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Y mas me matais no os viendo
Que me penais en mirando.

Si ovierades ya seido,

Ficiera razon humana,
Segun el gesto garrido,
Vos ser madre de Cupido
Y gozar de la manzana:
Pues si Paris conociera
Que tan fermosa señora
Por nacer aun estuviera,
Para vos, si lo supiera,
La guardara fasta agora.

Cuanto mas bella se para
De las estrellas la luna,
Tanto vuestra linda cara
Se nos muestra perla clara
Sobre las fermosas una.
Cual el Fenix hizo Dios
En el mundo sola una ave,
Así quiso que entre nos
Solo tal fuesedes vos,
De fermosura la llave.

La vuestra clara presencia
A las presentes ausenta,
Y desface con prudencia
Cuanto saber y ciencia
Vivo seso representa:
Mas teneis otros errores,
O yo soy del todo loco,
Que de remediar amores
Segun muestran mis dolores
Vos sabeis, señora, poco.

Pues tales faciones tanto

Son en vos como perdidas,
Que si me echo ó me levanto,
En el mi terrible planto
Solo yo lloro dos vidas:
La mia porque se acabe
Pues que muere por amar,
La vuestra porque no sabe
De la bondad que le cabe,
Ni se quiere aprovechar.

Ya por Dios este pensar
No os traiga tan engañada,
Mas quered considerar
Que es deleite desear,
Cuanto mas ser deseada!
Aunque ramo por memoria
Vos dé Diana de palmas,
En haber de mí victoria
No habreis pena ni gloria,
Como en el limbo las almas.

Vos que desde que nacistes
Las beldades se consumen,
Vos que nacida fecistes
Ser envidiosas y tristes
Las que de bellas presumen:
Pues si flor de las hermosas
Quiere razon que vos llamen,
Síguense de aquí dos cosas,
Las damas que estén sañosas,
Los hombres que mas vos amen.

Pues si yo tanto vos quiero,
Vuestra gran beldad lo hace,
Que me fizo así guerrero
De un amor tan verdadero,
Que aunque me pesa me place.
Y he placer y dolor

Por haber de la tal guerra
Ordenado fé y amor:
Facédme pues vencedor
O metédme so la tierra.

Y vos súplico y vos ruego
Me libredes de esta pena,
Ca si muero en este fuego
No quizá fallareis luego
Cada dia un Juan de Mena.

IÑIGO LOPEZ DE MENDOZA.

MARQUES DE SANTILLANA.

+1458.

SERRANILLA.

Moza tan fermosa

Non vi en la frontera

Como una vaquera

De la Finojosa.

Faciendo la via

De Calatreveño
A Santa María,
Vencido del sueño,
Por tierra fragosa
Perdí la carrera,
Do ví la vaquera
De la Finojosa.

En un verde prado
De rosas é flores,
Guardando ganado
Con otros pastores,
La ví tan graciosa
Que apenas creyera
Que fuese vaquera
De la Finojosa.

Non creo las rosas
De la primavera
Sean tan fermosas
Nin de tal manera.
Fablando sin glosa,
Si antes supiera
Daquella vaquera
De la Finojosa,

Non tanto mirara

Su mucha beldad,
Porque me dejara
En mi libertad.
Mas dije: «donosa,
(Por saber quien era)
¿Donde es la vaquera
De la Finojosa?»

Bien como riendo,

Dijo: «Bien vengades,
Que ya bien entiendo
Lo que demandades:
Non es deseosa

De amar nin lo espera,
Aquesa vaquera
De la Finojosa.»

SONETO.

No en palabras los ánimos gentiles,
No en amenazas, ni en semblantes fieros
Se muestran altos, fuertes e viriles,
Bravos, audaces, duros, temederos.
Sean los actos non punto civiles
Mas virtuosos e de caballeros,
E dejemos las armas feminiles,
Abominables á todos guerreros.
Si los Cipiones e Decios lidiaron

Por el bien de la patria, ciertamente
Non es duda, magüer que non hablaron,

O si Metelo se mostró valiente,

Pues loaremos los que bien obraron
E dejaremos el hablar nociente.

FERNAN PEREZ DE GUZMAN.

Floreció por los años de 1470.

PROVERBIOS.

A la peticion honesta

Si te basta el poder,
Callando con obra presta
Deves luego responder.

Es virtud e muy loable
La justicia ejercitar,
Mas de natura amigable
Non ménos el perdonar.

El que nunca fué regido,
Nunca bien sabrá regir;
El que supo bien servir
El se sabrá ser servido.

Si te sientes trabajado

De pobreza, nunca cates
Al muy rico e abundado
Porque á tí mismo non mates.

Mira el que ménos ha

E mas que tú merecia,
Que en esto se aliviará
Tu trabajo e cesaria.

Si la bondad se vendiese,
Yo dudo que se fallase
Quien en precio la pusiese,
Cuanto mas quien la comprase.

Es amarga mas que fiel
La justicia á los viciosos,
Pero dulce mas que miel
A los nobles virtuosos.

RODRIGO COTA.

Floreció por los años de 1470.

CANTARCILLOS.

I.

Vista ciega, luz oscura,
Gloria triste, vida muerta,
Ventura de desventura,
Lloro alegre, risa incierta:
Hiel sabrosa, dulce agrura,
Paz con ira y saña presta
con vestidura

Es amor,

De gloria que pena cuesta.

II.

Dulces árboles sombrosos,
Humilláos cuando veais
Aquellos ojos graciosos
Del que tanto deseais:
Estrellas que relumbrais,
Norte y lucero del dia
¿Porqué no le despertais
Ši aun duerme mi alegría?

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