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at any particular time what it is then understood to be; and this understanding of it is compounded of the circunstances of the time. Absolute theories of legal consequence they have never cared to follow out to their conclusions. Their laws have always been used as parts of the practical running machinery of their politics, parts to be fitted from time to time, by interpretation, to existing opinion and social condition."

Si algún ejemplo necesitare la condenación de la teoría que olvida los efectos de los actos políticos, la creación de nuestra única Embajada sería bastante elocuente. El cuerpo diplomático está presidido por el representante extranjero de mayor categoría, o por el decano entre los de la misma jerarquía. Crear una sola Embajada, es decretar la jefatura del cuerpo diplomático a favor de ese Embajador. Unico Embajador, creado por el Gobierno del General Díaz, es el representante de los Estados Unidos. El representante de los Estados Unidos será el Jefe del cuerpo diplomático en esta Nación. Por razón de vecindad, de mayor número de intereses entre México y Estados Unidos, corremos constantes peligros de conflictos con nuestro vecino del Norte. Cuando esas dificultades afectan a la diplomacia en general, o a los intereses de algunas potencias poderosas, el cuerpo diplomático se hace escuchar. ¿Es conveniente que ese cuerpo en tales circunstancias esté bajo la presidencia del Embajador Americano? Recuérdese la caída de Madero. En la casa de Wilson tuvieron lugar las juntas revolucionarias, él concertó las voluntades para el llamado

pacto de la Embajada, él convocaba a los diplomáticos, él fijaba el objeto de las juntas, él empujaba al Ministro de España para pedir al Presidente su renuncia. Si el Gobierno del General Días hubiera estudiado las consecuencias, no habría creado una situación que diera la jefatura diplomática al que en muchos casos puede representar hostilidad para México. Los países europeos, en caso de conflicto, sería muy raro que estuvieran del lado nuestro, por eso debemos evitar tener embajadores europeos. Las embajadas que deben crearse son las de países Latino Americanos, de nuestras hermanas las Repúblicas de Centro América o del Sur. Guatemala, El Salvador, Chile, Argentina o Brasil son las que pueden estar ligadas con nosotros por medio de embajadas. Es necesario no olvidar que la imprevisión es la característica de los gobiernos sin estadistas.

Al dar a la prensa estas planillas he tenido que continuar mi obra de mutilación del original que tenía escrito. Para evitar el gran gasto de un libro voluminoso, que mucho temo tenga pocos lectores, he tenido que suprimir capítulos y reducir el contenido de varios. Esto explica que ponga punto final a este capítulo.

GOBIERNO

Todo lo expuesto tiende a purificar el medio del que deben brotar los gobiernos y el progreso nacional. Surge ahora la cuestión de si dado nuestro actual

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medio es posible la soberanía popular, expresada por el Gobierno democrático. No podemos prescindir de un Gobierno. ¿Cómo obtenerlo? ¿La victoria designará al Presidente? Entonces a la elevación de cada Presidente debe preceder una revolución. Ese Gobierno sería la guerra en estado intermitente obligatorio, esto es, sería la ruina de la Patria por la abolición de la paz. ¿Se autorizaría al Presidente para nombrar al sucesor? Dos razones se oponen: 1o Los gobiernos militares terminan en la derrota, y en consecuencia no podría hacer tal designación. Los gobiernos personales de Francia no han podido tener arraigo. Un estadista francés que escribió en 1875 dice: que en 80 años Francia ha cambiado 13 veces de Gobierno. Nuestra historia y la de América del Sur acreditan que los gobiernos impuestos por la fuerza armada tienen corta vida. 2o Ese nombramiento no tendría motivo alguno para ser conveniente. El vencer en un combate no garantiza el patriotismo, ni la aptitud para designar un sucesor. El General Díaz nombró para Presidente al General González, y el país se estremeció, la moral pública se hundió más, y la hacienda pública llegó a la bancarrota. Si los gobiernos militares no pueden realizar la paz, ni pueden garantizar un buen Gobierno, tenemos que pensar en otro procedimiento que nos dé Gobierno. La soberanía nacional sólo tiene una manifestación, dado el carácter constitucional representativo del Gobierno, a saber: la de elegir representantes. ¿Puede elegirlos el pueblo? La elección popular exige tres condiciones: que no puedan votar los anal

fabetas, ni el ejército; que voten todos los que saben leer y escribir, y que cada voto sea computado legal

mente.

Permítaseme partir de la hipótesis de que estas condiciones sean cumplidas.

Un buen candidato exige dos hechos: ausencia de vicios y presencia de cualidades. Paso a examinar el primero. Nada hay más funesto para un pueblo que el que sus representantes tengan vicios en su vida privada y corrupción en su vida pública. Ser ébrios, pendencieros, jugadores, ladrones, incestuosos, disolutos, crueles, sin valor civil, etc., etc., son hechos de vida privada.

El predominio de intereses privados en la gestión pública, es la corrupción política. ¿El pueblo no da garantías de apartar de las funciones públicas a los hombres con esos vicios? Casi todos los gobernadores impuestos por el régimen del General Díaz los tenían. Casi todos se enriquecían, todos usaron de las fuerzas que el bien público ponía en sus manos para perpetuarse en el Poder mediante una tiranía sin freno ¿Cuál de esos gobernantes fué popular? Ninguno lo fué, y todos tenían raíces en el afecto e intereses del dictador. Si el pueblo hubiera podido votar, ninguno de ellos habría conservado su puesto.

¿Qué cualidades creyó encontrar el pueblo en los hombres a quienes aclamó? Virtudes y patriotismo. Inmensa aura popular rodeó a Juárez a la caída del Imperio. Y Juárez representaba la firmeza, la resolución inquebrantable, el valor para entregar su vida

en defensa de su bandera, como en Guadalajara; la paciencia inagotable, el guante arrojado al Clero, el carácter indomable al servicio de la Patria. Estas grandes virtudes apasionaron al pueblo. ¿Cuándo comenzó a declinar la popularidad de Juárez? Cuando abusó del Poder para hacerse reelegir, esto es,cuando pisó el primer peldaño en la escala de la corrupción pública. El pueblo estuvo del lado de las virtudes, el pueblo estuvo contra el vicio político.

El General Porfirio Díaz fué un héroe popular. Era el soldado incansable del cinco de mayo, de Miahuatlán y de la Carbonera; fué uno de los heroicos jefes que sin condiciones se entregaron al invasor triunfante; era el que había escalado los muros de su prisión poniendo su espada a la defensa de la Soberanía Nacional, el que se había batido como león sobre las gradas del cadalso que el Imperio había levantado para los patriotas; era el sitiador de México que en silenciosa probidad había recogido fondos desconocidos para entregarlos a Juárez en horas de penuria; era el hombre sencillo y austero que al entrar como vencedor en la Capital, no se instaló en el Palacio Nacional, sino que fué a habitar humilde casa, más humildemente ajuarada, en una calle apartada; era el hombre generoso para sus amigos y guardián de la propiedad privada; ante sus huestes, era el hombre en cuyas manos veía el pueblo el látigo de Jesucristo para arrojar a sus mercaderes del templo. Tales son las grandes virtudes que levantaron a Porfirio Díaz en el alma nacional. ¿Cuándo lo abandonó el pueblo? Cuando con

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