Imágenes de páginas
PDF
EPUB

palacio de Aitona, en donde se hallaba alojado el generalísimo de las tropas castellanas D. Alfonso de Vargas, y de cuyo edificio salió al dia siguiente el infeliz Lanuza para el cadalso (1).»

XXX.

La Lonja. Casas Consistoriales.

Lo avanzado de la hora impidió á nuestros viajeros visitar la Lonja y las Casas consistoriales, vecinas de los sitios que acababan de recorrer.

Pero tales elogios hicieron tanto D. Cleto como Azara del primero de aquellos edificios, que al dia siguiente su primera diligencia fue la de ocuparse de él.

Efectivamente la Casa Lonja es una de las joyas mas preciadas que Zaragoza posee. El órden gótico campea en su fachada revelando desde luego que cuando tanta prohijidad en los adornos y tan majestuosa forma reviste en el exterior, mas suntuoso y mas rico ha de ser el interior.

Redonda puerta facilita el ingreso á este, abriéndose á entrambos lados de ella dos ventanas, revistiendo su misma forma y dimensiones.

Esto constituye el primer cuerpo del edificio, que si pobre aparece en adornos, rico es por su severidad y grandeza.

En el segundo, y sobre ancha y delicada faja entallada con cuadrados casetones, abren tres huecos otras tantas ventanas espaciosas tambien y á modo de galería bajo el rico y atrevido alero, vénse una porcion de ojivas subdivididas cada una.

Debajo de estas y extendiéndose por todo el segundo cuerpo, se ven pequeños medallones caprichosamente sembrados con caritas de relieve.

Cuatro torrecillas airosas de estrechas saeteras destacanse en los cuatro ángulos del edificio contribuyendo de una manera notable á la belleza del conjunto.

Pero donde verdaderamente se admira la riqueza de detalles y el caprichoso genio del artista, es en el vasto y cuadrado salon interior, que mide 192 palmos de longitud por 120 de latitud y 160 de altura.

Veinte y cuatro columnas dóricas dividenle en tres naves á lo largo y cinco por lo ancho.

De ellas, diez y seis están adheridas á los muros y las restantes en el hueco del salon. Rico anillo ó brazalete de primorosos follajes ciñe las columnas á un tercio próximamente de su altura, siendo digno adorno de tan gentiles piezas.

Diez y seis arcos parten de los jónicos capiteles adornados con atrevidas volutas, los cuales desplegándose en opuestas direcciones se entrelazan graciosamente quedando prendidos á la rica bóveda por medio de rosetones dorados.

Todo en este salon es admirable y grandioso.

Desde la esbelta columna hasta el laberíntico enlace de su graciosa arquería, está

(1) Tomeo Benedicto, Las calles de Zaragoza.

revelando tanto el buen gusto y delicadeza de la ejecucion, como la grandeza en la concepcion.

Sirven de diadema á los capiteles y de adorno al arranque de los arcos, blasonados escudos con el leon rampante de Zaragoza y gallardas esculturas de ángeles y de grifos se interpolan entre ellos, ora sosteniéndoles, ora ofreciendo nuevo adorno á tan preciado conjunto.

[graphic][subsumed][merged small]

Sobre la puerta principal y en lo mas elevado del muro, las armas de España de grandioso y dorado relieve, sostenidas por dos leones, llaman poderosamente la atencion.

Diez y seis platerescas ventanas abríanse en los muros en el centro de cada uno de los arcos; hoy, despiadada mano tapió seis y solo restan diez, por las cuales puede juzgar el curioso viajero de las restantes.

Por bajo de ellas ó sea á la altura de los capiteles de las columnas, extiéndese una ancha greca á manera de friso, con la siguiente inscripcion en gruesos caractéres góticos.

«Se acabó esta lonja (la qual y ciudad tenga Dios de su mano para que siempre se emplehen en justicia paz y buen gobierno de ella) anyo del nacimiento de nuestro senyor Jesucristo de 1551, conregnantes donya Juana y don Carlos su hijo reyes y emperador nuestros senyores, y iurado Don Felipe hijo del dicho emperador por rey de este nuestro reyno y reynos de España, siendo iurados de esta ciudat Carlos Torrellas, Yeronimo Çapata, Juan Bucie Metelin, Juan Campi y Juan de Robres.»>

Tal es, aun cuando pálidamente descrito, el magnífico edificio que los jóvenes estuvieron un buen espacio contemplando, diciendo por fin Sacanell:

—Aquí seria indudablemente el gran centro de contratacion que habia en el antiguo reino.

- Si señor, estuvo en este edificio establecido un Banco que mantenia relaciones importantes no solamente con las poblaciones de la antigua corona de Aragon, sí que tambien con las principales de España y del extranjero. En la terrible epidemia que tantos estragos causó en 1652, este Banco prestó grandes servicios á los Jurados que encontraron en él un gran socorro para atender á tan cruel calamidad.

-¿Y posteriormente?-preguntó Castro.

-Posteriormente ha servido de teatro mientras se edificaba el nuevo despues del incendio del antiguo, de salon de baile, de local para cívicos banquetes, para celebracion de los sorteos de quintas, etc., etc.

