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La provincia de los Izalcos.

La cosa más rica y gruesa, que V. M. tiene en estas partes, comienza del rio de Aguachapa y acaba en Gueymaco (d) y costa de Tonalá [23]; corre por la misma costa diez y ocho leguas, tiene las cualidades del suelo y cielo que la de Guazacapan, y abundancia de cacao, pesca y frutos y demás cosas que acá comunmente hay en las tierras calientes, y en especial la más abundante de cacao que se sabe. El árbol que da el cacao es mediano, tiene sus hojas como castañal, aunque mayores; produce flor y fruta casi todas las lunas, y lo mismo hacen en estas partes todos los naranjos; echa su flor el tronco y ramas, comenzando las más veces desde el suelo, y como ellos echan la flor y crian su fruto [24]. Hay otros dos géneros de árboles, que se llaman zícaras y zapotes [e], de que se van criando unas mazorcas (*) más largas y mayores que piñas, y dentro dellas veinticinco ó treinta almendras, que es el cacao, de las cuales doscientas valen comunmente entre los indios un real, y es la moneda que para las cosas menudas corre de ordinario entre ellos y nosotros. Es tan tierno este árbol, que con cualquier estremo se pierde y seca, y ansí para criarle es menester mucho cuidado y ponelle otro árbol que llaman Madre, que le haga sombra y ampare del sol y del aire. Antiguamente era tan estimado, que nadie bebia del dicho cacao, que no fuese cacique, gran señor

(*) Mazorca, especie de espiga, apretada, en que se crian algunos frutos muy juntos.

[23] Este Tonalá no hay que confundirlo con la villa de Tonalá sitnada en Tehuantepeque, cerca de la barra del mismo nombre. La costa de Tonalá forma parte de la del Bálsamo, y lleva todavía el mismo nombre un rio pequeño que desemboca en el mar, al O. de Acajutla.

(24) Se debe suplir la i que falta en el texto, ó poner asi, de manera que empiece con crian la oracion que sigue; únicamente de este modo tiene ésta el sentido que Palacio se propuso expresar, esto es, que las flores, como se sabe, se producen immediatamente de la corteza y tronco de las ramas, lo que para un europeo acostumbrado á ver florecer los árboles en las puntas de las ramas, naturalmente le parecía cosa muy extraordinaria y notable.

(d) Guaymoco.

[e] A mi juicio, el texto debe leerse así: "....y como ellos, echan la flor y crian su fruto otros dos géneros de árboles que se llaman zícaras y zapotes....". Lo cual es cierto respecto de los árboles de jicara ó de guacal crescentia]; pero no del zapotero [achras sapota].

ó valiente soldado (25). Usaban en el sembrallo muchas cerimonias, escogiendo de cada mazorca é piña los mejores granos de cacao, y juntos los que habian menester, los saumaban y ponian al sereno en cuatro dias del plenilunio, y cuando los habian de descombrar, se juntaban con sus mujeres y hacian otras cerimonias bien súcias [26]. En efecto; era la cosa más preciada que acá habia; ha crecido y multiplicádose tanto despues questán en vuestra Real Corona, con la libertad que tienen de bebello y tratallo, que desta provincia principalmente y de su comarca se provee la Nueva-España, de que hay mucho comercio y contratacion de una á otra parte. La calidad desta fructa es casi fria en ter

(25) Bien sabida es la gran importancia que daban los Mexicanos al cacao y lo universalmente apreciado que era el chocolate por este pueblo. Cuando los Mexicanos se apoderaron de una parte de CentroAmérica, conservaron naturalmente este uso, que parece fué un privilegio que se habìan reservado despues de la conquista. Los pueblos sometidos por los Mexicanos no apreciaban el cacao; pero sí las frutas del zapote, árbol que encontraron los Españoles especialmente en las aldeas chorotegas; y en Costa-Rica se encuentran aun hoy dia en medio de los bosques que fueron poblados por tribus de aborígenes, y que hoy dia ya no existen, grandísimos árboles de zapote muy antiguos, como por ejem plo en las orillas del rio San Carlos y del Sarapiquí. Los más antiguos árboles de cacao, por el contrario, que se encuentran en los bosques vírgenes de Matina, ó á orillas del Reventazon, y en la costa opuesta de Paquita y Pirris, han sido plantados por los Españoles despues de haber sido despoblados aquellos lugares por sus persecuciones. Tambien Juárros (en la p. 22) nos informa que en Suchiltepequez (Guatemala), los aborígenes se servían de las semillas del zapote y del cacao silvestre (Pataiste) con las cuales mezclaban un poco de cacao. Las semillas de zapote se vendían allí mismo en grandes cantidades. Tambien Peschel, "Epoca de la Conquista y Descubrimientos", (p. 513), observa que solamente las tribus de aborigenes barbados [los Nahuatlaques de México] poseían plantaciones de cacao, mientras que los Chorotegas plantaban solamente árboles de zapote; y Müller, en su inapreciable obra sobre el "Origen de las Religiones de los Americanos", (p. 538), dice que el chocolate, como la vainilla y otras especias las usaban únicamente los nobles; por esta razon, he usado en lugar de la palabra "vello", que no tiene sentido alguno, la de "bebello," que creo es la verdadera.

