gidor, aunque algunos tienen mayor distancia, de esta Ciudad.

En ninguno de ellos hay Teniente, ni en la Ca-i pital, por no producir su escasez emolumentó que pueda reportarse de utilidad; y solo nomina el Corregidor en cada Pueblo un vecino de razon, que con el título de Juez de desagravios, vindique á lost Indios de los que se les quieran irrogar.

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Al Corregidor están asignados por salario 20 ducados de plata en estas Reales caxas, y en las mismas se le dan poco mas de 700 pesos por razon de Gorregidor de Indios. Estos salarios perciben integros los Corregidores, siendo provistos por S. M.: y se les acude con la mitad de ellos quando ocupan el cargo por nominacion de los Excelentísimos Señores Virreyes, como acontece al que al presente lo sirve , que es Don Francisco Xavier de Larrea Zurbano, nombrado por el Excelentísimo Señor Mar... ques de Villar, y ha mas tiempo de dos años que exerce el referido empleo.

Los frutos que producen los enunciados Pueblos, son á proporcion de sus temperamentos. En los me-r diatamente templados se cosechan sin diferencia todos granos, y con mas abundancia los de maíz, cebada y trigo. En los que gozan temple calido se tienen plantadas muy hermosas y dilatadas eras de caña dulce y en trapiches, se labran de ellas el azucar, ras-ı padura, miel y aguardiente, que se destina al individuo que por subastacion tiene á su cargo el Real Estanco det esta especie. Estos frutos abastecen la Ciudad, en don-> de á su entrada se exige el Real derecho de alcabala,d respectivamente Taylas porciones que se internan, ali sugeto en quien regularmente está rematado este de-l recho por cuenta de S. M...

Lo demás de estos Pucblos comprehende muchos

po

potreros en que ceban las reses que han de condurcirse al abasto de carnicería. El resto de Indios de -los destinados á labores del campo, se ocupan en exercicios mecanicos, y en fabricar algunos texidos de algodon, que sirven á la gente pobre en su vestuario. La Real caxa se halla servida por Ministros que la asisten, uno en qualidad de Contador, y otro de Tesorero. Hallanse en estos empleos al presente con títulos librados por S. M. Don Christobal Vicente Calderón, y Don Juan Villavicencio y Guerrero; el primero exerce la Contaduría ha mas tiempo de dos años, y ocupa la tesorería el segundo tiempo ha de diez meses: cada uno goza salario de 19500 pesos. Estas caxas están subordinadas y sujetas al Tribunal y Audiencia Real de cuentas, que reside en la Gorte de Santa Fé.

Hallase erigida en esta Ciudad ha tiempo de siete años, y por órden del Excelentísimo Señor Don Sebastian de Eslaba, Virrey que fué de este nuevo Reyno, una compañía de Soldados Infantes, que consta de veinte y un hombres, en esta forma; diez y siete sirven y ocupan plaza del soldados, quatro sirven de Oficiales reducidos á un Capitan, que lo es Don Mariano Perez de Ubillus, Teniente Don Francisco Xavier de Arellano, Alferez Don Estevan Silva, y Sargento Josef Paredes. A los diez y siete solda dos se asignaron de sueldo diez pesos mensuales, y quince á los tres Oficiales subalternos. Al Capitan no se asignó salario alguno por servir el empleo honorariamente.

Paganse estos sueldos del Estanco Real de aguardientes. Está compañía se erigió con inspección de autorizar las Reales Justicias, con motivo del rebelion que se excitó en esta Capital, é igualmente sir

ve en el Real Palacio, donde tienen su quartel, y custodian las Reales caxas que en él residen, y se ha reconocido la importancia de su ereccion, manteniendose desde entonces muy sujeto este Lugar, y en consideracion á su crecido vulgo, y al gentio numeroso, que compone hasta 409 almas, se ha representado á S. M. lo conveniente que sería, que las plazas de soldados se extiendan á veinte, que con los Oficiales integren el número de veinte y quatro. Las armas de los soldados consisten en igual número de lanzas, y corto de bocas de fuego. Guarnecese el quartel con doce cañones de artillería, que se hallan montados en cureñas, proporcionadas á su ca libre, que será hasta de seis libras,

El mencionado Cerro Pichincha, que desde la gentilidad se ha conceptuado por de mucha riqueza, ha venido á demostrarla en este tiempo con betas de finísima plata, que en él se han reconocido : y desde luego, tanto en este, como en otros de la Provincia, se hubieran extraido porciones crecidas de este metal, pues se han registrado en pocos meses muchas betas, si el bencficio de ellas no se hubiese dificultado, por no encontrarse minero perito en toda la jurisdiccion.

