entusiasmo 'general, é interesó á los gobiernos en tan importante objeto. Dió nuevo impulso á la pedagogía en Alemania, impulso que se conserva en nuestros dias y á que son debidos multitud de métodos, de obras de texto y de otros medios de instruccion. Mejoró las escuelas rurales; y los seminarios de maestros, que tantos beneficios han producido, son en parte obra de Basedow. Estos hechos no pue den ponerse en duda, á no ser que solo se quiera ver los defectos de la escuela de los filantropos y se cierre los ojos á lo que encierran de bueno las ideas de Basedow y de Rousseau. Véase el artí¬ culo: FILANTROPOS (Escuela de los). (Elementarwerk, Auguier, Niemeyer.} BASILIO (San). (Historia de la educacion.) Los padres de la Iglesia crearon una literatura de carácter nuevo, cuando la antigua perdia el suyo. Hasta su tiempo nunca se habia pensado en congre→→ gar al pueblo en el recinto de una iglesia para dictarle reglas, sino que el conocimiento de las cosas sagradas era privilegio del menor número. Cuando Jesucristo dijo: Id y predicad a todos, entonces empezó á exponerse la verdad á la congregacion de los fieles. Cuando pudo resonar en el púlpito la palabra divina, empezó la elocuen→ cia cristiana. Entre los mas elocuentes oradores se distingue san Basilio, que engalanado con todos los ornamentos del arte, consagraba sus esfuerzos á la instruccion y moralidad de los hombres, á quienes procuraba conciliar por medio del amor. Pero dejemos hablar á Cantú, de quien hemos tomado estos apuntes. Se ocupa mucho menos san Basilio en discutir la exactitud del dogma, que en la benéfica tarea de mejorar las costumbres; y sus exhortaciones, que aviva la clocuencia de un lenguaje castizo, respiran el entusiasmo del convencimiento. Sus discursos son mas inteligibles para nosotros que los de los antiguos oradores, porque la causa de la humanidad, de que se hicieron campeones, es mas universal, mas vital que la de una república. Despues de tantos siglos, todavía nos ofrecen el cuadro vivo de las luchas interiores, de las incertidumbres, de las esperanzas que acompañan al hombre en la corta travesía desde la cuna hasta el sepulcro. Abandonando el pueblo griego los talleres, donde ganaba el cotidiano sustento, acudia curioso y anhelante á aquella enseñanza, que ocultaba el arte de Atenas bajo una sencillez popular y persuasiva. Basilio desarrollaba primeramente á las miradas del pueblo de TOMO I. 20 ན Cesarea las maravillas de la creacion, para conducirle despues á la contemplacion del Criador gradualmente. Todas las mañanas y todas las noches exponia el órden de las estaciones, los movimientos alternativos del mar, los instintos diversos de los animales, su emigracion regular, y todo lo que produce mayor pasmo en la naturaleza humana. «Si algunas veces, esclama, en medio de la serenidad de la noche habeis pensado en el Criador de todas las cosas, fijando vuestros ojos en la inesplicable hermosura de los astros; si os habeis preguntado quién es el que ha sembrado el cielo con tantas flores; si algunas veces habeis estudiado durante el dia las mara villas de la luz, y si os habeis elevado por conducto de las cosas visibles hasta el Ser invisible, en ese caso sois oyentes perfectamente preparados, y podeis ocupar un puesto en este magnífico anfiteatro; venid, á semejanza del que coge por la mano á los que no conocen una ciudad y les hace recorrer sus calles; así os voy á guiar como estrangeros á través de las maravillas de esta gran ciudad del uni 3 Describe y explica con ayuda de una fisica errónea á menudo, si bien con una imaginacion siempre inteligente, y elevando de contínuo las almas hacia el Criador, y haciendo brotar reflexiones morales de este gran libro de la naturaleza, en quien todo es símbolo para quien sabe consultarlo. «Pero ¿puedo yo descubrir la hermosura del Océano tal como aparece á los ojos de su Criador? Si el Océano es bello y digno de elogio delante de Dios, ¡cuánto mas hermoso es el movimiento de esta asamblea cristiana, en que las voces de los hombres, de los niños y de las mugeres, confundidas y resonantes como las olas que se estrellan en la playa, se elevan hasta el mismo Dios en medio de nuestras oraciones!»