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seles el Sol junto á Gabaa, que está en y habiendo abusado de ella toda la la tribu de Benjamín: noche, la dexáron quando venia la ma

15 Y torcieron ácia ella, para que-ñana. darse allí. Y luego que entráron, sen- 26 Mas la muger, retirándose ya las táronse en la plaza de la ciudad, y no tinieblas, vino á la puerta de la casa, hubo siquiera uno que los quisiese hos-donde estaba su señor, y cayó allí. pedar.

16 Quando he aquí que se dexó ver un hombre anciano, que volvia del campo y de su labor al anochecer, el qual era tambien del monte de Ephraim, y habitaba como forastero en Gabaa. Y los hombres de aquella region eran hijos de Jemini.

27 Quando fué ya de dia, levantóse el marido, y abrió la puerta, para continuar el camino comenzado: y he aquí que su muger yacia delante de la puerta con las manos tendidas sobre el umbral.

28 A la que él creyéndola dormida, le decia: Levántate, y vamos. Pero como ella no respondiese, hallando que estaba muerta; tomóla, y cargóla sobre su asno, y volvióse á su casa.

17 Y alzando los ojos, vió el anciano á aquel hombre sentado en la plaza de la ciudad con sus carguillas: y díxole: ¿De dónde vienes? ¿y á dónde vas? 29 Apenas hubo entrado en ella, to18 El qual le respondió: Hemos mó un cuchillo, y dividiendo el cadáver partido de Bethlehem de Judá, y vamos de su muger con sus huesos en doce pará nuestra casa, que está al lado del tes y trozos, enviólos á todos los térmimonte de Ephraim, desde donde habia-nos de Israel. mos ido á Bethlehem: y ahora nos en- 30 Y quando esto viéron, cada uno caminamos á la casa de Dios, y ninguno nos quiere recoger en su casa,

19 Aunque tenemos paja y heno para pienso de los asnos, y el pan y vino que he menester yo y tu sierva, y el criado, que está conmigo: nada nos falta sino posada.

20 Al que respondió el anciano: La paz sea contigo, yo te daré todo lo necesario: solamente te ruego, que no te quedes en la plaza.

21 Y con esto llevóle á su casa, y dióle pienso para los asnos: y despues

que se laváron los pies, sirvióles de

cenar.

exclamó diciendo: Jamas se ha visto una cosa tal en Israél, desde el dia en que subieron de Egipto nuestros padres, hasta este tiempo: decid lo que os parece, y de comun acuerdo resolved, qué es lo que se debe hacer en este caso.

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Israel, y se congregáron á una, ALIERON pues todos los hijos de

22 Mientras estaban cenando, y que como si fuera un solo hombre, desde con la comida y bebida daban algun Dan hasta Bersabee, y la tierra de recobro á sus cuerpos fatigados del Galaad, para consultar al Señor en camino, llegáron unos hombres de a- Maspha: quella ciudad, hijos de Beliál (esto es, 2 Y todos los ángulos de los pueblos, sin yugo) y cercando la casa del ancia- y todas las tribus de Israél acudiéron á no, comenzáron á dar golpes en la la Junta del pueblo de Dios, quatropuerta, gritando al dueño de la casa, y cientos mil de a pie, hombres de armas. diciendo: Sácanos acá ese hombre, que 3 (No se ocultó á los hijos de Benentró en tu casa, para que abusemos jamin, que habian subido á Maspha los de él. hijos de Israél.) Y preguntando al Le23 Y salió á ellos el anciano, y dixo: vita, marido de la muger que habia No querais, hermanos, no querais co-muerto, cómo se habia executado una meter semejante maldad: por quanto maldad tan enorme,

este hombre ha entrado á hospedarse 4 Respondió: Llegué á Gabaa de en mi casa, desistid pues de semejante Benjamín con mi muger, y me hospedé locura : en ella:

24 Tengo una hija doncella, y este hombre tiene su muger, os las sacaré, para que las abatais, y sacieis vuestra pasion: solamente os ruego, que no cometais con un hombre esta maldad contraria á la naturaleza.

5 Quando unos hombres de aquella ciudad cercáron de noche la casa, donde posaba, con designio de matarme; y despues de haber ultrajado á mi muger con una furiosa é increible lascivia, por último murió.

25 No querian ceder á sus razones. 6 Y tomándola yo, la dividí en trozos, Lo qual quando vió el Levita, sacóles y enviélos á todos los términos de vuessu muger, y la abandonó á sus ultrages: tra posesion: porque nunca se ha cos

metido en Israél una maldad tan grande,| 21 Mas saliendo de Gabaa los nijos ni un exceso tan abominable. de Benjamín, matáron en aquel dia 7 Presentes estais aquí todos los hi-veinte y dos mil hombres de los hijos jos de Israél, resolved lo que debeis de Israel. hacer.