El silencio con que nuestros amigos acogieron las últimas frases del anciano, fue mas elocuente que cuanto hubieran podido decir, referente al destino que en nuestra época se ha dado á tan preciada joya artística.

Las Casas consistoriales se hallan al lado de este edificio con el cual se comunican y que forman pobre contraste con él.

En el área que ocupa, estuvo el antiguo consistorio de los Jurados, que eran veinte y dos nombrados por las distintas parroquias de la ciudad, hasta que quedaron reducidos á cinco.

Derruido este edificio en los famosos sitios que Zaragoza sufrió durante la guerra de la Independencia, reedificóse despues, sin que exterior ni interiormente encierre nada de notable.

Llena el objeto para que está destinado, mas ni se le puede dar ni tiene valor artístico alguno.

En el patio interior que es bastante espacioso donde se encuentran las escaleras que facilitan el acceso á los pisos superiores, se hallan dos antiquísimos relieves con las armas de Sobrarbe trasladados á este sitio del extinguido convento de Santo Domingo.

—Ya que aquí nos encontramos,—dijo Azara-completemos nuestra visita á estos lugares con la del palacio Arzobispal.

-Es verdad-repuso D. Cleto-otro gran edificio que deben Vds. ver y que les ha de agradar.

-Pues vamos allá, -si nos permiten verlo- añadió Pravia.

-En ello confio, pues aparte de algunas relaciones que tengo en él, vuestra calidad de forasteros basta para que su ilustre propietario os dé permiso.

XXXI.

Palacio Arzobispal.

Momentos despues nuestros jóvenes penetraban en el suntuoso palacio episcopal. Unido al magnífico templo de La Seo por una galería que constituye el arco que da paso á la plaza en que aquel se alza, hállase el suntuoso palacio que nos ocupa, << mansion de infantes y hospedería de reyes» como le llama un elegante escritor contemporáneo.

Dos cuerpos le componen y dos puertas se abren en su fachada, cada una de las cuales está constituida por dos columnas dóricas y en los testeros las armas arzobispales.

Diez y seis ventanas hay en cada cuerpo de edificio dando al conjunto un aspecto sencillo á la par que nuevo y elegante.

En el interior encuéntranse dos grandes patios, en los cuales se abren dos escaleras que conducen al piso superior.

Extensas cámaras hay en él, de techos primorosamente trabajados, y vastos salones entre los cuales se destaca en primer término, el que actualmente sirve para la celebracion de órdenes y donde en pasados tiempos recibian los monarcas que se hospedaban en él.

Tanto en este como en alguna otra estancia, hállase conservado en retratos todo el riquísimo episcopologio de aquella antiquísima diócesis (1).

(1) Hé aquí la ilustre série de estos prelados:

Santiago el Mayor, primer obispo de Zaragoza por el año 37 de Jesucristo.

San Atanasio, año 59.—San Teodoro, año 71.-San Epitecto ó Epictáfio año 103, no pudiendo fijarse ya los que les sucedieron hasta :

Delex: De este hace mencion san Cipriano, si bien le niegan algunos la dignidad episcopal.

San Valero I gobernó su iglesia de 280 á 307, y murió desterrado en Enet, pueblo cercano á Barbastro.

San Valero II. La mencion hecha en antiguos breviarios de Toledo, Sevilla, Borgoña y otros, de un obispo mártir de este nombre que desterrado á Viena de Francia fue alli crucificado en 311, suceso no aplicable al santo Confesor, induce á algunos á admitir dos Valeros que consecutivamente se sucedieron en la misma dignidad.

Clemente ó Clemencio. Se balla su firma en el concilio de Arles, de 314, aunque bay quien no le atribuyó mas dignidad que la de presbitero.

Casto. Concurrió al concilio de Sardes en 347.

Valero III II segun otros. En 380 celebró el primer concilio de Zaragoza, en que doce obispos, entre ellos dos de Aquitania, condenaron los errores de Prisciliano difundidos por España.

Valeriano á quien dedica Prudencio unos versos. Algunos fundados en la semejanza del nombre le creen uno mismo con Valero.

Vicente 1. Asistió en 516 al concilio de Tarragona.

Juan I. Suscribió al concilio de Barcelona en 540, y al de Lérida en 546.

Vicente II. San Isidoro refiere la apostasía de este obispo que se adhirió al arrianismo, reinando Leovigildo. Simplicio. Tuvo en 592 el segundo concilio de Zaragoza, al cual asistieron once obispos y dos diáconos, mandando consagrar de nuevo las iglesias de los arrianos y reconocer las reliquias que veneraban.

Ciríaco, únicamente mencionado en la Canónica de san Pedro de Taberna.

Máximo, autor de varias obras en prosa y verso; gobernó de 599 á 619.

Juan II, prelado de singular erudicion y virtud; vivió hasta el año 631.

San Braulio, hermano del anterior, honor de la Sede cesaraugustana que ocupó veinte años.

Tajon, celebrado por sus escritos y por el famoso hallazgo de los Morales del papa san Gregorio, cuyo paradero le fue revelado en Roma antes de ser obispo.

