los Capítulos trienales, y cuyo Abad era reformador general de la orden en Castilla.

Muerto D. Alfonso VIII fué uno de los más fieles Ricos-omes de doña Berenguela, sufriendo persecuciones de los Laras durante la revuelta minoría de D. Enrique I, de las cuales da fe la Estoria (pág. 712) que hace mérito de su respeto al Rey en estas palabras: <... et don Alffonso Tellez, maguer que tenien mas caualleros, non quisieron yr a acorrer a Suer Tellez, auiendo uergüença al rey don Enrrique que era y», y de su valor personal en estas otras: «Et dalli ueno a Villa Alua del Alcor contra Alffonso Tellez... et tomaron á Alffonso Tellez los cauallos et las armas et aun firieron a él; et él ferido, metiosse en su fortaleza, et alli estido çercado yaquantos días, deffendiendosse como uaron».

Proclamado San Fernando pudo desquitarse con creces, presentándole la Estoria (715 y 716) como uno de los que ayudaron al rey Santo en su campaña contra los revoltosos Laras, logran do él personalmente la prisión del Conde D. Alvaro en campo abierto y haciéndole comparecer preso ante Fernando III y doña Berenguela. No vuelve á parecer su nombre en la primera Cróninica general hasta el folio 722 en que se le enumera entre los grandes omnes que acompañaban á San Fernando cuando vino á ceñirse la corona de León, siendo esta su última mención, pues murió poco después en 1230, según Salazar y Castro, habiendo sido el segundo señor de Meneses, y el primero de Alburquerque, cuyo señorio debió obtener merced á su segundo matrimonio con doña Teresa Sánchez, hija natural de D. Sancho I de Portugal, puesto que tal señorío pasó á los hijos de esta segunda línea; mientras que el señorío de Meneses pasó á su primogénito

D. Tello Alfonso, hijo de su primera consorte doña Elvira Ruiz Girón.

Entre los magníficos y profanados sepulcros de que hizo mérito la Comisión de monumentos de Valladolid al dar cuenta de su visita á Palazuelos en 1888, cuyo informe insertó Ortega en la pág. 218 del tomo II de su Historia de los pueblos de la provincia de Valladolid debe hallarse el de este opulento magnate, que según Argote de Molina en su Nobleza del Andalucía pág. 177 tuvo el siguiente epitafio:

OBIIT ALPHONSUS TELLI

NOBILIS AMATOR TOTIUS

BONITATIS FACTOR IS

TIUS MONASTERII

BRA CIO. CC. LX. VIII.

que tradujo así: El noble D. Alonso Tellez amador de toda bondad, fundador de este monesterio, murió en el año del Señor mil doscientos treinta.

DOCUMENTO III

Privilegio rodado expedido por Don Alfonso VIII á 3 de Julio de 1204 en el real sobre Castro-Nufio otorgando la villa de Pedrosilla á su repostero Don Fernán Sánchez.

Christus. Per presens scriptum pateat tam presentibus quam futuris, quod ego Aldefonsus, Dei gratia, Rex Castelle et Toleti, una cum uxore mea Alienor Regina, et cum filiis meis Ferrando et Henrico 1, libenti animo et uoluntate spontanea pro multis et gratis obsequiis, que mihi hactenus exhibuistis et iugiter ac incessanter exhibere non cessatis, facio cartam donacionis, concessionis, et stabilitatis uobis Ferrando Sancii dilecto et fideli repostario meo, et uxori uestre domne Vrrace, et omni successioni uestre perhenniter duraturam. Dono itaque uobis et concedo uillam meam prope Vallemoleti, quam uocant Pedrosellam 2, sitam inter Cigales et Muznientes et inter Fonsaldaniam et Bambellam cum collaciis, solaribus populatis et heremis, terris, uineis, pratis, pascuis, aquis, nemoribus et defesis, cum ingressibus et egressibus, et cum omnibus directuris ibidem mihi pertinentibus iure hereditario imperpetuum habendam et irreuocabiliter possidendam, ad faciendum de ea quicquid uolue

ritis; dando, uendendo, concambiando, impignorando, uel quodlibet aliud faciendo. Addo preterea, et firmiter tenendum statuo, ut nunquam amplius aliquis Merinus uel Sagio causa pignorandi, uel ocasione aliquid in predicta uilla uestra exigendi, ibi intrare presumat. Si quis uero hanc cartam infringere uel diminuere presumpserit iram Dei omnipotentis plenarie incurrat, et cum Juda Domini proditore penas sustineat, et insuper Regie parti mille aureos in coto persoluat, et dapnum quod super hoc intulerit dupplicatum restituat. Facta carta in exercitu prope Castrum Nunii 3. Era millesima ducentesima quadragesima secunda, tertio die mensis Julii. Et ego Rex Aldefonsus regnans in Castella et Toleto hanc cartam, quam fierl iussi, manu propria roboro et confirmo.

Martinus, Toletane sedis Archiepiscopus Hyspaniarum Primas, confirmat.

Aldericus, Palentinus Episcopus, confirmat. Ferrandus, Burgensis Episcopus, confirmat. Didacus, Oxomensis Episcopus, confirmat. Rodericus, Seguntinus Episcopus confirmat. Gundissaluus, Secobiensis Episcopus, confirmat. Julianus, Conchensis Episcopus, confirmat.

Albarus Nunii confirmat. Rodericus Diaz confirmat. Gomicius Petri confirmat. Rodericus Roderici confirmat. Petrus Gonzalui de Marannone confirmat. Guterrius Diaz, Merinus Regis in Castella, confirmat.

(Lleva signo rodado de 70 milímetros de díametro en cuyo centro campea la, en cuyo anillo se lee: SIGNUM | ALDEFONSI | REGIS CASTELLE |, y en su exterior lleva en forma de circunferencia estas subscripciones): Gonzaluus Roderici, maiordomus curie Regis, confirmat. Comes Ferrandus Nuníi, alferiz Regis confirmat.

Dominicus domini Regis Notarius, Didaco Garsie existente cancellario, scripsit.

Perg. 330 X 365. Doblez: 040 X 365.-Letra francesa.

Legajo XXI, núm. 34.

Hay hilos de seda verde y roja de los cuales pendió el sello, que hoy falta.

1. filiis meis... et Henrrico. Aparece por vez primera el infante D. Enrique, que fué el sucesor de D. Alfonso VIII en el trono de Castilla, por haber muerto en vida de su padre el infante D. Fernando, á quien se nombra aquí antes como heredero. No podía figurar en documentos anteriores, pues nació en este mismo año de 1204, según se lee en los Anales Toledanos: «Nació el Infant D. Enric, Miércores amanecient en XIV de Abril Era MCCXLII».

2. uillam meam prope Uallemoleti, quam uocant Pedrosellam. Apareció ya Pedrosilla en los documentos del siglo XII, y vuelve á aparecer no sólo en éste sino en algunos otros del siglo XIII, como una de las posesiones más saneadas de la Abadía ó de la Colegiata vallisoletana, confirmándolo el Becerro de las Behetrías que enumera á Pedrosiella como «logar del Abat de Valladolit».

Es por consiguiente raro que D. Alfonso VIII en 1204 la llame suya, uillam meam, cuando en 1115 donó Aznar Sánchez á Santa María la Mayor la iglesia de San Cristóbal y la villa de Pedrosilla según consta de los documentos XXII y XXIII, que obran á las páginas 109 y 113 del tomo anterior; no pudiéndose dudar que sea la misma villa y no otra homónima, pues aunque los documentos del siglo XII situen in antiquo territorio de Setmankas la iglesia de San Cris