Conceden los reyes mercedes y honras & Garcilaso; y termina asi la comedia. La que lleva por título - El Triunfo del Ave Maria, y se dice compuesta por un ingenio de esta corte, es conocidamente posterior á la de Lope de Vega, y vaciada en el mismo molde, siendo muy semejante á ella en plan, en trama en desenlace; si bien muestra mayor artificio y despierta mas interés. No es esto decir que sea una obra de gran mérito; pues ademas de estar poco ajustada á las reglas del arte, la afean el desaliño en la versificacion y la afectacion de que a veces adolece el estilo; recomendándola meramente el presentar á la vista de los españoles los hechos ilustres de sus pasados, y el lenguage puro y castizo en que está escrita. Siguiendo la huella de Lope, el autor de esta comedia supone que Tarfe llega hasta la tienda de la reina, y clava en ella un puñal con un rótulo; saliendo en su seguimiento Hernando del Pulgar, que vuelve sin poder alcanzarle. Reyna. Pulgar. Fué Tarfe. El Moro es de mas soberbia Que tiene Granada. A fé Que si esperara con ella, Notable el arrojo ha sido. Pues yo juro á vuestra Alteza, El pensamiento pudiera, Porque á la Morisma sea Espanto, terror y miedo, Asombro, pasmo y afrenta. Fernando del Pulgar no era hombre que dejase de cumplir sus promesas: entra en efecto en Granada, y antes de clavar el Ave María en la puerta de la mezquita, dirige esta salutacion á la Reyna del cielo: "Soberana Virgen pura, Tarfe de humana hermosura En mi real, como se vió, Pues en su mezquita indigna Aquel blason mas que humano, Siendo otro apropiado infierno, Este blanco pergamino Vuestro blason puro encierra, ¿Mas cómo no me encamino La que sola triunfó de Eva. Con tal miedo os llego á hablar No puedo temer desgracia Con tu nombre, claro está, De los que mas te queremos, De alcanzar vuestros favores go Entra Pulgar å fijar el rótulo; y despues intenta poner fue á la ciudad, (como en efecto lo intentó, si bien con circunstancias distintas de las que imaginó el poeta). "Ya el renombre que os aclama, Ave de gracia, Señora, Ya en la mezquita se ensalza, A cuya estrañeza toda Esa morisca canalla Admirada parte á verle; Ya he cumplido mi palabra, Infausto á los moros salga.". |