Al sudoeste de la Ciudad hay un llano ó egido que nominan Turubamba, y en sus margenes' un peque ño Cerro, conocido por el Panecillo, por lo que su figura hace semejanza á la de un pan de azucar : de este se vierten algunos arroyos de agua por la parte del Sur y Occidente, que unidos con mucha de manantiales, y la que por varios atenores destila el de Pichincha se forma asial Sur un hermoso rio, que nominan Machangara, y transita por una hermosa puente de piedra.

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Al Norte del Pueblo de Machache se registran unas vertientes de aguas calidas á causa de las nitrosas y sulfureas materias que las impregnan: en ellas se experimentan tan deliciosos como benéficos baños, y se ha reconocido ser profluvios que corren del centro de la tierra. En términos del Pueblo de Conocotoc, se encuentra un pequeño cerro, que nom. bran Illalo, y manan de él á formar en su base ó plan, hermosas fuentes de aguas igualmente calidas, cuyo uso en baños es recobro de muchas enferme. dades, y las mismas se han descubierto en el Pueblo de Alangazi. En las inmediaciones al Pueblo de Perucho, hay un sitio que llaman Tanlagua, y es hacienda perteneciente á los Padres Jesuitas del Colegio Máximo de esta Ciudad: en el se encuentran emerciones de aguas calientes de iguales saludables usos, y con la especialidad de lapidificar muy en breve qualesquiera cuerpos menos sólidos que las toquen.

Al Norte de esta Ciudad y en el egido, que Ilaman Anaquito, hay una hermosa Laguna, que su diametro por qualquiera parte del círculo que ella figura, es de mas de veinte picas: formase de subterraneas emerciones de agua, que de los cerros inmediatos destila.

Latacunga. El asiento de Latacunga está al Sur de esta Capital: su Poblacion se forma en un espacioso llano, á que por la parte del Este hace respaldo la cordillera Oriental de los Andes. Cerca de este asiento hay un cerro de eminente elevacion, á cuya base está el vecindario; situase en 55 minutos 141 segundos de latitud austral. Incluye en su jurisdiccion este Corregimiento diez y siete Pueblos, que son: Sicchos mayor, Sicchos menor, Yungas ó ColoraTom. XXVIII.

B

dos,

dos, Isinlivi, Quizalo ó Toacaso, Pillaro, San Felipe, Mulahalo, Alaques, San Miguel de Molle hambato, Saquisilli, Pujili, Tañicuchi, Cusubamba, Angamarca y Pilahalo.

En estos Pueblos se contienen veinte y ocho obrajes, en que se texen paños, bayetas, algunos lienzos de Algodon y gergas; siendo esta Fábrica misma la que se sigue en muchos Galpones, y Chorrillos, que son Oficinas en que se trabajan por menor. estos texidos; el regular destino de ellos es internarlos al Perú por Guayaquil, cuyos Oficiales Reales exîgen alli los derechos correspondientes á S. M.

Este asiento se gobierna por un Corregidor, quien en los Pueblos constituye Jueces de desagravios pa ra moderar los vicios en aquellos lugares, que por distantes no se proporcionan á su vista. Estos Jueces:no gozan salario alguno, ni aun oportunidades de utilidad. En el Pueblo de Sicchos mayor hace esta judicatura de desagravios con el título de Teniente Don Esteban Ortiz de Zarate, á quien nominó el Corregidor y confirmó esta Real Audiencia ; y en el de Angamarca se halla en la misma qualidad de Teniente por nombramiento del Excelentísimo Señor Marqués de Villar, Juan Manuel de Sarabia; pero ni éste ni el anterior Teniente logran emolumento alguno.

Al Corregidor (si es nombrado por S. M.) le están asignados' 19400 pesos de salario en estas Reales caxas, pero ha mucho tiempo no se pagan, por decirse deber contribuirse estos de los tributos. Emolumentos no tiene algunos este Corregidor, y solo podrá establecerlos logrando se le remate con alguna equidad la cobranza de tributos, 6 repartiendo mulas en la jurisdiccion. Al presente sirve este

Cor