PRIM es nombrado Subinspector de Carabineros de Andalucía.- Toma posesion de su cargo. Elegido Diputado por Tarragona, dá su voto en favor de la Regencia del Duque de la Victoria.-Esfuerzos para derribar á Espartero.-Varios cambios de gabinete.-Célebre sesion del Congreso (20 mayo de 1843).-Pronunciamiento de Reus -Su defensa.-Se instala una Junta suprema Provisional de la provincia, que fija sucesivamente su residencia en Sabadell y Manresa -El general Cortinez se adhiere al levantamiento con la guarnicion de Barcelona.-El gobernador de Monjuich, Sr. Chalecu, se niega á la entrega del castillo.-PRIM entra en Barcelona con la Junta suprema de la provincia y dirige la palabra al pueblo desde el balcon de las Casas Consistoriales.Disposiciones de la Junta suprema.-PRIM asiste al teatro en donde es objeto de una gran ovacion.-Sale de Barcelona al frente de las fuerzas organizadas por encargo de la Junta.-Llega al Bruch.- Retirada de Zurbano.-Salida de Madrid del Duque de la Victoria.-Se presentan en Barcelona los señores Serrano y Gonzalez Bravo.-Serrano dá un manifiesto y es nombrado ministro universal-Llegada á Valencia de Narvaez y otros jefes espatriados.- Destitucion del regente.-Reus es declarada ciudad con el título de esforzada.-Se instala una Junta para proceder al derribo de las murallas de Barcelona -Discordancia entre los caudillos del pronunciamiento.

A GUERPO DE

NSIGUIENDO el órden de los sucesos, comprenderemos en esta parte la reseña de los hechos que se relacionan con la vida política del Conde de Reus.

Solo considerando lo mucho que ha figurado el general PRIM en los acontecimientos que mas han contribuido á fijar la suerte de la nacion, y teniendo en cuenta que entre los lectores

de este libro no faltarán quizá algunos que los hayan preparado y hasta

dirigido, podrá medirse la verdadera importancia de lo que vamos á tratar.

Reconociendo los deberes que nos impone el discurrir sobre un pasado que tanta influencia puede ejercer en el destino del pueblo español, siquiera no sirva mas que para señalarle la direccion de un nuevo horizonte, procuraremos hacerlo de manera que los sucesos que recorramos sean bien comprendidos, y mas fecunda su memoria, descartando al efecto todo aquello que pueda dar lugar á comparaciones que muchas veces el interés encona y que la pasion desfigura. Delicada es la tarea que emprendemos. Y confesamos ingénuamente que aun cuando creamos aparecer ante el público describiendo los hechos con imparcial mirada, será muy difícil que muchas de nuestras apreciaciones satisfagan á todos, y mucho menos á los que, víctimas de principios esclusivistas, rechazan toda sujecion, toda idea de unidad. Confiamos, sin embargo, en que la independencia de carácter, y una firme voluntad cual pocas, nos darán la fuerza suficiente para conseguir que se rectifique el juicio de ciertos actos, juzgados solo por el prisma de antecedentes cuya tendencia haya podido ser la de socavar el prestigio de reputaciones bien adquiridas, ó de todo un partido.

En julio de 1841 fué PRIM nombrado Subinspector de carabineros de Andalucía, cumpliendo su espinoso cometido con una entereza á toda prueba y con la delicadeza propia de su carácter (1). —Elegido diputado por la provincia de Tarragona, á la cual debe su bautismo político, tomó el mismo año asiento en el Congreso; durante aquella borrascosa legislatura, se distinguió en repetidas ocasiones por el celo con que defendia los intereses de Cataluña, y tuvo por conveniente votar en favor de la regencia del Duque de la Victoria. Despues formó en las filas de la oposicion al lado de los jefes del partido progresista, por no parecerle acertada la marcha del gobierno del Regente,

(1) En un escrito que tenemos à la vista se refiere que cuando PRIM llegó á Granada, los deseos y la ansiedad de aquella poblacion eran tales por conocer al esclarecido catalan, que el general Gonzalez Llanos, encargado interinamente del mando militar, le acompañó una noche al palco de la Capitanía general con el objeto de satisfacer la curiosidad de los granadinos; y que habiendo sabido PRIM el motivo porque era obsequiado, manifestó con su natural modestia que agradecia en el alma tanta deferencia, pero que no se consideraba acreedor á ella.

tomando mas tarde una parte muy principal en los sucesos que sobrevinieron.

Prescindamos de las cuestiones políticas que se suscitaron á la conclusion de la guerra civil, algunas de las cuales ensangrentaron las calles de Barcelona, ya bajo la figura del motin de las levitas, ya bajo otras formas mas sérias, y fijémonos en el año 1843 como el mas rico y el mas trascendental en acontecimientos que registra nuestra historia moderna.