8 Y todo el pueblo estando en pie, respondió como si hablara por boca de un solo hombre: No nos retirarémos á nuestras tiendas, ni entrará ninguno en

su casa:

9 Hasta que de comun acuerdo exeCutemos esto contra Gabaa.

10 Escójanse diez hombres de cada ciento de todas las tribus de Israél, y ciento de mil, y mil de diez mil, para que lleven víveres al exército, y podamos pelear contra Gabaa de Benjamín, y darle el pago que merece por su maldad.

11 Y se unió todo Israél contra esta ciudad, como si fuera un solo hombre, con un mismo designio, y con la misma resolucion.

12 Y enviaron mensageros á toda la tribu de Benjamín, para decirle: ¿Cómo se ha cometido entre vosotros maldad tan detestable?

13 Entregad los hombres de Gabaa, que cometieron este crímen, para que mueran, y sea quitado el mal de Israél. Los Benjamitas no quisiéron dar oidos al mensage de sus hermanos los hijos de Israél:

14 Sino que acudiéron á Gabaa de todas las ciudades, que eran de su suerte, para darles socorro, y pelear contra todo el pueblo de Israél.

15 Y fuéron contados veinte y cinco mil Benjamitas que sacaban espada, sin los moradores de Gabaa,

22 Los hijos de Israél confiados en su valor y en su número, ordenáron de nuevo el exército en el mismo lugar, en que antes habian combatido:

23 Pero fuéron ántes á llorar delante del Señor hasta la noche: y á consultarle, y decirle: ¿Debo salir otra vez á pelear contra los hijos de Benjamín nuestros hermanos, ó no? El Señor les respondió: Subid contra ellos, y trabad combate.

24 Y habiendo movido los hijos de Israél el dia siguiente para pelear contra los hijos de Benjamin,

25 Saliéron los hijos de Benjamín de las puertas de Gabaa: y viniendo á su encuentro, hicieron en ellos una mortandad tan grande, que derribáron en tierra diez y ocho mil hombres que sacaban espada.

26 Por lo qual todos los hijos de Israél viniéron á la casa de Dios, y sentados lloraban delante del Señor: y ayunáron aquel dia hasta la tarde, y le ofrecieron holocaustos y hostias pacíficas,

27 Y le consultáron sobre su estado, En aquel tiempo estaba allí el arca de la alianza de Dios,

28 Y Phinees hijo de Eleazar hijo de Aarón presidía en la casa. Consultáron pues al Señor, y dixéron: ¿Debemos salir aun á pelear contra los hijos de Benjamín nuestros hermanos, ó estarnos quietos? A los quales dixo el Señor : Salid, porque mañana los pondré en vuestras manos.

16 Que eran setecientos hombres muy esforzados, y que peleaban igual- 29 Y los hijos de Israél pusieron mente con la izquierda que con la de-emboscadas al rededor de la ciudad de recha y tan certeros en tirar piedras Gabaa: con la honda, que podian dar en un 30 Y esta tercera vez formáron el cabello, sin que el golpe de la piedra exército en batalla contra Benjamín, cotorciese á otra parte. mo la primera y la segunda.

17 Y de la gente de Israél, fuera de 31 Mas los hijos de Benjamín, saliélos hijos de Benjamín, fuéron contados ron tambien osadamente de la ciudad, quatrocientos mil hombres que sacaban y fuéron siguiendo largamente el alcanespada, y á punto de pelea. ce de sus contrarios que huian: de 18 Los quales levantándose viniéron manera que hiriéron á algunos de ellos á la casa de Dios, esto es, á Silo: como el primero y segundo dia, y may consultaron al Señor, y dixéron: táron como unos treinta hombres de ¿Quién será el caudillo de nuestro ex-los que iban huyendo por dos veredas, ercito para pelear contra los hijos de que iban la una á Bethél, y la otra á Benjamin? A los quales respondió el Gabaa : Señor: Judá sea vuestro caudillo.

32 Porque creyéron que los iban 19 Y levantándose luego de mañana acuchillando como solian. Mas ellos los hijos de Israél, acamparon cerca fingiendo con arte que huían, formáron de Gabaa. el designio de apartarlos de la ciudad, y como en retirada llevarlos á las dichas veredas.

