ce formar parte de ella. 4-La plaza de la Pastora, con las ruinas que la rodean, y la iglesia, que devia haber sido completada para que sirviera de adorno, no presenta sino la melancolica pintura de monumentos abandonados á la voracidad del tiempo. 5La de Sn. Juan, que es espaciosa pero irregular, sin empedrado, y confinada al oeste por una fila de casucas mal construidas. Aqui es donde la milicia de á Caballo se exercita. Las casas de los particulares en Caracas son buenas, y estan bien construidas. En el interior hay muchas que tienen pisos, y de buena apariencia. Humboldt cree que son más altas que debian serlo en un pays sugeto á temblores de tierra. Algunas son de ladrillo, pero la mayor parte son de madera y de yeso, construidas casi al modo de los Romanos, y como aun hasta este mismo dia se practica para construir en terrenos cenagosos cerca del mar, &c. Construyen una especie de caxa sin asiento de tablas, de cinco pies de largo y tres de ancho, la que sirve de molde para el frente de la muralla que piensan erigir. El parage en donde se construye sirve de asiento á esta caxa, la que está soportada por andamios que levantan segun la figura y altura que dan á la pared. En esta forma ponen é introducen á cada mano una argamasa, que en el pays llaman tapia. De esta hay dos especies; la primera á la que dan el pomposo titulo de tapia real, compuesta de arena del rio y de cal. Con esta mezclan amenudo pedernales y chinillas. La segunda es de arena y de tierra, con muy poca cal. Por la combinacion de materiales se puede facilmente inferir qual de las dos durara mas. Sin embargo mediante el mortero adquieren una consistencia que resiste por mucho tiempo á la inclemencia del tiempo y á la injuria de los años. Estas casas, quando estan acabadas y blanqueadas, parecen tan bien como si estubiesen fabricadas de piedra silleria. Los tejados son piqudos, ó con dos alas. El trabaxo del carpintero está bien unido, es elegante, y de excelente madera, con la que el pays abundan. Los tejados de las casas estan cubiertos de tejas con cavas. Las casas de las gentes principales de la ciudad estan, por lo general, pulida y ricamente amobladas. En ellas se ven espejos muy hermosos; cortinas muy elegantes de damasco adornan las ventanas y el interior de las puertas; sillas y sofás de maderas finas, cuyos asientos cubiertos de badana ó de damasco, estan rellenados de cerda, y adornados con labores y bordados, pero atestados de dorados; camas con respaldos, en los que no se ve mas que oro: con sobervias colchas de damasco; y muchas almoadas llenas de pluma fina, y adornadas de encage. Es cierto que no hay mas que una cama en cada casa de esta magnificencia, que por lo general es el catre nupcial, la que despues no sirve mas que de cama de estado. El ojo se pasea tambien sobre mesas con pies dorados, comodas sobre las que el dorador ha consumido todo su arte: brillantes arañas sospendidas en las principales salas; molduras que parece han sido untadas en oro; y ricas alfombras que cubren la mayor parte de la sala, particularmente aquella donde estan los asientos principales; pues los muebles del antesala estan dispuestos de tal modo que el sofá, que es el mueble mas esencial de toda la casa, está en el medio de la sala, y las sillas á sus lados; la cama principal está á una de las extremidades en una alcoba cuya puerta está siempre abierta, y junto á los asientos principales. Esta especie de aposentos, estan siempre muy aseados y hermosamente adornados; pero vedados para la gente de la casa. Nunca se abren sino en honor de aquellos que vienen á llenar los deveres de la amistad, ó las ceremonias de la etiqueta. La ciudad de Caracas apenas posee algun otro edificio publico á no ser los que estan dedicados á la religion; á saber, ocho iglesias y cinco conventos. Sin embargo los quarteles estan construidos de un modo muy hermoso y elegante, y situados en un parage en que parecen muy bien. Tienen mas de un piso y dos patios. Dos mil hombres pueden ser comodamente aquartelados en ellos. No estan ocupados sino por las tropas de linea. La milicia tiene sus quarteles; es decir, una casa que les sirve de quartel, al lado opuesto de la ciudad. Caracas tiene un colegio fundado por el Obispo Antonio González de Acuña en 1778, y convertido en universidad en 1792. En esta universidad enseñan primero á leer y á escribir. Tres profesores enseñan suficiente Latin para leer el misal, Aristoteles, y la filosofia de Scotus, que hasta el año de 1808 prevalecia aun. Un profesor de medicina demuestra la anatomia, explica las leyes de la vida animal, el arte de curar, &c. sobre un esqueleto y con algunas preparaciones en cera. Si sucede que hasta ahora ningun reglamento ha sido hecho para la enseñanza de las artes y ciencias profanas, nadie dira que tal negligencia se haya extendido á lo que toca el estudio de la teologia y de los canones: cinco profesores se ocupan en enseñar esta ciencia. Uno de ellos, el mas sabio se supone, se ocupa en defender la doctrina de Sto. Tomas sobre la inmaculada concepción, contra todos los hereges; y no se puede obtener ningun diploma sin haber jurado primero en la sincera creencia de este venerado dogma. La universidad posee tambien un profesor que enseña el derecho Romano, el código Castellano, el de Indias, y todos los otros codigos. Un profesor de canto llano forma tambien parte de esta gerarquia de instruccion, el que enseña á los estudiantes en leyes y medicina, y á los de teologia á cantar en buena armonia los canticos del ritual Romano. Sin embargo