> 1 A Sus homilías están llenas de uncion evangélica, y especialmente de caridad. Por eso fué llamado el Predicador de la limosna, pues era á sus ojos un medio de reparar la desigualdad de las riquezas, principalmente en aquellos tiempos en que, según cuenta el mismo santo, se veia obligado á veces un padre å vender un hijo para ad→ quirir el pan necesario á la subsisteneia de los demas; espectáculo deplorable que arrastraba á Basilio hasta el punto de considerar toda riqueza como resultado del robo... Pinta la fragilidad de la vida y de todas las cosas humanas con los colores de la Biblia, tan diferentes de los de Simónidas y Stesichoro: hácela, por decirlo así, palpable con imágenes siempre insinuantes: «De la misma manera, dice, que los que duermen dentro de un barco son empujados bácia el puerto y llevados sin saberlo al término de su viaje, asi en la rapidez de nuestra vida fugitiva somos arrastrados hácia nuestro último término por un movimiento insensible y contínuo. Duermes y el tiempo huye; velas y meditas, no por eso deja de correr tu existencia. Somos como los corredores, obligados á dar cima á una carrera. Pasas delante de todo: detrás de tí nada dejas; en el camino has visto árboles, prados, aguas, y todo cuanto puede recrear la vista. Has experimentado un instante de embeleso y has pasado adelante; pero has caido sobre piedras, en precipicios, por rocas, entré fieras, reptiles venenosos y otras plagas. Despues de haber padecido un poco, los has dejado detrás de tu huella. Tal es la vida no son durables sus penas ni sus pla Projam get, a , non or cul out cerest » }: ...BAUTISMO. Ahora se recibe el bautismo en una edad que no permite atencion á las augustas ceremonias que se observan en su administracion, ni á los empeños que se contraen; y asi és necesario hacer recuerdo de todo, cuando es posible aprovecharse de ello. No haya descuido en hacer renovar á los niños los votos de su bautismo, ya en el aniversario del dia en que lo recibieron, ya en las víspera de Pascuas y Pentecostes, únicos dias en que en otro tiempo se lad ministraba pública y solemnemente este Sacramento; costumbre cu yos preciosos vestigios se ven aun en la procesion que se hace en estos dias á las pilas bautismales. Para saçar mas fruto de esta piadosa práctica, conviene hacer que los jóvenes asistan al bautismo de algun niño, para que vean todas las ceremonias; y explicarles despues lo que significan Estó es, dice el ilustrísimo Fenelon, lo que les hará masi perceptible su espíritu y su finu De este modo les hareis entender cuán grande be neficio es el ser cristiano, y cuán funesto y abominable el serio como to son en el mundo Esponedles a menudo los exorcismos y las promesas del bautismo, para mostrarles que, bien lejos de tener autoridad sobre nosotros los ejemplos y máximas del mundo, deben hacernos sospechoso todo lo que dimana de manantial tan odioso y envenenado. Tampoco receleis representarles, como san Pablo, al demonio reinanté en el mundo, y agitando los corazones de los hom+ bres por todas las pasiones mas violentas, á cuyo impulso solicitan las riquezas, la gloria mundana y los placeres. Esta es, les direis, aquella pompa que mas propiamente es del demonio que del mundo; este es el espectáculo dé vanidad á que no debe el cristianismo abrir : su corazon y sus ojos. El primer paso que se da en el cristianismo por este Sacramento, es la renuncia de toda pompa mundana; y volver, contraviniendo á tan solemnes promesas hechas á Dios, á buscar al mundo, es caer en una especie de apostasía, como el religioso que en contravencion á sus votos dejase su claustro y hábito para volverse al siglo.»