20 Y avanzándose desde allí para pelear contra Benjamín, comenzáron á combatir la ciudad.

33 Entonces saliendo todos los hijos

de Israel de sus puestos, se ordenáron | muertos en aquel lugar, todos hombres en batalla en un sitio llamado Baaltha- de guerra muy valientes. már. Los que estaban en celada al rededor de la ciudad, comenzáron tambien á dexarse ver poco á poco.

45 Lo qual quando viéron los Benjamítas que habian quedado, huyéron al desierto y se encaminaban á la peña llamada Remmón. Y como se hallaban desordenados, y huian dispersos, matáron tambien en aquella huida cinco mil hombres. Y pasando adelante, fuéron siguiendo su alcance, y pasáron aun á cuchillo otros dos mil.

34 Y á adelantarse por la parte occidental de la ciudad. Y asimismo los otros diez mil hombres del exército de Israel desafiaban á los moradores de la ciudad para que saliesen al combate. Y se empeñó la accion contra los hijos de Benjamín y no entendiéron que por todas partes tenian sobre sí la mu-muriéron en diversos lugares, fuéron veinte y cinco mil hombres de guerra, muy diestros en el manejo de las armas.

erte.

35 Y el Señor los hirió delante de los hijos de Israél, y matáron de ellos en aquel dia veinte y cinco mil y cien hombres, todos gente de guerra, y que sacaban espada.

36 Mas los hijos de Benjamín, viendo que iban de vencida, comenzáron á huir. Lo que advertido por los hijos de Israél, les hicieron lugar para que huyeran, y vinieran á dar en las celadas, que tenian puestas junto á la ciudad.

37 Y estos saltando de repente de las emboscadas, y volviendo Benjamín las espaldas á los que los acuchillaban, entráron en la ciudad, y la pasáron á filo de espada.

38 Y habian dado por señal los hijos de Israél á los que habian puesto en celada, que luego que se hiciesen dueños de la ciudad, encendiesen fuego para darles aviso de que la habian tomado, con el humo que subiria á lo alto.

39 Viendo esto los hijos de Israél que aun estaban en el combate (pues los hijos de Benjamín pensáron que aquellos huian, y los cargaban mas de cerca, por haber muerto a treinta hombres de su exército)

40 Y viendo subir de la ciudad como una columna de humo: y los de Benjamín volviendo tambien á mirar ácia atras, como viesen tomada la ciudad, y que las llamas subian á lo alto:

41 Entonces los que antes habian fingido huir, haciendo ya frente, resistian con mas vigor. Lo qual visto por los hijos de Benjamín, volviéron las espaldas huyendo,

42 Y comenzáron á ir al camino del desierto, persiguiéndolos aun hasta allá los enemigos. Y cortáronlos tambien los que habian incendiado á la ciudad.

43 Y así acaeció, que por una y otra parte eran acuchillados por los enemigos, y perecian sin tener acogida. Cayéron muertos, y quedáron tendidos por el suelo á la parte oriental de la ciudad de Gabaa.

44 Diez y ocho mil hombres fuéron

46 Y así todos los de Benjamín, que

47 Por lo qual de toda la gente de Benjamín no quedaron sino seiscientos hombres, que pudiéron escapar, y guarecerse en el desierto y se estuvieron quatro meses en la peña de Remmón.

48 Y los hijos de Israél, vueltos del combate, pasáron á cuchillo el resto de la ciudad, desde los hombres hasta las bestias, y todas las ciudades y aldehuelas de Benjamín fueron consumidas de la voracidad de las llamas.

CAPITULO XXI.

Es arruinada Jabes-Galaad. Se aplaca el Señor por medio de la penitencia y sacri ficios. Se dan quatrocientas doncellas á la tribu de Benjamin para repararla, y otras doscientas, que ellos robáron

Silo.

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ICIERON tambien un juramento en Maspha los hijos de Israél, y dixéron: Ninguno de nosotros dará su hija por muger á los hijos de Benjamín.

2 Y viniéron todos á la casa de Dios. á Silo, y permaneciendo á vista de ella hasta la noche, alzáron la voz, y comenzáron á llorar con grandes alaridos, diciendo:

3 ¿Por qué, Señor Dios de Israél, ha acaecido esta calamidad en tu pueblo, que una de las tribus fuese hoy quitada de entre nosotros?

4 Y levantándose el dia siguiente al romper el dia, erigiéron un altar: y ofreciéron en él holocaustos, y víctimas de paz, y dixéron :

5 ¿Quién entre todas las tribus de Israél es el que no subió con el exército del Señor ? Porque quando estaban en Maspha, se habian obligado con un gran juramento á hacer morir á aquellos que faltasen.

