Las cien mejores poesías (líricas) de la lengua castellanaV. Suárez, 1908 - 350 páginas |
Dentro del libro
Resultados 1-5 de 22
Página 9
... blando , cuán alagüero El mundo con sus placeres Se le daba ! Mas verás cuán enemigo , Cuán contrario , cuán cruel Se le mostró , Habiéndole sido amigo , Cuán poco duró con él Lo que le dió ! Las dádivas desmedidas , Los edificios ...
... blando , cuán alagüero El mundo con sus placeres Se le daba ! Mas verás cuán enemigo , Cuán contrario , cuán cruel Se le mostró , Habiéndole sido amigo , Cuán poco duró con él Lo que le dió ! Las dádivas desmedidas , Los edificios ...
Página 68
... blando Pecho pasado del veloz montero : Vuelve cuitada , vuelve al valle , donde Queda muerto tu amor , en vano dando Términos desdichados á tu suerte . Morirás en su seno , reclinando La beldad , que la cruda mano esconde Delante de la ...
... blando Pecho pasado del veloz montero : Vuelve cuitada , vuelve al valle , donde Queda muerto tu amor , en vano dando Términos desdichados á tu suerte . Morirás en su seno , reclinando La beldad , que la cruda mano esconde Delante de la ...
Página 120
... Y el humo de su cabaña Le va sirviendo de norte . Llegaron temprano á ella , Do una labradora acoge Un mal vivo con dos almas , Una ciega con dos soles . Blando heno en vez de pluma Para lecho les compone 120 DON LUIS DE GÓNGORA.
... Y el humo de su cabaña Le va sirviendo de norte . Llegaron temprano á ella , Do una labradora acoge Un mal vivo con dos almas , Una ciega con dos soles . Blando heno en vez de pluma Para lecho les compone 120 DON LUIS DE GÓNGORA.
Página 121
Marcelino Menéndez y Pelayo. Blando heno en vez de pluma Para lecho les compone , Que será tálamo luego . Do el garzon sus dichas logre . Las manos , pues , cuyos dedos Desta vida fueron dioses , Restituyen á Medoro Salud nueva , fuerzas ...
Marcelino Menéndez y Pelayo. Blando heno en vez de pluma Para lecho les compone , Que será tálamo luego . Do el garzon sus dichas logre . Las manos , pues , cuyos dedos Desta vida fueron dioses , Restituyen á Medoro Salud nueva , fuerzas ...
Página 131
... lecho Sobra la mitad . Dexadme llorar Orillas del mar . DON FRANCISCO DE QUEVEDO El Sueño 53 . Sueño blando y suave , ¿ CON qué culpa tan grave , Pude en largo destierro merecerte Que se aparte de mí 131 DON LUIS DE GÓNGORA 99 - 53.
... lecho Sobra la mitad . Dexadme llorar Orillas del mar . DON FRANCISCO DE QUEVEDO El Sueño 53 . Sueño blando y suave , ¿ CON qué culpa tan grave , Pude en largo destierro merecerte Que se aparte de mí 131 DON LUIS DE GÓNGORA 99 - 53.
Contenido
1 | |
2 | |
14 | |
28 | |
34 | |
35 | |
42 | |
46 | |
105 | |
117 | |
123 | |
131 | |
141 | |
145 | |
174 | |
176 | |
60 | |
73 | |
75 | |
76 | |
82 | |
84 | |
92 | |
94 | |
97 | |
101 | |
104 | |
179 | |
207 | |
226 | |
232 | |
244 | |
273 | |
276 | |
300 | |
322 | |
349 | |
Otras ediciones - Ver todas
Términos y frases comunes
adargas agora agua aire airón alegre Alhama Aliatar aliento alma amado amante amor aqueste ardiente aurora aves azor BALTASAR DEL ALCÁZAR bella Blanca de Castilla blando brazos caballo canto céfiro celestial cielo cierva corazon corona Despues Dexadme llorar Orillas dexó divino dolor dulce dulce libertad dura enojos eres escondido escucha espanto esperanza esposa eterno Favonio fiero Flandes flores Francisco Salinas fuego gente gloria Gnido guerra hermosa hermosura Huye impios Inés lágrimas Licio llanto llena mano mira mis ojos monte moro muda muerte mundo muro nieve ninfa noble noche nube ondas paso pastores patria pecho perdido piélago Poderoso caballero prado pura quiero rayo ribera Rodrigo Manrique rosas Salid sin duelo sangre serena silencio soberbia soledad sombra suelo suena sueño suerte suspiro Tántalo tierna tierra torno triste turba ufana valle vano velo ventura verdad viento virtud vitoria vivir vuelo Zenetes ΕΙ
Pasajes populares
Página 135 - No he de callar, por más que con el dedo, ya tocando la boca o ya la frente, silencio avises o amenaces miedo. ¿No ha de haber un espíritu valiente? ¿Siempre se ha de sentir lo que se dice? ¿Nunca se ha de decir lo que se siente?
Página 67 - No me mueve, mi Dios, para quererte, el cielo que me tienes prometido, ni me mueve el infierno tan temido para dejar por eso de ofenderte.
Página 47 - ¡Qué descansada vida la del que huye el mundanal ru'ido, y sigue la escondida senda, por donde han ido los pocos sabios que en el mundo han sido! Que no le enturbia el pecho de los soberbios grandes el estado, ni del dorado techo se admira, fabricado del sabio moro, en jaspes sustentado.
Página 36 - Con mi llorar las piedras enternecen su natural dureza y la quebrantan, los árboles parece que se inclinan; las aves que me escuchan, cuando cantan con diferente voz se condolecen, y mi morir cantando me adivinan. Las fieras que reclinan su cuerpo fatigado, dejan el sosegado sueño por escuchar mi llanto triste.
Página 61 - Buscando mis amores, iré por esos montes y riberas, ni cogeré las flores, ni temeré las fieras, y pasaré los fuertes y fronteras.
Página 20 - Cartas le fueron venidas que Alhama era ganada ; las cartas echó en el fuego, y al mensajero matara. «¡Ay de mi Alhama!» Descabalga de una muía, y en un caballo cabalga ; por el Zacatín arriba subido se había al Alhambra. « ¡ Ay de mi Alhama ! » Como en el Alhambra estuvo, al mismo punto mandaba que se toquen sus trompetas, sus añafUes de plata.
Página 142 - Salíme al campo, vi que el sol bebía los arroyos del hielo desatados; y del monte quejosos los ganados que con sombras hurtó su luz al día. Entré en mi casa: vi que amancillada de anciana habitación era despojos; mi báculo más corvo y menos fuerte. Vencida de la edad sentí mi espada y no hallé cosa...
Página 229 - DEL PIRATA Con diez cañones por banda, Viento en popa a toda vela No corta el mar, sino vuela Un velero bergantín: Bajel pirata que llaman Por su bravura el Temido, En todo mar conocido Del uno al otro confín. La luna en el mar riela, En la lona gime el viento, Y alza en blando movimiento Olas de plata y azul...
Página 183 - Sí, yo lo juro, venerables sombras; yo lo juro también, y en este instante ya me siento mayor. Dadme una lanza, ceñidme el casco fiero y refulgente; volemos al combate, a la venganza; y el que niegue su pecho a la esperanza hunda en el polvo la cobarde frente.
Página 109 - ... lejos. Ni estoy bien ni mal conmigo, mas dice mi entendimiento que un hombre que todo es alma está cautivo en su cuerpo. Entiendo lo que me basta, y solamente no entiendo cómo se sufre a sí mismo un ignorante soberbio.