> (Rollin.) BEAUVAIS! (Historia de la educacion.) La erudicion de los árabes se habia trasmitido desde España á los paises occidentales de Europa, y como natural consecuencia de esto avanzaron los ramos del saber llamados ciencias por oposicion á las artes liberales, y la filosofía escolástica tomó formas sistemáticas porque empezaron á conocerse mejor las obras de Aristóteles. Mas la filosofía especulativa trajo luego consigo el descuido de las ciencias históricas, y la forma científica el del conocimiento de las cosas, á lo cual vino á agregarse la ciega creencia en la autoridad de los doctores para detener el desarrollo intelectual. En tales circunstancias, ni la filosofía, ni la pedagogía hicieron progreso alguno; y los místicos que se oponian al abuso del escolasticismo no adelantaron un paso mas en las ciencias. Fundose en un arrabal de Paris el año 1409 la escuela de san Victor en el convento del mismo nombre, y de alli salieron los únicos hombres que en aquella época se hicieron notar como autores pedagógicos.. Entre los discípulos de la escuela fundada por Guillermo de Champeaux se cuenta Vicente de Beauvais, hombre importante en su época, sobre todo para la historia de la educacion. Ni fué obispo de Beauvais como algunos preténden, ni preceptor de los hijos de Luis IX: A fin de consagrarse á los estudios, rehusó el obispado para el cual es cierto, se le habia elegido, y no abandonó los libros hasta su muerte, ocurrida en 4270. Si escribió su Educacion de los principes, fué, segun manifiesta en el prólogo, para que los preceptores de los hijos de san Luis pudieran sacar partido de este libro, para que lo hicieran copiar á sus discípulos, y para que lo leyesen estos cuando llegaran al uso de la razon etc. }: Ademas del libro de la Educacion de los principes, habia emprendido Beauvais la publicacion de una Enciclopedia de los conocimientos de su época, impulsado por Luis IX. Publicó solamente tres libros, en los cuales se encuentra un artículo muy extenso sobre educación. El libro cuarto, que no llegó á redactarse, debia tratar de la moral. Pero su obra mas importante era la primera. Sirvióle de base el opúsculo de Hugo de san Victor, y no hizo mas que réunir las ideas de la época sobre educacion, sin que se distinga por lá originalidad de la materia ni de la forma, y exponer el estado de los estudios en algunos conventos franceses del siglo xu. La lectura de esta obra hace ver desde luego que el autor olvidó casi enteramente el objeto que se habia propuesto, pues que toda su doctrina es aplicable á los niños y á los jóvenes de las diferentes clases de la sociedad. He aqui un resúmen de esta obra: Los hijos de los príncipes necesitan una educacion tanto mas esmerada cuanto á mayor altura hayan de elevarse despues.—El alma, pura en sí misma, está envuelta en tinieblas y en la ignorancia inte lectual desde que se une con el cuerpo; el niño necesita instruirse y educarse, para lo cual es preciso récurrir alguna vez á los castigos corporales, no solo con objeto de corregir sus costumbres, sino para destruir su pereza y llevarle á adquirir conocimientos. El preceptor ha de ser el modelo de los discípulos en ciencia y en con ducta. Las lecciones han de ser claras, concisas, interesantes. Para aprender se requieren tres cosas: disposiciones naturales, ejercicios y conducta irreprensible. Seria una falta muy grave, bajo el punto de vista moral, hacer leer á los niños fábulas ó las creaciones de una imaginacion voluptuosa; es preferible hacerles leer los Evangélios de Juvencus y otras poesías religiosas análogas. Para adelantar en los estudios de cualquier ramo se requiere órden, amor á la ciencia y los esfuerzos necesarios para alcanzarla. Siendo los estudios filológicos y gramaticales la base de toda ciencia, es preciso comenzar por ellos. No ha de leerse mucho, sino buenos libros; léase con reflexion, único medio de que sea útil la lectura; léase con órden y método; agréguese á esto los extractos por escrito de lo que se lee y la conversacion con personas instruidas. Todos los conocimientos adquiridos deben servir para la edificacion, porque siendo Dios el fin de todas las cosas, la ciencia que trata de Dios y de las cosas divinas es la única que merece el nombre de sabiduría. Nos es permitida la lectura de libros profanos porque nos hace saber muchas cosas que de otro modo permanecerian ignoradas, y porque están de acuerdo en muchos puntos con las Sagradas Escrituras. La reflexion termi nará la obra comenzada con la lectura; el sábio encontrará nías en sí mismo que en los libros; sin embargo, no ha de fatigarse demasiado á los jóvenes con una atencion sostenida, ni su memoria con demasiados ejercicios. Siendo inútil y nociva la ciencia sin la virtud, debe comenzar la educacion moral desde la infancia; desde la mas tierna |