Revista de archivos, bibliotecas y museos

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Montepio del Cuerpo Facultativo del Ramo, 1928

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Pasajes populares

Página 112 - No me mueve, mi Dios, para quererte, el cielo que me tienes prometido, ni me mueve el infierno tan temido para dejar por eso de ofenderte.
Página 104 - Poner al Hijo en cruz, abierto el seno, sacrificarlo porque yo no muera, prueba es, mi Dios, de amor muy verdadera, mostraros para mí de amor tan lleno. Que — a ser yo Dios, y Vos hombre terreno — os diera el ser de Dios que yo tuviera y en el que tengo de hombre me pusiera, a trueque de gozar de un Dios tan bueno. Y aun no era vuestro amor recompensado, pues a mí en excelencia me habéis hecho Dios, ya Dios al ser de hombre habéis bajado. Deudor quedaré siempre por derecho de la deuda que...
Página 111 - Señor; muéveme el verte clavado en una cruz y escarnecido, muéveme el ver tu cuerpo tan herido, muévenme tus afrentas y tu muerte. Muéveme en fin tu amor de tal manera que aunque no hubiera cielo yo te amara y aunque no hubiera infierno te temiera. No me tienes que dar porque te quiera, pues aunque lo que espero no esperara, lo mismo que te quiero te quisiera.
Página 8 - ... confirmatione apostolica vel quavis firmitate alia roboratis statutis et consuetudinibus contrariis quibuscumque ; aut si aliqui super provisionibus sibi faciendis de huiusmodi vel aliis beneficiis ecclesiasticis in illis partibus speciales vel generales dicte sedis vel legatorum eius litteras im
Página 107 - El que fuere dichoso será amado, y yo en amor no quiero ser dichoso, teniendo mi desvelo generoso, a dicha ser por vos tan desdichado. Sólo es servir, servir sin ser premiado; cerca está de grosero el venturoso; seguir el bien a todos es forzoso. Yo solo sigo el bien sin ser forzado. No...
Página 112 - Muéveme, en fin, tu amor, y en tal manera, que, aunque no hubiera cielo, yo te amara, y aunque no hubiera infierno, te temiera. No me tienes que dar porque te quiera, pues aunque lo que espero no esperara, lo mismo que te quiero te quisiera.
Página 189 - Nulli ergo omnino hominum liceat hanc paginam nostre concessionis infringere vel ei ausu temerario contraire. Si quis autem hoc attemptare presumpserit, indignationem omnipotentis dei ac beatorum Petri et Pauli apostolorum eius se noverit incursurum.
Página 210 - Tú hollada, Virgen, así ! ... ¡Tú, que pisas de rubí vistosa, viviente alfombra, y besa el ángel tu sombra si pasa cerca de ti ! ¡Tú, de estrellas coronada, del ardiente sol vestida, y de la luna calzada...
Página 110 - ... mueve el infierno tan temido para dejar por eso de ofenderte. Tú me mueves, Señor; muéveme el verte clavado en una cruz y escarnecido; muéveme el ver tu cuerpo tan herido; muévenme tus afrentas y tu muerte. Muéveme, en fin, tu amor, en tal manera que aunque no hubiera cielo yo te amara y aunque no hubiera infierno te temiera. No tienes que me dar porque te quiera; porque aunque cuanto espero no esperara, lo mismo que te quiero te quisiera.
Página 316 - Su nombre figura en el Catálogo de autoridades de la lengua, publicado por la Academia española.

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