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Si hechamos una mirada sobre los Andes, observaremos que su direccion es en linea paralela á la costa del Mar Pacifico, y su distancia á cosa de 150 millas, (ó 50 leguas). Estas montañas se pueden trazar facilmente desde el rio Atrato en el ismo de Panama, en el 8o de latitud septentrional, hasta el Cabo Pilares al sud, en la entrada occidental del Estrecho de Maguellanes, en 53o de latitud meridional, siendo una extension de 4200 millas.

En Colombia la elevacion mayor de los Andes es casi debaxo del equador: alli el cono del Chimborazo sube á la altura prodigiosa de 7147 varas sobre el nivel del mar.

Si consideramos primero la porcion de esta cadena que cae al norte, observaremos que los Andes disminuyen en elevacion insensiblemente hacia la Provincia de Darien, y casi se pierden enteramente al atravesar el ismo de Panama. Pero no bien han pasado el ismo que otra vez vuelven á tomar sus formas magestuosas, de este modo dividiendo lo que comunmente llaman el Norte de America, del Sud de America, entrando en la provincia de Veraguas.

En Cundinamarca, la principal cadena se separa en varios ramos, que corren en linea paralela, tres de los quales existen entre el 2o 30', y el 5o 15', de latitud septentrional.

El ramo oriental divide el rio llamado Magdalena, de los llanos de Meta: ninguna de sus cumbres se halla cubierta de nieve. El ramo centrico separa el rio Magdalena del rio Cauca: este es el mas alto de los tres, y los picos mas elevados entran en las eternas regiones del hielo. Los tres picos mas altos se llaman Quindiu, Baragan, y Guanacas. El ramo occidental separa el rio Cauca de la provincia de Choco: su altura apenas llega á 4500 pies, y casi se pierde en la provincia de Darien.

Estos tres ramos se vuelven á juntar en el districto de Pastos en Popayan, y continuan juntos hasta haber pasado el equador: entonces se vuelven á dividir en dos brazos paralelos, en la provincia de Quito, por un valle cerca de la cumbre. Aqui es donde el Chimborazo, el Pichincha, el Illinisa, el Antisana y el Cotopaxi muestran sus sublimes formas; ascendiendo hasta las

nubes, con sus nebados conos, y presentando un contraste sumamente hermoso con el azul obscuro del firmamento.

Otras dos cadenas se hallan en esta parte del Sud de America. La primera está al norte de Cundinamarca y de Caracas; la segunda se llama la Cordillera de los Raudales del Orinoco.

La primera cadena, ó Cordillera de Cundinamarca y Caracas, se inclina hacia el este del rio Atrato, formando la Sierra de Abibé y de Cauca, y los altos llanos de Tolu, y atraviesa el rio Magdalena. Despues forma una cadena muy estrecha, que corre lo largo de la costa hasta el Cabo de Vela, adonde se separa en dos ramos; pero despues se juntan otra vez y forman altas cumbres, que se extienden todo lo largo de Caracas, y las que van á perderse en el Atlantico, en el Cabo de Paria. Sus puntos mas altos se hallan en las provincias de Santa Marta y de Mérida. La altura de la Nevada, que está en la primera, es de 16,000 pies, y la de la segunda de 15,000: sus cabezas estan eternamente envueltas en nieve. Estas cadenas paralelas forman entre sus cumbres vastas llanuras que se levantan á una grande altura sobre el nivel del mar. La llanura de Caracas está á la altura de 2660 pies.

La mayor elevacion de esta cadena, despues de pasados los limites entre Cundinamarca y Caracas, se halla cerca de la capital del antiguo gobierno; donde la Silla de Caracas se levanta á la altura de 8420 pies, formando un enorme precipicio enfrente del Mar Caribe. Es cierto que la costa de Caracas, que se extiende á una distancia inmensa, presenta vistas de precipicios los mas tremendos que se hallan en el mundo. La cadena de los Andes, que atraviesa todo el territorio en la direccion de sus costas, se levanta mas, sin embargo, en su parte occidental, y se pierde en el mar enfrente de la Isla de la Trinidad, que tambien es muy montañosa.-La altura proporcional de la Cordillera de Caracas es de 4500 pies aunque en ciertos parages excede 8000: su anchura varía de diez a veinte leguas; y forma hermosos y espaciosos valles.

La segunda cadena de los Andes, llamada la Cordillera de los Raudales del Orinoco, se extiende desde la grande cadena al este entre el 3o y 6o de latitud septentrional: donde se forman

los altos llanos de Tuquillo y de Sn. Martin con los picos de Cavanami y de Umama. Esta cadena contiene los manantiales de los rios Guaviari, Meta, Zama, é Ymerida, y forma los tremendos raudales del Maypure y del Ature. Mas alla de estos raudades su elevacion es aun mayor y occupa un espacio inmenso, extendiendose al sud hacia los confines de los territorios Portugueses, donde se pierde en un terreno vasto y casi impenetrable, á causa de sus espesos bosques; terreno que ningun Europeo ha pisado jamas. Aqui es donde estan las fuentes del caudaloso Orinoco; pero ni los Españoles, ni ninguno de los Indios civilizados las han visto jamás. La cadena vuelve otra vez á aparecer al este que sale de entre montes. Alli, sin embargo, no es ni tan alta ni tan ancha; su nombre es la Sierra de Quineropaca y Pacaraimo, cerca del lago de Parimé y de las Amazonas. Su anchura vuelve á manifestarse á unos quantos grados al este, inclinandose al sud hacia Mao, donde la cuesta Ucucuamo, que dicen estar formada de mica amarilla y reluciente, y la que hizo creer á ciertos viageros que por fin ya habian encontrado una montaña de oro. Desde esta colina llamada el Dorado, el ramo se extiende al este hacia las montañas de la Guiana Francesa, donde su forma apenas se conoce, porque aquel pays está habitado por Caribes, y negros los que no dexan penetrar en el á ningun colono. Los rios de Berbice, Surinan, Marony y Esequibo, tienen en esta cadena sus manantiales.