6 Y arrepentidos los Israelitas por lo que habian hecho con Benjamín su hermano, comenzáron á decir: Una tribu ha sido quitada de Israél,

7 ¿De dónde tomarán mugeres ? por

que todos de comun acuerdo hemos cuidado, y con sumo zelo, que no sea jurado, que no les dariamos nuestras borrada una tribu de Israél. hijas.

8 Por esto dixéron: ¿Quién de todas las tribus de Israél es el que no subió al Señor en Maspha? Y hallóse que los moradores de Jabes-Galaad no se habian hallado en aquel exército.

9 (Y aun en aquel tiempo que estuvieron los demas en Silo, no se halló allí ninguno de ellos.)

10 Enviáron pues diez mil hombres muy valientes, y diéronles esta órden: Id, y pasad á cuchillo á los moradores de Jabes-Galaad, tanto á las mugeres como á sus niños.

11 Mas al mismo tiempo debereis estar atentos á esto: Matad á todos los varones, y todas las mugeres, que conociéron varones, mas dexad con vida á las doncellas.

18 Pues no podemos darles nuestras hijas, obligados como estamos con el juramento y maldicion, en que diximos Maldito sea el que diere de sus hijas muger á Benjamín.

19 Y tomáron esta resolucion, y dixéron: He aquí que está cerca la solemnidad anual del Señor en Silo, que está á la parte septentrional de la ciudad de Bethel, y al oriente del camino, que desde Bethel va á Sichém, y al Mediodia de la ciudad de Lebona.

20 Y diéron órden á los hijos de Benjamín, y dixéronles: Id, y escondeos en las viñas.

21 Y quando viereis salir á las doncellas de Silo á formar sus danzas segun costumbre, salid de repente de las viñas, y robad cada uno la suya para muger, 12 Y fuéron halladas en Jabes-Ga-y marchaos á la tierra de Benjamín. laad quatrocientas doncellas, las quales no habian conocido cama de varon, y llevaronlas al campamento de Silo, en la tierra de Chânaán.

13 Y enviaron mensageros á los hijos de Benjamín, que estaban en la peña de Remmón, y diéronles órden, de que los admitiesen en paz.

14 Y vinieron entónces los hijos de Benjamín, y les fueron dadas mugeres de las doncellas de Jabes-Galaad: mas no halláron otras, que poderles dar de la misma manera.

15 Y todo Israél tuvo gran pesar, é hizo penitencia por la mortandad de una de las tribus de Israél.

16 Y dixéron los mas ancianos: ¿Qué harémos con los otros, que han quedado sin mugeres ? Todas las mugeres de Benjamin han perecido,

17 Y debemos procurar con el mayor

22 Y quando vinieren sus padres, y hermanos, y comenzaren á querellarse contra vosotros, y pendenciar, les diremos: Tened piedad de ellos: pues no las robáron por derecho de guerra ni como vencedores, sino que despues de haberos suplicado que se las diérais, se las negásteis, y así la culpa está en vosotros.

23 Y los hijos de Benjamín lo hiciéron, como se les habia mandado: y conforme á su número robáron de las que danzaban, cada uno una muger para sí y fuéronse á su tierra, y edificando las ciudades, habitáron en ellas.

24 Los hijos de Israél se volviéron tambien á sus tiendas por tribus, y por familias. En aquellos dias no habia rey en Israel: sino que cada uno hacia lo que bien le parecia.

EL LIBRO DE RUTH.

CAPITULO I.

Elimelech Bethlehemita en una grande carestia abandona su patria, y se va á tierra de Moab con Noemi su muger y con dos hijos; pero habiendo él muerto allt y sus dos hijos, vuelve Noemi á Bethlehem con Ruth

su nuera.

EN

N los dias de un juez, quando gobernaban los jueces, hubo una grande hambre en la tierra. Y fué un hombre de Bethlehem de Judá, á pere

grinar en la region de Moáb con su muger, y dos hijos.

2 El se llamaba Elimelech, y su muger Noemi: y los dos hijos, el uno Mahalón, y el otro Chelión, Ephratheos de Bethlehem de Judá. Y habiendo entrado en el pais de Moáb, moraban allí.

3 Y murió Elimelech marído de Noemi: y quedo ella con sus hijos.

4 Los quales se casáron con mugeres

Moabitas, que se llamaban la una Or-la, ni persuadirla que se volviese á los
pha, y la otra Ruth. Y estuvieron allí suyos:
diez años,

5 Y muriéron los dos, es á saber, Mahalón y Chelión: y quedó la muger huérfana de los dos hijos y del marido. 6 Y levantóse con sus dos nueras de la region de Moáb, para volverse á su patria por haber oido decir que el Senor habia vuelto la vista hácia su pueblo, y les habia dado que comer.