Valderedo. En su tiempo se convocó en 691 el tercer concilio de Zaragoza, formado por trece obispos, cuyo cá

96

T. I.

Las vistas de que disfruta el palacio, su grandeza, su ventilacion, sus extensas dependencias, le prestan gran importancia y le hacen uno de los edificios mas notables

de la ciudad.

En tiempo del Ilmo. prelado D. Agustin de Lazo y Palomeque y bajo la entendida direccion del célebre aragonés D. Ramon de Pignateli de quien tendrémos ocasion de hablar con mas detencion, reedificóse gran parte del palacio en el que se hallan comprendidas las habitaciones particulares del prelado y de sus familiares, y otras varias dependencias.

-Verdaderamente que es una mansion régia, - decia Pravia al par que recorria con sus compañeros el soberbio edificio.

-Generalmente-repuso Azara-siempre que los reyes han visitado nuestra ciudad, ha sido este el que han ocupado.

-¿Y tiene comunicacion con el templo de La Seo?

—Sí, el arco que da ingreso á la plaza es la comunicacion, el cual fue mandado construir por los Reyes Católicos.

-Vamos, no creí yo que en Zaragoza hubiese tanto que admirar.

-Pues todavía nos queda mucho-repuso Azara con visible satisfaccion, cuando yo os decia que Zaragoza era una gran cosa...

lona.

Cuando entremos en Cataluña veréis dijo Sacanell, sobre todo Barce

-Vaya, pues nada hay mas pintoresco que Galicia, y en monumentos no le val en zaga á ninguna provincia.

-Eso es, y no os acordais de Andalucía para nada,- añadió Castro á su vez―y debeis tener en cuenta que Andalucía reune lo mejor de todas partes; sierras empinadas y agrestes, floridos cármenes, cielo despejado y alegre, obras de arte inapreciables y en resúmen, todo lo mejor.

non mas notable es el que mandaba encerrar las reinas viudas en un monasterio para atender á su seguridad y decoro.

Beucio. La Canónica de san Pedro de la Taberna, única que hace mencion en este obispo, supone que á la primera noticia de la invasion sarracena, huyó con las mas preciosas reliquias à los montes de Ribagorza.

Anabando, echado en una hoguera por orden del moro Menuza ó Ayinon, segun el cronicon de Isidoro Pacense. A continuacion y con objeto de dejar completo el episcopologio de esta diócesis, damos á continuacion el catálogo de los prelados de Zaragoza desde la reconquista.

Obispos, Pedro Librana, 1118. — Estéban, 1128.- Garcia, 1130.- Guillermo, 1136.-Bernardo, 1138. -- Pedro Tarroja, 1153.-Ramon de Castellezuelo, 1183.-Rodrigo de Rocaberti, 1200. — Ramon de Castrocol, 1201.-Sancho de Alcones, 1216.-Bernardo de Monteagudo, 1236.-Vicente, 1240.- Rodrigo de Alcones, 1244.-Arnaldo de Peralta, 1218.-Sancho de Peralta, 1271.-Pedro Garcés de Jaunas, 1272.- Hugo de Mataplana, 1289. - Jimeno de Luna, 1297.-Pedro de Luna, 1314.

Arzobispos. El mismo Pedro de Luna, 1318. - Pedro de Judice, 1345.-Guillermo Agrifolio (tal veż Campfullos), 1317.-D. Lope de Luna, 1332. — D. García Fernandez de Heredia, 1386.-D. Francisco Clemente, 1413. D. Alonso de Arguello, 1420.-D. Dalmao de Mur, 1429.-D. Juan de Aragon, 1458.-D. Alonso de Aragon, 1478. -D. Jnan de Aragon, 1520.-D. Fadrique de Portugal, 1532.-D. Fernando de Aragon, 1539.-D. Fr. Bernardo Alborado, 1577.-D. Andrés Santos, 1578.-D. Andrés de Cabrera, 1587.-D. Alonso Gregorio, 1593.-D. Tomás de Borja, 1603.-D. Fr. Pedro Manrique, 1611.-D. Fr. Pedro Gonzalez, 1616. D. Fr. Juan Martinez, 1624. -D. Martin Ferrer, 1630.-D. Fr. Juan Guzman, 1633.-D. Pedro Apaolaza, 1635.-D. Fr. Juan Cebrian, 1644. -D. Fr. Francisco Gamboce, 1863.-D. Diego de Castrillo, 1677.-D. Antonio Ibañez, 1687.-D Manuel Perez de Aracil, 1714. D. Tomás de Aguero, 1727. D. Francisco Ansa, 1744.-D. Luis Mañero, 1763. D. Juan Saez de Burnaga, 1768. D. Bernardo Velarde, 1779.-D. Agustin de Lazo y Palomeque, 1784.-D. Joaquin Company, 1798.-D. Ramon José Arce, 1801.Caballeros, 1824.

[ocr errors]

D. Manuel Vicente Martinez y Jimenez, 1816.- D. Bernardo Francés

« AnteriorContinuar »