con los poros abiertos. Debe cuidarse tambien que la sala del baño esté bastante abrigada en invierno.

En cuanto al momento de administrar el baño, la regla principal consiste en no tomarlo cuando el estómago esté haciendo la digestion, y por eso debe tomarse antes de la comida ó tres horas despues.

Tambien es esencial no exponer el niño en el momento al aire en invierno. Los baños mas provechosos son los que se toman por la noche, cuando desde el baño se pasa á la cama. (C. F. Hufeland.)

BARBARISMO. Locucion viciosa que consiste en adulterar la pronunciacion de una palabra ó en usarla en sentido impropio.

Todo cuanto expusimos en el artículo arcaismos es aplicable al presente; por lo cual, para evitar innecesarias repeticiones, nos limitaremos á referirnos á aquel, y á encarecer la mayor gravedad de este defecto de lenguaje que, por ser muy ridiculo y excesivamente comun, merece la preferente atencion de los que entre nuestros principales encargos tenemos el de enseñar la gramática de nuestro idioma.

Unas veces se comete alterando la prosodia de las palabras, como en cardéno por cárdeno, epóca por época, tortóla por tórtola, méndigo por mendigo; otras suprimiendo, aumentando ó trastornando letras, como cúpon por cupieron, paer por pared, mu por muy, estrechismo por estrechísimo, setencia por sentencia, pacencia por paciencia, dambos por ambos, causalidad por casualidad, celestre por celeste, conoza por conozca, probeza por pobreza, percurador por procurador, naide por nadie, denguno por ninguno, adrento por adentro, ingüente por ungüento; otras, en fin, usando las dicciones en un sentido indudablemente impropio, cuando no diametralmente opuesto al genuino, como en vuelas por alas, pelote por seno, aprender por enseñar, buscar por encontrar, imposible por posible, capaz por incapaz, inculto por oculto, piña por piñon, estanco por estanque, y otras muchas. Apenas sostenemos media hora de conversacion con una persona que no haya seguido una carrera literaria ó frecuentado la culta sociedad, sin que llegue á nuestro tímpano, causándonos una dolorosa impresion, alguno de estos ú otros semejantes barbarismos, cuya generalidad es en cierto modo un cargo para los maestros. No desconocemos, sin embargo, la superior influencia de los ejemplos domésticos, y de los usos y corruptelas del vulgo, que hasta ridiculiza muchas veces al que pro

cura hablar con alguna correccion; pero tambien, y por experiencia, sabemos que con nuestro método, con perseverancia y con tiempo, se consiguen resultados satisfactorios.

Recomendamos, pues, á nuestros comprofesores que, sobre inspirar á sus discípulos la debida repugnancia á este defecto, cuya espresiva y merecida denominacion basta para hacerles comprender su fealdad, no les dejen jamás de corregir cuando en su presencia lo cometan, y que formen, como dijimos en los arcaismos, un catálogo de locuciones bárbaras que se usen en su respectivo pueblo para presentarlas oportunamente en sus esplicaciones gramaticales. El que nosotros nos hemos formado, y es sin duda aun muy incompleto, consta de algunos centenares; no lo insertamos, porque variando en cada pais hasta lo infinito, no seria de utilidad alguna á nuestros lectores. Luis Codina.

BÁRBAROS DEL NORTE Y DE ORIENTE. (Historia de la educacion.) La invasion de los bárbaros del Norte y de Oriente cambió la faz de Germania, Galia, Gran Bretaña, España é Italia. A fines del siglo iv, el imperio romano parecia un inmenso cadáver presa de buitres devoradores. Los alemanes, los hunos, los ostrogodos, los visigodos, los suevos, los alanos, los francos, los borgiñones, los vándalos, los sajones, los lombardos y otros pueblos, se chocan, se impelen hácia adelante, salen de los bosques y se precipitan sobre el coloso romano, que se hunde bajo un peso enorme para sus debilitadas fuerzas; ábrense las fronteras orientales, y cúbrese de pueblos estraños Germania, Galia, Italia, Iberia, mientras que los antiguos habitantes de estos paises se retiran ó sucumben á los golpes de los vencedores. Esta irrupcion duró hasta el siglo vi, y casi en todas partes las ruinas de las ciudades envolvieron las escuelas tanto paganas como cristianas, y en todas partes fueron incendiadas las bibliotecas, pérdida irreparable en una época en que no se conocia la imprenta. Agreguemos á esto las guerras intestinas que destrozaban todos estos paises y comprenderemos cuán poco favorables eran aquellas circunstancias para las escuelas, para los estudios, ni para la educacion en general.

