorio comprendido en lo que hoy son provincias vascongadas, pertenecia ó no á la gran provincia de Cantabria. Llorente, poco favorable á las provincias vascongadas, asegura, que la Cantabria en tiempo de los romanos, no comprendia á los Autrigones (vizcainos), Caristos (alaveses), Bardulos (guipuzcoanos), Vascones (navarros) y Berones (riojanos). En apoyo de esta opinion, el autor de una de las ediciones de la historia de España de Mariana, al expresar que el rey D. Pelayo habia sido anteriormente gobernador de Cantabria, añade: que esta provin— cia comprendia durante el imperio gótico, las montañas de Búrgos, las Asturias de Santillana y parte de las de Oviedo, pero no la Vizcaya ni Guipúzcoa. Sin embargo, nosotros creemos que los grandes elogios hechos por Strabon de los antiguos cántabros, cuya principal virtud era el imponderable entusiasmo á su libertad é independencia, calificada por los antiguos de insania cantabrica, y el órden de colocacion que sigue en su historia, persuaden, de que si el territorio de las provincias vascongadas no pertenecia precisamente á la provincia de Can

tabria, sus naturales participaban al menos de las mismas condiciones morales de los cántabros.

En lo que no aparece duda es, en que el territorio vascongado componia parte durante el siglo IV de la gran provincia de Vasconia, cuyos límites, segun Ptolomeo eran el rio Vidasoa, con todo el territorio de San Sebastian y Oyarzun, confinando con los bardulos por Tafalla; abrazando á Calahorra allende el Ebro; continuando al oriente por Tarazona y Aragon, y comprendiendo los territorios de Huesca y Jaca con quince ciudades principales y sus jurisdicciones, que todas concurrian al convento jurídico de Zaragoza.

Durante, pues, las ocupaciones romana y gótica, nos parece probable, que una parte al menos de las provincias vascongadas estuviera bajo el yugo de los invasores, porque además de lo dicho, durante la primera, hasta se conocieron entre los romanos legiones vascas; y en cuanto á la segunda, si bien parece que en algunos puntos de la Vasconia mas inmediatos al Pirineo y á la costa, hubo tenaz resistencia en diferentes períodos de los tres siglos que duró aquella ocupacion, al fin fué superada y aun calmadas las frecuentes sublevaciones, por los reyes Leovigildo, Gundemaro, Suintila, Recesvinto y definitivamente por Wamba. Puede, pues conjeturarse, segun las mas fundadas versiones, que al verificarse en el siglo VIII la invasion sarracena, así la antigua provincia de Cantabria como la Vasconia, componian parte integrante y pacífica de la dilatadísima monarquía gótica.

Sin embargo, los vascongados sostienen con buenas razo— nes su absoluta independencia de los imperios romano y gótico. Dicen, que los pueblos dominadores dejan signos indelebles y auténticos en los dominados, cuando, como se supone acaeció en España, dura siglos la dominacion, y en el idioma, leyes, costumbres y hasta el tipo físico de la raza vascongada, se ven diferencias esencialísimas con los demas habitantes de la península. En efecto, el idioma vascuence, ó sea euskaro, tiene caractéres típicos especiales y muy distintos de los demas

TOMO VIII.

3

« AnteriorContinuar »