Mucho antes que se reunieran las córtes convocadas para el 30 de abril, los enemigos del Regente organizaron dos comités con el fin de combatirle en todo terreno; el uno lo formaban los señores Casa-Irujo, Isturiz, Rivaherrera, Pidal, Pestaña, Olivan, Carrasco, Rios Rosas (D. Antonio) y Sartorius.-D. Joaquin María Lopez era el jefe de los progresistas que combatian el poder, distinguiéndose su oposicion hasta el punto de publicar un manifiesto en que se censuraba violentamente la conducta de Espartero, á quien culpaban de no haber contentado á ninguno de los partidos militantes. Abiertas las córtes, fué derrotado el ministerio en la eleccion de la mesa, y en su consecuencia Rodil y sus compañeros hicieron dimision de sus carteras. Despues de ser llamados los presidentes del Senado y del Congreso, y el Sr. Olózaga, obtuvo por último el encargo de formar el nuevo gabinete D. Joaquin María Lopez, jefe de una fraccion muy numerosa, siendo aprobada la candidatura que hizo en favor de D. Manuel María de Aguilar para ministro de Estado; D. Francisco Serrano y Dominguez, para guerra; D. Joaquin de Frias, para marina; D. Mateo Miguel Ayllon, para hacienda, y D. Fermin Caballero, para interior, reservándose Lopez la presidencia con el ministerio de gracia y justicia. Debe advertirse, que, escepto el presidente, ninguno de estos señores pertenecian al Congreso, lo cual disgustó mucho á los hom-bres de rectos principios, porque equivalia á prescindir de las prácticas constitucionales. Solo los que preparaban el terreno para satisfacer sus miras particulares, acogieron con júbilo la formacion del ministerio Lopez. Las siguientes líneas que tomamos de la «< Historia militar y política del general Espartero,» revelan mas que nada el carácter de las circunstancias que en aquella época atravesaba el país. «Se avisó de París, dice la crónica, con bastante anticipacion á

la formacion del ministerio Lopez á un personaje esparterista, antiguo amigo de dicho señor y de categoría en la Córte, que se habia celebrado en la morada de la reina Cristina una reunion entre los principales corifeos emigrados pertenecientes al moderantismo, en la que acordaron los medios de conseguir el objeto que se habian propuesto en la rebelion de octubre, siendo entre otros el de ganar á varios jefes del partido progresista, presentándoles el negocio bajo cierto aspecto, y que de estos el primero á que se llegaria habia de ser el Sr. Lopez, saliendo al efecto de París algunos comisionados con instrucciones y grandes sumas de dinero. La fé que merecia el sujeto que daba la noticia, la armonía en que estaba esta con las comunicaciones recibidas igualmente por el gobierno, y el sincero aprecio que profesaba dicho sujeto del Sr. Lopez con otras nobles y patrióticas consideraciones, decidiéronle al fin á tener una entrevista con aquél, á quien participó cuanto ocurria, manifestando el Sr. Lopez el mas espresivo reconocimiento al paso generoso de su amigo; y convinieron en el modo sencillo de prevenir el mal y darse mútuos avisos de lo que acaeciera. No pasaron muchos dias sin que todo azorado buscase Lopez à su amigo para noticiarle que se le habian presentado los comisionados de París buscándole como abogado, aunque no habian tardado en declararle su importante mision, queriendo fascinar su patriotismo con las palabras de reconciliacion, olvido, libertad y órden, halagándole además con la idea de que iba á ser el héroe bendecido de todos los españoles. Lopez aseguró á su amigo que rechazó á los comisionados con indignacion, y se empeñó en publicar aquella negra seduccion en el congreso; mas advertido de la imprudencia de semejante paso, del que se dió cuenta al ministro de la gobernacion, desistió de ello contentándose con hacer algunas indicaciones en uno de sus discursos de aquellos dias. « El hecho es que el Sr. Lopez cayó >>en el lazo, y que Espartero fué vendido traidoramente habiendo te>>nido mucha parte de culpabilidad sus mas íntimos amigos, porque >>no descubrieron oportunamente al país las tramas de los conspira»>dores contra la libertad. »

En la sesion del 11 de mayo esplanó Lopez su programa de gobierno. Despues de manifestar que el regente le habia encargado que consultara en todo las reglas parlamentarias y de reconocer que el

jefe de Estado le animaban los mejores deseos por el bien y la felicidad de la patria, dijo que el nuevo ministerio reducia à dos solos artículos su profesion política: observar religiosamente los principios constitucionales, y procurar el desarrollo del gérmen de felicidad que estos mismos principios simbolizaban. Añadió que para desenvolver su pensamiento, se proponia establecer una administracion paternal; someter bien pronto à las córtes un proyecto de ley de amnistía la mas lata, à partir desde la conclusion de la guerra civil; respetar la prerrogativa electoral; rechazar, puesto que los condenaba de la manera mas clara y mas abierta, los estados de sitio, las medidas escepcionales y las consecuencias que producen; respetar la libertad de imprenta; dedicarse á conseguir la nivelacion de los ingresos con los gastos; á fomentar el crédito de la nacion y á facilitar la pronta venta de los bienes nacionales; pagar con ecsacla proporcion á las ecsistencias, á todos los acreedores; presentar los proyectos de leyes orgánicas que debian completar su comenzadá obra; aplicar sus conatos à la pronta formacion de los códigos, y consolidar y aumentar las relaciones amistosas con otras naciones de un modo conveniente al interés y á la dignidad de la española.

Tal fué el famoso catecismo político que espuso à las córtes el primer ministerio Lopez, con gran aplauso de los mas crédulos, y con marcado descontento por parte de los que conocian los ocultos manejos del palacio de Courcelles. Sin atender à las circunstancias azarosas en que aun se encontraba España, lo primero que hizo el gobierno fué presentar el proyecto de ley de amnistía en favor de los que se hubiesen espatriado desde el 4 de julio de 1840 hasta el 15 de mayo de 1843, levantándose los embargos de sus bienes, restituyendo á los militares sus grados, empleos y condecoraciones, y á los demás empleados sus honores, de derecho á cesantía. « Semejante proyecto, dijo entonces un escritor, aplaudido por los hipócritas enemigos de la libertad y por los alucinados liberales, es à todas luces un paso gigantesco hacia la reaccion intentada en octubre. Esto es decirle á Espartero: Trae á tus enemigos para que te asesinen. La amnistía es para España un terrible augurio de inmensos trastornos porque en su espíritu y letra se dice à la nacion: Abre las puertas, tiende los brazos á los que desean destruir tus sacrosantas leyes. »>

TOMO I.

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