Sin embargo, cada una de las hordas ha concurrido con sus costumbres y sus leyes particulares al desarrollo de las naciones europeas; cada uno de aquellos pueblos salvajes, ha presentado algunos elementos de una civilizacion virgen, poderosa por su juventud, por sus necesidades y por su actividad. Estos elementos aglomerados y

maduros con el tiempo han formado una verdadera civilizacion europea, de que Europa ha hecho ó hará participar á las demas partes del mundo.

La ruina no habia sido completa, pues se conservaron algunos restos de antiguas instituciones en diferentes puntos de Europa, y el cristianismo ejerció su influjo en medio de las tinieblas. El clero, dueño del escaso saber que se conservaba en aquellas hordas medio salvajes, fué naturalmente el ordenador del caos: su influjo debia ser inmenso en la legislacion de los diferentes Estados que se formaban paulatinamente. Tratábase de oponer un freno á pasiones salvajes, y de difundir ideas de órden, de propiedad, y de derechos, que hasta entonces no se habian conocido; debian trazarse reglas firmes y establecerse leyes severas; debian, por fin, comprimirse gradualmente la devastacion, los asesinatos, las violencias de los bárbaros conquistadores. Y si pasó mucho tiempo antes que estos esfuerzos dieran fruto, consiste en que los elementos que habian de combatirse eran muy poderosos, la supersticion demasiado ciega y estaba ademas profundamente arraigada. Se necesita mucho tiempo para preparar los campos, si la simiente ha de dar provechosos frutos: «<para el Señor un dia es como mil años y mil años es como un dia.»>

El cristianismo habia ya penetrado hasta algunas naciones bárbaras los ostrogodos antes de invadir á Italia y los visigodos antes de apoderarse de España, se habian apoderado del cristianismo, pues que Ulphilas (hácia 376) creando un alfabeto y en parte una lengua para los godos, les tradujo la Biblia, obra de que aun nos quedan algunos fragmentos. Los ostrogodos estaban mas atrasados, pues que á fines del siglo v Teodorico, que no sabia leer, prohibia que los niños concurriesen á las escuelas, y solo cediendo á las instancias de su ministro Cassiodoro, conservó el sueldo de los profesores de Roma. Pero los visigodos, que apreciaban las dulzuras de la vida social, conservaron los establecimientos de los vencidos, adoptaron sus costumbres, de suerte que un concilio de Toledo, celebrado en el siglo vii, ordenó que los hijos de los judíos asistiesen á las escuelas cristianas desde la edad de siete años.

El zelo de los misioneros cristianos era infatigable. En medio de las tormentas que hacian temblar el suelo bajo sus pies, aquellos hombres intrépidos establecian un lazo espiritual entre los pueblos de Europa, y llevaban palabras de paz y consuelo á los pueblos amenazados é invadidos. San Severino establece conventos y escuelas á mediados del siglo v en el centro de Alemania; en la primera mitad

del siglo vi sentaron en Francia los benedictinos los fundamentos de multitud de abadías, y de alli se extendieron sus conventos y escuelas por otros puntos de Europa. Poco á poco empezaron á distinguirse algunos hombres piadosos que se habian propuesto difundir la instruccion, como Beda el venerable, Melior, san Isidoro y otros, ya por sus obras ya por sus escuelas.

Las tinieblas de la ignorancia predominaban sin embargo y la escasa luz que empezaba á difundirse en algunos puntos durante los siglos VII y VIII, solo servia para hacer ver la horrorosa noche que circundaba el resto de Europa. Solo á costa de esfuerzos y de tiempo, pudo disiparse la grosería y la barbárie de aquellos calamitosos siglos.