(26) Es una verdad establecida, que tanto los aborígenes del mundo antiguo, como los del nuevo, celebraban sus grandes fiestas religiosas en la época de la siembra y de la cosecha. Entre los Chibchas, tribu que se hallaba á igual grado de cultura que la que describió Palacio, los Éspañoles habían ya tenido ocasion de observar una gran fiesta semejante en 1560. [Véase Piedrahita, I.4). Pero que en semejantes festividades se haga poco caso del pudor, se nota solamente eu muy pocos pueblos. De la manera mas chocante ocurre esto entre los Australenses. (V. Fr. Müller, Viaje de la Novara. Viena 1868, pág. 7.)

cero grado [27]; úsase en las bebidas generalmente, y gástase y cójese tanto, que parece que lo que sale á Nueva-España y dan y gastan en sus casas y labores, debe ser en solos cuatro lugares de los izalcos más de cincuenta mil cargas, que á su precio comun, valen quinientos mil pesos de oro de minas; yo los conté y repartí el tributo. Ocupan todos ellos con sus huertas dos leguas en cuadro, de que se infiere que no se sabe cómo tales leguas de árboles y huertas fructifiquen y den tanto valor. Cuentan estos naturales el cacao por contles [28], xiquipiles y cargas; un contle es cuatrocientas almendras, un xiquipil veinte contles, que son ocho mil almendras, y una carga tres xiquipiles, que son veinte y cuatro mil almendras. Por estos números cuentan todas las cosas, y es el mayor que entre ellos se halla.

Está el puerto de Acazutla, donde surgen y están los navíos, que andan al tracto del dicho cacao é mercaderías que vienen del Perú y Nueva-España. Tambien se ha querido decir que este puerto es bueno é suficiente para la correspondencia con el Perú, si V. M. fuese servido que la que ahora hay en tierra firme se pasase á esta provincia; está en altura de trece grados y treinta y seis minutos, é por la diferencia del meridiano de Sevilla al desta tierra y declinacion, se le da cuatro minutos, con que serán trece grados y cuarenta minutos (29). Córrese Este-Oeste, está desabrigado del Sur y sus colaterales, y la playa es de mucha resaca y tumbo.

Están situados los izalcos en la falda de un volcan, que siempre está humeando, y que segun todos afirman, se ha consumido y bajado de cincuenta años á esta parte más de

(27) La doctrina de Aristóteles de que cada cuerpo natural poseía cierto grado determinado de calor ó de frio, vemos que se habia conservado aun en tiempo de Palacio; y todavía hoy, en los pueblos romanos y en otros que se sirven aun de la filosofía escolástica, se tiene como una verdad evidente.

(28) Contle debería llevar una e porque Tzontli (cabeza ó cabellera) y centzontli significan 400. Esta palabra entra en la composicion de muchas otras en mexicano, como sucede en las lenguas europeas. Ipilli significa 20.

[29] La latitud geográfica del puerto de Acajutla, segun el mapa de Sonnenstern, corresponde á 14 36'. Por esta razon, si se considera la diferencia de meridiano con el de Sevilla, hay todavía que agregar 4', error que se comprende con facilidad si se tiene en cuenta, que en ese tiempo se usaba de la vara de Jacob para esta clase de cómputos. (Véase Peschel, Historia del Globo, pág. 349.)

veinte estados de altura; y algunos años ha arrojado y espelido de sí tanta ceniza, que ha cubierto la tierra muchas leguas al rededor y fecho gran daño en las huertas del cacao (30). Vierte á la parte del Sur, como á la más baja, mucha agua, alguna muy buena y otra malísima y hedionda, con la que forma un rio, que llaman de la Ceniza, por el mucho y gran hedor que lleva. Sale ansímismo del otro arroyo, de tan mala y viscosa agua, que en poco tiempo cubre y hace piedra cualquiera cosa que en él cae (31). Y aconteció, que habiéndosele caido á un indio un machete, al cabo de dos años se halló cubierto de más de un palmo de piedra por todas partes. Y fuera de la tierra destos izalcos, en un lugar que se llama Tecpa, sale del dicho volcan otro arroyo, de la mesma calidad; y dicen que en la provincia de Chiapa, hay un rio que hace lo mismo, y sacando unos indios piedra para hacer cal y quebrando una, hallaron dentro un fuste (*) de una silla gineta, sano y entero.

(*) Fuste, en la acepcion en que está tomado en el texto, quiere decir cada una de las dos piezas de madera, que tiene la silla del caballo.

