1821 Marzo á Mayo, tusco 50 infantes de Mallorca, cuyo jefe Alcocer tomó 9 Diario de los sucesos de Orizava, llevado por un vecino de aquella villa y publicado por Bustamante, quien ha insertado tambien en el tomo 5 del Cuadro histórico fol. 186, la parte de mismo diario que comprende desde 23. de Marzo á 15 de Abril de 1821.. el grado que el virey le dió, sobre el que recayó el de coronel que Iturbide le confirió, por los servicios que despues prestó en el ejército independiente. La division de Herrera fué recibida con grande aplauso en Orizava, aumentándose con mucho número de desertores del Fijo y provincial de Puebla, y de otros cuerpos que se presentaron en trozos con sus armas, y de allí marchó á Córdova el 31 de Marzo. El comandante Alcocer creyó poder contar para la defensa con la adhesion que aquellos habitantes habian manifestado en la revolucion anterior á la causa real, pero todo estaba mudado, y en una junta de guerra que celebró, se acordó nombrar comisionados que fuesen á encontrar á Herrera para tratar de capitulacion. Esta se celebró bajo la condicion, que los individuos que formaban la guarnicion, quedasen en libertad para seguir ó no el partido independiente, sin otra restriccion que entregar las armas en el segundo caso. Herrera ocupó á Córdova el domingo 1.o de Abril á las nueve de la mañana, siendo recibido por el ayuntamiento y el vecindario con muestras del mayor regocijo. De allí regresó á Orizava, y habiendo pedido á los vecinos por medio del ayuntamiento, un préstamo de 25.000 pesos, entre tanto se vendia una suma equivalente de tabaco, solo pudieron juntarse 17.000, que se le entregaron. No quedando por entonces que hacer en las Villas, convino Herrera con Santa Ana que este marcharia á la costa, donde tenia mucha influencia, para ponerla en movimiento, mientras que el primero se situaria en la provincia de Puebla, para impedir que fuesen de esta auxilios para la de Veracruz, y en consecuencia salió de Orizava el 13 de 1821 Marzo á Mayo. 1821 Abril. Abril, dejando por comandante en aquella villa á D. José Santa Ana con unos 500 hombres se dirigió á Alvarado, cuya guarnicion se hallaba disminuida por haber pedido Dávila para reforzar la de Veracruz, un trozo de infantería y caballería de que apénas llegaron á aquella plaza 60 hombres, desertando los demas que se unieron á Santa Ana. Este se presentó delante de Alvarado el 25 de Abril con 600 hombres y un cañon: el comandante D. Juan Topete, de acuerdo con el ayuntamiento, habia tomado sus medidas para la resistencia, pero á los primeros tiros, se oyó entre los defensores una voz de "viva la independencia," con lo que todos dejaron las armas y Topete pudo ocultarse á riesgo de perecer. Santa Ana tratándolo con mucha consideracion, le dió pasaporte y medios para trasladarse á Veracruz, á donde llegó el 2 de Mayo. En esta ciudad se temia á cada instante ver á Santa Ana presentarse á atacarla, y por medida de precaucion se cerraron todas las puertas, no quedando abierta mas que la de la Merced. Para conducir un correo á Perote y recobrar, si era posible las Villas, cosa de suma importancia para el gobierno, pues habia en ellas 60.000 tercios de tabaco, el comandante general de Puebla Llano, destacó al teniente coronel Zarzosa con una seccion considerable, pero en Ixtapa, ántes de bajar las cumbres de Aculcingo, se le desertaron las dos terceras partes de la fuerza, y tuvo que volver á Puebla con el escaso número de soldados que le quedó. Entre los oficiales que salieron de Puebla y se presentaron á Herrera, fueron muy notables los Flones, hijos del conde de la Cadena, que siendo capitanes de los dragones provinciales de aquella ciudad, se pasaron con casi todo su regimiento, y de ellos, D. Manuel, ocupó sin resistencia todos los pueblos de las inmediaciones: D. Francisco Ramirez y Sesma, hijo del marqués de Sierra Nevada, que desertó con 70 granaderos del Fijo de Veracruz y 10 dragones, y el ayudante del Fijo de Méjico D. Luis Puyade que lo hizo con alguna fuerza de este cuerpo. Presentóse tambien el teniente coronel D. Juan Bautista Miota, aquel bizarro vizcaino que con 40 Fieles del Potosí, puso en fuga en el Monte de las Cruces á Lailson con 400 hombres, tomándole su equipage y la correspondencia de los Guadalupes, 10 y que despues se distinguió en la campaña del Sur con Armijo, quedando de comandante de Ometepec en la Costa chica. Así el gobierno veia pasar al lado contrario la parte mas florida de su ejército, y aquellos oficiales que habian sido su firme apoyo contra los insurgentes, venian á ser ahora sus mas temibles enemigos. 11 Bravo desde Izúcar habia dado aviso á Herrera de hallarse atacado por Hévia, con lo que aquel se puso en marcha para ir á su socorro, enviando ántes por el camino de Tepeji 200 caballos bajo el mando de Miranda. 12 El mismo Herrera se adelantó hasta Tepeaca sin recibir noticias de Bravo, quien como hemos visto, habia abandonado entre tanto á Izúcar y dando vuelta por Huejocingo 1821 Abril. 1821 Abril. y Tlaxcala, se habia situado en Huamantla. Desde Te peaca á donde llegó el 17, mandó Herrera al capitan de dragones de Puebla D. Francisco Palacios de Miranda en busca de Bravo, para concertar con él sus movimientos ulteriores. En aquella fecha Hévia se hallaba en Izúcar, é instruido de la marcha de Herrera, se dirigió á atacarlo en Tepeaca. Bravo opinaba que Herrera debia retroceder para unirse con él en Huamantla, con el fin de aprovechar mejor la caballería que ambos tenian, superior en clase y número á la de Hévia: pero Herrera creyó preferible conservar la posicion que ocupaba, y Bravo con 200 infantes y otros tantos caballos, pasó á aquel punto, al que llegó el 24 en la noche: Herrera le cedia el mando, pero Bravo con su acostumbrada moderacion lo rehusó, poniéndose á las órdenes de aquel, el cual procedió en todo de acuerdo con él último. Presentóse Hévia á la vista de Tepeaca el 22 de Abril con una fuerza de 1.300 infantes de Castilla, Ordenes militares, y Fernando VII de Puebla, y poco mas de 100 caballos del Príncipe y Fieles del Potosí, pero en aquel dia no hizo mas que un reconocimiento, situándose en una altura que domina la ciudad y está muy inmediata á ella. Herrera se redujo á guarnecer con su infantería el fuerte edificio de la parroquia y convento de S. Francisco, que forma un costado de la plaza, frontero á la altura que Hévia ocupaba, y cubrió con su caballería, que ascendia á 600 caballos, las avenidas por donde podia ser atacado. El 23 se empeñó algun tiroteo con las guerrilas, y el 24 resolvió Herrera atacar á Hévia con cuatro columnas de 140 hombres cada una, de las cuales la que |