BASEDOW. (Historia de la educacion). El gefe de la escuela de los filantropos, Juan Bernardo Basedow, que nació en Hamburgo en 1723, merece contarse por sus ideas y trabajos en materia de educacion y enseñanza entre los grandes hombres del siglo xviu. Persuadido de que los vicios que afligian á la sociedad eran efecto de la mala educacion, concibió el pensamiento de mejorarla, y se dedicó con ahinco á realizar sus ideas. Siendo profesor de humanidades en el colegio de caballeros de Soröe, publicó en 1758 un Tratado de filosofía, el cual revela sus estudios en materia de educacion. El Emilio de Rousseau, dado á luz en 1762, acogido en Francia, Inglaterra, Holanda y Alemania con indecible entusiasmo, le afirmó mas en sus ideas, le decidió á realizar la reforma y la anunció con un aparato y una seguridad nunca vistos.

Proponiase llevar al terreno de la práctica las teorías de Rousseau y de Comenio, célebre pedadogo del siglo xvn. Consideraba como lo mas esencial una enciclopedia pedagógica que comprendiese todo lo necesario para la instruccion y educacion del jóven ciudadano del mundo hasta la edad de 15 años. Anunció, pues, una Obra elemental (Elementarwerk) (1) é invitó al público á que pagara los gastos de la publicacion. El convencimiento de la necesidad de obras de este género hizo que la suscricion hallase favorable acogida en el público y reunió Basedow mas de doscientos treinta mil reales de manos del Emperador de Alemania, de muchos reyes, príncipes y

(1) Esta obra se publicó reformada segun los adelantos de la época en 1847 por una sociedad de profesores, y en 1849 se habian hecho tres ediciones. El prólogo de la tercera edicion reformada nos ha suministrado la mayor parte de los datos para este artículo.

varios particulares. Publicóse la obra en tres lenguas á la vez en Dessau el año 1774, en cuatro volúmenes en octavo y otro con láminas, y tuvo grande acogida, aunque no estaba exenta de faltas que dieron lugar á la crítica.

Mientras Basedow se ocupaba en escribir la obra elemental proyectaba tambien la creacion de un vasto seminario, de una escuela modelo completa para educar jóvenes ciudadanos del mundo, de un filantropinum, es decir, establecimiento de amor á los hombres, en el cual debian permanecer los niños hasta la edad adulta. Por falta de fondos no llegó á realizarse este ideal de Basedow y en su lugar se creó en menor escala un instituto filantrópico de educacion en Dessau el mismo año en que vió la luz pública la Obra elemental. Walke fue el auxiliar mas activo é infatigable de Basedow; pero éste dejó muy pronto la direccion del instituto, se sucedieron de año en año los directores, faltó la armonía entre los maestros y tuvo que cerrarse el establecimiento en 1793. Creáronse sin embargo otros establecimientos á imitacion del instituto filantrópico, los cuales subsistieron por muchos años. Rochow, sin ser admirador ciego de los principios filantrópicos, los adoptó tambien y dió grande impulso á la reforma de las escuelas de Alemania.

En los primeros años de los trabajos de Basedow se interesaron por la nueva escuela multitud de personas. Los periódicos de mas crédito daban cuenta de su organizacion y régimen, y encarecian los resultados sin dejar de señalar los defectos. Pero pasado el primer entusiasmo empezaron los ataques, especialmente por los pedagogos de la antigua escuela, que no perdonaron la obra elemental, ni el instituto, ni al fundador, el cual tuvo que pasar por todas las amarguras de los reformadores, viéndose calificado de revolucionario, de incrédulo, y con otros mil dictados. Verdad es que el mismo Basedow dió en parte lugar á la crítica con su inconstancia, su desprecio por todo lo antiguo, su tendencia casi exclusivamente práctica, su método por el cual queria reducir á juegos los estudios mas importantes, los escasos resultados en la educacion y enseñanza, y su afan por destruir lo existente, sin sustituirlo con cosas nuevas, ni completar y perfeccionar lo que emprendia. Todo esto indujo á reformar su método, en cuya necesidad convinieron hasta sus mismos partidarios.

De todos modos, los hombres imparciales y hasta los adversarios de Basedow convienen en que supo atraer las miradas de todos sobre la educacion pública, descuidada hasta entonces, que escitó el