[30] No es éste el volcan llamado hoy dia Isalco, que como se sabe apareció en el siglo pasado, y por consiguiente mucho tiempo despues de la visita de Palacio á este lugar; el actual es muy probable hiciera su aparicion por el año 1783, y alcanza hoy dia, á fuerza de erupciones, una altura de cerca de 4000 piés. El que menciona Palacio se encuentra hácia el N. del volcan de Santa Ana. (Véase lo que dice Cárlos von Seebach acerca del volcan Izalco. Sesion de la Real Sociedad Científica, 1-65. Tambien el Anuario de Mineralogía de Bronn y Leonhard 1869, pàg. 788.)

[31] Esta clase de fuentes no se considera hoy dia como curiosidad. Se ha determinado que la masa disuelta en agua, que aparece á la superficie, se compone de ácido carbónico disuelto en agua, del que se separa una parte tan pronto como la presion disminuye. Las fuentes de esta clase mas conocidas son la de Karlsbad y la de San Filippo en Toscana. (Véase la obra de Ch. Lyell, Principles of Geology. London, 1867. Vol. I. pág. 402.)

El más grandioso ejemplo de aglomeracion de guijarros es el de la fuente hirviendo llamada Te Tarata en Rotomahana, en Nueva Zelandia, de la que nos ha dado Hochstetter hace poco tan fiel descripcion en su viaje á esta isla acompañada de un hermoso grabado.

El lugar llamado Tecpa por Palacio, es el lugar marcado en el mapa con el nombre de Tecapa al pié del volcan de igual nombre.

Sobre el rio de Chiapas que posee la propiedad de incrustar las piedras, tenemos la relacion del viajero A. Morelet. [Voyage dans l' Amérique Centrale. Vol. I. p. 307]. Se llama éste, el rio San Pedro, afluente principal del Usumasinta. En el vecindario de Nojmactún se encuentran verdaderas rocas de cal, que impiden el curso del agua y que por esta razon se han levantado, esto es, los troncos que han caido al agua se han hecho presa é incrustados por el agua han formado rocas calcáreas.

Los dichos izalcos, van subiendo tres leguas, hasta un lugar que se llama Apaneca, tan fresco y aun frio, como que es el estremo de los lugares dichos. Cójense en él granadas, membrillos, manzanas y duraznos, trigo y las demas cosas que á estas partes han venido de esos vuestros reinos.

En el mesmo alto, una legua del antedicho, está otro que se llama Ataco, del mismo temple y fertilidad, muy abundante de toda montería y caza, por los muchos y buenos montes que para ella tienen. Tuve noticia que habia en él venados de la forma de los que hay en la India de Portugal, é hice matar algunos, en que se hallaron algunas piedras, que probadas en enfermedades pestilentes, hacen el mismo efecto que las que se traen de la dicha India (32). Hay tambien un género de osos pequeños, que no tienen la boca como los de esos reinos, sino que en el cabo del hocico tienen un agujero pequeño y redondo, y para mantenerse proveyólos naturaleza de una lengua larga y acanalada, con que chupan y sacan la miel do quiera que la hallan, y cuando esta les falta, se van á los hormigueros, donde tendiendo su lengua como caño y agujero de otra cosa, engañadas las hormigas, éntranse y se hartan dellas (33).

Hay asimismo muchas dantas (*) de color blanco (34), pardo y bermejo, y muchos otros géneros de anima

(*) Dantas, animales cuadrúpedos de la magnitud de un muleto, que se cria principalmente en la parte occidental de la América Meridional.

[32] Una especie de cabro muy parecido al llamado bezoar, por tener una concrecion en el estómago que lleva este nombre: no existe en Centro-América. Talvez sea ésta una especie pequeña de venado, el Cervus rufinus Puch., llamado por los naturales Cabro de Monte.

La piedra bezoar es una concrecion que se forma en el estómago de la cabra bezoar (Capra aegragus Gmel.), que no existe en la India Portuguesa, esto es, en la India propia ni en la de más allá del Gánges, sino en el Cáucaso, Táuride, en Persia y en tierra de los Kirguises y Tártaros.

[33] Al oso hormiguero de que aquí se habla (Myrmecophaga jubata L.) no le falta el hocico, como dice Palacio, pero sí los dientes, porque como es bien sabido, éste pertenece á la familia de los edentados, de la cual hay algunos que solo tienen algunas muelas; otros no tienen ninguna clase de dientes.

[34] El color del tapir, que en Centro-América lleva comunmente el nombre de danta, difiere segun la edad del animal. La piel de los cachorros tiene unas fajas de color oscuro, que más tarde desaparecen. Los diferentes colores que se observan cuando son de más edad, provienen del color de las aguas estancadas en que les gusta bañarse, y por esta razon unas fajas son de color rojizo y otras de color negruzco. El tapir centro-americano es el Elasmognathus Bairdii Gill., especie diferente de la sud-americana.

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