La montaña de Duida es el punto mas alto que se ha visto hasta ahora en la Cordillera de los Raudales. Este volcano no ha sido aun visitado; pero se sabe que su altura es de 8465 pies sobre el nivel del mar. La Cordillera de los Raudales es notable por sus precipicios en su lado meridional.

Estas tres cadenas forman tres inmensas llanuras entre sus bases, abiertas hacia el este del Mar Atlantico, y cerradas hacia el oeste del Mar Pacifico por la gran cadena de los Andes.

La mas septentrional de estas llanuras es la del Orinoco, famosa por sus fertiles y crecidas plantas, y por su escasez de arboles. Estas grandes llanuras forman los confines de la Cordillera al sud; y lexos de tener aquellas tierras elevadas que caracterizan el sud del Nuevo Mundo, la naturaleza ha extendido el pays en savanas, conocidas por el nombre de los Llanos. En

estos ilanos innumerables greyes de toda especie de ganado pacen tranquilamente, guardados ya por los domesticos, ó ya por los mismos propietarios que residen en villas y aldeas.

SECCION III.

ASPECTO DEL PAYS.

HUMBOLDT hablando en general sobre esto dice,-Quando un viagero que acaba de llegar de Europa penetra por la primera vez en los bosques del Sud de America, la naturaleza se le presenta baxo un aspecto enteramente nuevo. Los objetos que le rodean le atraen á su memoria aquellas pinturas trazadas por escritores celebres que han examinado las orillas del Misisipi, en las Floridas, y otras de las regiones templadas del Nuevo Mundo; pero muy pronto percibe la diferencia. A cada paso que da observa que no está en los confines, mas en medio de la zona torrida; ni tampoco en una de las Islas de las Indias Occidentales, pero en un vastisimo continente, donde todo es agigantado -las montañas, los rios, y la masa de la vegetacion. Si la belleza de una escena pintoresca le conmueve, es imposible que pueda definir las varias emociones que ocupan su imaginacion, apenas puede distinguir lo que mas excita su admiracion,-si el profundo silencio de aquellas soledades, la belleza individual y contraste de las formas, ó si el vigor y frescura de la vida vegetal que caracteriza el clima de los tropicos. Casi se puede decir, que la tierra agobiada baxo el peso de las plantas, no les permite suficiente espacio para desenvolverse. Los troncos de los arboles estan enteramente ocultos baxo una espesa alfombra de verdura; y si el orchidoæ, el pipers, y el pathos, que tan solo un courbaril, ó higo Americano contiene, fuesen cuidadosamente trasplantados, bastarian para cubrir una inmensa extension de tierra. Por esta reunion singular, tanto los bosques, como los costados ya de las rocas ó de las montañas, enriquezen los dominios de la naturaleza organica. Estas mismas lianas, que serpentéan por la tierra, suben hasta la cima de los arboles, y pasando del uno al otro ascienden á la altura de mas de 100 pies.-Nos paseamos por algunas horas baxo estas umbrosas arcadas, que apenas ad

miten un rayo de luz, y baxo de las que el firmamento me se figuraba tan obscuro como el azul de añil, á causa del verde obscuro con que las plantas equinocciales estan teñidas, con una pequeña porcion de moreno. Un helecho muy diverso del polypodium arboreum de las Islas Occidentales aparecia sobre las masas de rocas esparcidas aqui y alli. En este parage vimos por la primera vez aquellos nidos en forma de botellas, ó de bolsillos, que se hallan sospendidos á las ramas de los arboles mas baxos, los que prueban quan admirable es la industria de los orioles, que mezclan sus gorgeos con los roncos chillidos de los papagayos y mackaos. Estos ultimos bien conocidos por su vistoso plumage vuelan en pares, mientras que los verdaderos papagayos van en centenas. Es preciso que un hombre haya vivido mucho tiempo en aquellos climas para poderse convencer que la voz de estos paxaros á veces ahoga el ruido de los torrentes que se precipitan de roca en roca.

Se observa, particularmente en Caracas, que las siete provincias, si se toma una vista general de ellas, forman tres distintas zonas, extendiendose del este al oeste.

Cerca de la costa se hallan tierras cultivadas, como tambien cerca de la cadena de las montañas de la costa: mas adentro se encuentran los llanos ó pastos; y finalmente mas alla del Orinoco, una tercera zona, la de bosque ó montes, en la que no se puede penetrar á no ser que sea por los rios que la atraviesan.-Si los habitantes naturales de los bosques viven enteramente del producto de la caza, como los del Misuri, podemos entonces decir, que las tres zonas, en el que el territorio de Caracas está dividido, presentan una imagen de los tres estados en la sociedad: la vida del salvage que vive en los bosques del Orinoco; la vida pastoral del que habita las savanas ó llanos; y la del agriculturista que reside en los valles altos y al pie de las montañas de la costa.

Los misioneros, y antes de la Revolucion, algunos quantos soldados, ocupaban tanto aqui como en toda la America los puestos avanzados hasta las fronteras del Brasil. En esta primera zona, se sentia mas la preponderancia de la fuerza y el abuso del poder, que era una consequencia necesaria de la otra. Los naturales se hacian la guerra intestina. Los frailes trataban de

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