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ridad. No se puede negar, que la conducta de los gobiernos viejos y la de sus pueblos estan enteramente en abierta oposicion. Los pueblos han avanzado rapidamente hácia los conocimientos; y los gobiernos no.

Quiza, durante la carrera de Bonaparte, las "maquinas” (como los llamaba el Lord Londonderry) se quedaron aterradas, y se enmohecieron. Pero ahora no sucede como antes, y no se ve una dinastia opuesta á otra dinastia con el objeto de conservar una balanza de poder ya sea real ó imaginaria; no, ahora todas estan unidas en el esfuerzo comun, para impedir un movimiento indefinible é incomprehensible del pueblo. Se parecen á hombres que acaban de correr algún inminente peligro, y que se hallan desalentados,-jadeando, palpitando, y sobresaltados al ruido de tan solo una hoja; y quanto menos comprehenden la causa, tanto mas aterrados se hallan. La ciencia es la cosa de la que distan mas; y, de consiguiente, la ciencia es á la que temen, y á la que dirigen sus maldiciones. El continuar como estan, seria contra la naturaleza de la ciencia que tiene que obrar; y, como el resultado es contingente, no se puede prever con mucha certeza.

Sin embargo, confesamos que nada tememos en quanto á su resultado; porque, con la fuerza natural, con la elasticidad, y casi podemos añadir la inmortalidad del intelecto, ayudado por aquella invencion de las mas tremendas-la imprenta, ninguna combinacion de parte de la ignorancia, por muy profundo que sea su nombre, tenebrosa su estructura, ó atrevida en su marcha, podra volver á sepultar al pueblo, aun al de la nacion mas despotica y menos vengativa de Europa, en la barbarie. Sin embargo, quando la ciencia ve sembradas en los sitios elevados, aquellas malezas que desfiguraron antiguamente sus jardines, y que la consumio por sus raizes acidas y pestilenciosas, es regocijante contemplar la ereccion de nuevos y hermosos templos á la diosa, en una tierra en donde la libertad se pasea por muchos miles de millas.

Por lo que toca á ciertos puntos particulares para la colonizacion, la Guiana es seguramente el mas importante.

"Es dificil," dice Depons, "hallar un punto en todos los dominios Españoles tan favorecido de la naturaleza, y tan poco

apreciado como la Guiana. Su extension, que es de mil leguas en circunferencia, le da la importancia de un imperio. Su suelo, que no tiene otra falta sino una vegetacion demasiada activa, produciria mas articulos que producen ahora todas las otras posesiones Españolas. Los rios que recibe el Orinoco en un curso de 500 leguas, y cuyo numero excede trescientos, son otros tantos canales, que llevarian á Guiana todas las riquezas que ellos mismos podian haber contribuido á obtener de la tierra. El Orinoco, que le atraviesa, y que es de si mismo la abertura por la que un enemigo podia penetrar en las provincias de Varinas, Venezuela, y Sta. Fé, no puede defenderse sino por la Guiana, que tiene que ser, por necesidad, la protectora de las provincias que solo ella puede garantizar.”

Baxo estas impresiones, al hablar del antiguo gobierno, dice, "Apenas la soberanía Española haya sido reconocida y respetada, que sera necesario volver su atencion hácia emplear, de un modo mas util para el comercio, los brazos de los Indios que viven en el vicio, y que son nulidades perfectas baxo la direccion de los misioneros. Ya es tiempo que aquellos pretendidos exercicios de piedad, en los que pasan toda su vida, sean, en gran medida, cambiados por el trabaxo;-ya es tiempo que aquellos seres miserables, abandonados á una especie de vida mas propia para degradar que para reformar a la humanidad, comienzen la practica de las virtudes sociales;-ya es tiempo que cesen de ser automatos, y que se vuelvan en hombres;-en fin, ya es tiempo que la miseria de los Indios conquistados, que no puede menos de ahuyentar de la vida social al salvage, ceda su lugar á las comodidades y á la dicha. Este grande objeto puede cumplirse facilmente. No se necesita mas que quererlo. Los Indios son inmoderados, pero dociles; holgazanes, pero temerosos. Amenazas y buen tratamiento, empleados con juicio, pueden todo sobre caracteres semejantes. Que una vez el experimento sea hecho como debe serlo, y pronto se vera que su exîto excede la esperanza. Sin embargo, no es solo sobre esta poblacion que debemos contar para la prosperidad de la Guiana. Las Islas Canarias, cuyos habitantes, ya sea por el amor del cambio, ó ya por necesidad, han contraido el habito de emigrar en tropas á las diversas partes de la America Española,-las Islas Canarias pueden contribuir en mucho para poblar inmediatamente la Guiana, y pa

ra metamorfosar esta region, al presente desierta y sin cultivo, en un pays fertil, rico, y delicioso. Al gobierno le toca hacer aquellos reglamentos por los que estas gentes hallen una ventaja, que les induzca á proferir la Guiana á otra qualesquiera posesion Española, especialmente para la agricultura ó el comercio."

Estas observaciones, que citamos de otros como una prueba de nuestra imparcialidad, son bastante inteligibles como aplicables al antiguo Gobierno. El Gobierno de la Republica de Colombia esta dispuesto á hacer mucho mas. Sus agentes en este pays seran muy pronto autorizados para vender, á un precio muy baxo, qualesquiera cantidad de terreno á nuestros mas habiles agricultoristas y labradores. De este modo adquerira Colombia en poco tiempo el mas alto grado de prosperidad, confiriendolo sobre sus hijos adoptivos. De este modo podra el hombre, que por mucho que trabaxe en Inglaterra no puede obtener mas rango que el de criado, subir de una vez al de amo, y hechar los solidos fundamentos del caudal y felicidad de sus hijos.

Segun nos han informado parece que los Señores Herring, Graham, y Powles, de Londres, estan ahora en comunicacion con el Gobierno de Colombia, para organizar un sistema regular de emigracion, y que dentro de cierto tiempo, se debe esperar una intimacion publica del plan que se adoptara.

ALEXANDRO WALKER.

No 17. Westbourn Terrace,

Bayswater, London.

COLOMBIA.

CAPITULO I.

DESCRIPCION GENERAL DEL PAYS

SECCION I.

SU EXTENSION.

Los limites de Colombia son, al norte, la Provincia de Costa Rica y el Mar Caribe: al este, el Atlantico y la Guiana Holandesa al sud, la Guiana Portuguesa, el rio Marañon y el Peru; y al oeste, el Pacifico. De suerte que su extension es desde el 12o de latitud septentrional,-en su parte oriental hasta cerca del Equador, y en la occidental hasta cerca del 7o de latitud meridional.

La parte oriental de esta vasta region se llamaba antigüamente Venezuela ó Caracas; la occidental Nueva Granada ó Cundinamarca; y la del sud-oeste Quito. Todas estas provincias estan ahora unidas en la Republica de Colombia.

SECCION II.

MONTAÑAS Y VALLES.

AL describir estas grandes facciones del Pays, empezamos por su parte occidental, porque alli son mas notables. La Cordillera de los Andes atraviesa el pays del sud al norte.

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