el gobierno republicano ha introducido en los cursos de instruccion la filosofia de Locke y de Condillac; la filosofia natural de Bacon y de Newton, la quimica pneumatica, y las matematicas. El teatro contiene mil y quinientas, ó mil y ochocientas personas. Quando Humboldt estaba alli el patio no tenia techo. Veia al mismo tiempo los actores y las estrellas. Como el tiempo anublado le habia hecho perder muchas observaciones sobre los satelites de Jupiter, se iba a un palco del teatro desde donde podia muy bien discernir si el planeta seria o no seria visible aquella noche. Puesto que estamos hablando sobre las diversiones de Caracas, devemos hacer aqui mencion de los tres juegos de pelota, en donde juegan con la mano y con la manopla. Uno está situado á la extremidad meridional de la ciudad, cerca del rio La Guayra; el segundo, en la parte oriental, cerca del Catucho; el tercero, está también al este, á un quarto de legua de la ciudad. La poblacion de Caracas en 1800, segun se ve por el numero de nacimientos era de cerca de 40,000 almas; los habitantes mas instruidos creian que subia hasta 45,000, de los quales diez y ocho mil eran blancos, y 27,000 gente de color. Por las computaciones hechas en 1778 se supo que iban de 30,000 hasta 32.000. Todos los calculos directos se han quedado mas de la quarta parte mas abaxo del numero efectivo. En 1766 la poblacion de Caracas, y la del hermoso valle en el que la ciudad está situada, sufrio mucho por un ataque de viruelas. La mortandad que hubo en la ciudad subio a seis u ocho mil personas. Desde aquella epoca, la inoculacion se ha hecho general, y Humboldt la ha visto practicar sin la ayuda de medico. En la provincia de Cumana, donde la comunicacion con Europa era menos frequente, no habia habido aun ningun caso de viruelas por quince años; mientras que en Caracas aquella terrible enfermedad les tenia en un continuo temor, porque se mostraba siempre periodicamente, y en varios puntos al mismo tiempo. Decimos periodicamente, porque en la America equinoccial, donde las alteraciones del atmosfera y los fenomenos de la vida organica parecen estar sumamente sugetos á periodos, las viruelas antes de la benefica introduccion de la vacunacion, no exercia sus devastaciones, segun la opinion general, mas que cada quince ó veinte años.— Desde el regreso de Humboldt á Europa, la poblacion de Caracas ha continuado aumentando. Subia hasta 50,000 almas, quando por un temblor de tierra el 26 de marzo de 1812, doce mil habitantes perecieron baxo las ruinas de sus casas: en un solo instante se vio su numero reducido a 38.000. Y como si una enorme mina hubiese sido la causa de la destruccion de la ciudad, se ve la tierra amontonada hasta una tremenda altura donde doce mil almas fueron tragadas, ó perecieron entre las ruinas de sus casas. Los acontecimientos politicos que se han seguido á esta catastrofe, han reducido el numero de los habitantes á menos de 20,000; pero estas perdidas se repararan muy pronto, pues Caracas siendo el centro de un pays fertil y comerciante, y gozando de un buen gobierno y de la tranquilidad por necesidad tiene que florecer.* * Para una relacion mas circumstanciada de las Costumbres de Caracas, vease el Cap. III. Si la constitucion atmosferica del Valle de Caracas es favorable á las diferentes especies del cultivo sobre el que se funda la industria colonial, no lo es tanto para la salud de los habitantes, y estrangeros que vienen á residir en esta capital. La grande inconstancia del tiempo, y las frequentes supresiones de la transpiracion cutanea, dan nacimiento á catarros, que se revisten de todas las formas. Un Europeo, una vez acostumbrado á un calor violento, goza de mejor salud en Cumana, en el valle de Aragua, y en todos los sitios donde las regiones baxas de los trópicos no son tan humedas, como en Caracas, y en aquellas montañas-climas que ponderan como la morada de una perpetua primavera. Hablando de la fiebre amarilla en la Guayra, la opinion general es, que esta cruel enfermedad no se propaga mas de la costa de Caracas á la capital, que de la costa de Mexico á Xalapa. Esta opinion está fundada en una experiencia de los veinte años ultimos. Las enfermedades contagiosas que han exercido sus devastaciones en el puerto de la Guayra apenas se han hecho sentir en Caracas. No quisiera, dice Humboldt, perturbar la tranquilidad de que gozan los habitantes de la capital, por vanos temores; pero aun no estoy convencido que el mal Americano, que se localiza en la costa á medida que el puerto se halla mas freqüentado, no llegue tambien á ser comun en el valle, y particularmente si ciertas disposiciones del clima le favorecen: pues el temperamento medio de Caracas es bastante considerable para hacer que el termometro se tenga en los meses mas calientes entre veinte y dos y veinte y seis grados.* Si es indudable que el mal en la zona templada se comunica por contacto, ¿ podemos acaso estar seguros, que en un grado más alto de malignidad, no seria igualmente contagioso por contacto baxo la zona tórrida en lugares á quatro leguas de la costa, donde la predisposicion de los organos se halla favorecida por el temperamento del verano? La situacion de Xalapa, al declive de las montañas de Mexico, promete mayor seguridad, porque esta ciudad, menos poblada, se halla cinco veces mas distante del mar que Caracas, y 230 toisas mas alta, y su temperamento medio es de tres grados mas frio. En 1696 un Obispo de Caracas, Diego de Baños, dedicó una ermita á Sta. Rosalia de Palermo, por ha * Entre 17° y 20.8° R. |