7 Salió pues del lugar de su peregrinacion con sus dos nueras: y quando estaba ya en el camino para volver á la tierra de Judá,

8 Les dixo: Id á la casa de vuestra madre, el Señor haga con vosotras misericordia, como la hicisteis vosotras con los difuntos y conmigo.

19 Y partiéron juntas, y llegáron á Bethlehem. Y luego que entraron en la ciudad, prontamente se esparció entre todos la fama: y decian las mugeres : Esta es aquella Noemi.

20 A las quales dixo: No me llameis Noemi (esto es, hermosa) sino llamadme Mara (esto es, amarga) porque el Todopoderoso me ha llenado en extremo de amargura.

21 Salí llena, y el Señor me ha hecho volver vacía. ¿Por qué pues me llamais Noemi, habiéndome humillado el Señor, y afligido el Todopoderoso ?

22 Vino pues Noemi con Ruth Moabita su nuera, de la tierra de su peregrinacion y volvió á Bethlehem, 9 Os conceda que halleis descanso quando comenzaban á segarse las en las casas de los maridos, que os han cebadas.

de caber en suerte. Y las besó. E

:

CAPITULO II.

llas alzando la voz, se pusieron á llo-Ruth obligada de la necesidad va à espigar en

rar,

10 Y á decir: Contigo iremos á tu pueblo.

11 A las quales respondió ella: Volveos, hijas mias, ¿para qué venís con

el campo de Booz, el qual la recibe con agrado. Vuelve Ruth muy alegre à su suegra, llevando cebada y lo que le habia sobrado de la comida, y sabe de ella, que Booz es pariente suyo.

migo? ¿Por ventura tengo yo mas hi-YELIMELECH su marido tenia jos en mi vientre, para que podais esperar de mí maridos?

12 Volveos, hijas mias, é idos: porque yo ya estoy acabada de la vejez, y no soy del caso para matrimonio: y aun quando esta noche pudiera concebir, y parir hijos,

13 Si los quisierais esperar hasta que creciesen, y llegasen á los años de la pubertad, seriais ántes viejas que casadas. No, hijas mias, no querais esto: porque vuestra angustia agrava la mia, y la mano del Señor está levantada contra mí.

14 Ellas entónces alzando la voz, comenzáron de nuevo á llorar: Orpha besó á su suegra, y volvióse: mas Ruth no se desasió de su suegra.

15 A la que dixo Noemi: Mira, tu cuñada se ha vuelto a su pueblo, y á sus dioses, vete con ella.

16 Ruth la respondió: No te me opongas mas para que te dexe, y me vaya: porque á donde quiera que fueres, iré y donde morares, yo tambien moraré. Tu pueblo será mi pueblo, y tu Dios será mi Dios.

17 La tierra que te recibiere en tu muerte, en esa moriré : y allí tendré el lugar de mi sepulcro. Esto y aun mas haga conmigo el Señor, si otra cosa que la muerte me separare de tí.

un pariente, hombre poderoso, y muy rico, llamado Booz.

2 Y dixo Ruth la Moabita á su suegra: Si lo mandas, iré al campo, y recogeré las espigas, que escaparen de las manos de los segadores, donde quiera que hallare gracia con algun padre de familias, que use de clemencia conmigo. Y ella la respondió: Anda, hija mia.

3 Salió pues y recogia las espigas á espaldas de los segadores. Y aconteció, que aquel campo tenia por dueño a uno llamado Booz, que era de la parentela de Elimelech.

4 Y he aquí que vino él de Bethlehem, y dixo á los segadores: El Señor sea con vosotros. Y ellos le respondiéron: Bendígate el Señor.

5 Y dixo Booz al jóven, que cuidaba de los segadores: ¿De quién es esta muchacha?

6 Al que respondió: Esta es aquella Moabita, que vino con Noemi del pais de Moab,

7 E hizo súplica de recoger las espigas, que se fuesen quedando, siguiendo los pasos de los segadores: y desde la mañana hasta ahora se está en el campo, y ni por un momento se ha vuelto a su casa.

8 Y Booz dixo á Ruth: Oye, hija, 18 Viendo pues Noemi que Ruth no vayas á otro campo á espigar, ni te con tanta resolucion habia determinado apartes de este lugar: mas incorporate irse con ella, no quiso mas contradecir-con mis muchachas,

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