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cido su ineficacia, y al que siga aconsejandola es preciso decirle, que quiere prolongar los males de la nacion, y la ruina del comercio.

"No se confunda la dignidad nacional, exaltada por los intereses de pocas personas, con una mania que ningun bien nos puede producir, y si mucho mal: la razon de estado y la conveniencia general reclaman medidas distintas de las adoptadas hasta ahora. Otros gobiernos, no menos celosos de su decoro e intereses, han cedido a la ley de la necesidad: la Inglaterra tubo que reconocer la independencia de sus colonias con muchos más medios que nosotros, y no por eso dejó de ocupar el alto puesto que tiene entre las grandes potencias: la misma España tubo que confirmarse con perder la Holanda, y Portugal, teniendo otra especie de poder que en el día, y estando en un mismo continente. Luego no será nuevo que la España de ahora haga lo que la España de entonces, y han hecho otras naciones, y no por eso han dejado de existir politicamente. Españoles, nuestra situacion actual requiere medidas tan extraordinarias como lo son nuestras necesidades: el bien de la patria exige reforma; pero no como la que hasta aqui se ha conocido con este nombre, sino reforma radical."

II. La siguiente es una traduccion de la Nota diplomatica presentada por el Sor. de Zea al Ministro Francés de Negocios Extrangeros, y a los Embaxadores, y Ministros Extrangeros en Paris.

"El infraescrito Enviado Extraordinario, y Ministro Plenipotenciario de la Republica de Colombia, para establecer relaciones politicas y comerciales con los Poderes Europeos, tiene el honor de dirigir, segun las ordenes de su Gobierno, la siguiente comunicación a su Excelencia el Ministro de Negocios Extrangeros:

"La noticia de la lucha que America acaba de mantener contra España, ha resonado por todo el mundo. Admitiendo que aun pueden existir dudas sobre sus detalles maravillosos, ninguna de estas puede ocurrir sobre los inmensos resultados obtenidos a fuerza de combates y de victorias. La America oprimida, esclava por tres siglos, ha por fin sacudido el yugo de la metropoli. España no posee ya nada mas alla de los mares que bañan la Peninsula.

"En una palabra, la America ha llegado ya a su mayoria; el aumento de su poblacion, los progresos del entendimiento, una infinidad de necesidades nuevas a las que España no podia proveer, hacia la crisis inevitable. La España, despoblada, sin marina, sin industria-¿podia haber acaso continuado reteniendo baxo sus leyes todo un continente, que está separado de ella por el vasto oceano? Esta independencia, pues, no ha hecho sino restablecer el orden natural, poniendo fin a aquellos males infinitos que necesariamente producia una conexion tan mal combinada.

"La España, expelida para siempre de las orillas Americanas, no tiene medios de volver. Dividida interiormente, destituida de influxo exterior; privada de las minas de Mexico y del Peru, ¿como obtendria soldados para expediciones tan distantes? ¿como podría soportar los gastos de los armamentos necesarios para reconquistar lo que ha perdido?

"Los puertos, las abras, las plazas fortificadas, estan en poder de los Americanos: todos los simbolos del poder supremo han desaparecido. Los leones y las torres de Castilla han sido remplazadas por las banderas de la independencia, y de la libertad. En estos vastos payses, que por tanto tiempo fueron el origen de la grandeza Española, y el teatro del dominio extrangero, no quedan ya mas que los huesos esparcidos de los guerreros que habian sido enviados a oponerse a nuestra felicidad. De todos los lados estados nacientes se levantan baxo las mismas bases, igualmente favorecidos de la naturaleza, poderosos en recursos, seguros de un venidero que no les puede engañar. Solo el clima les protegeria contra invasiones imprudentes, si el experimentado valor de sus habitantes no ofreciese la mejor de todas las garantias.

......

"Entre estos estados se levanta el de Colombia: doce años de una guerra implacable no han podido sujetarle, ni siquiera impedir su marcha. Colombia ha recogido el fruto de sus tareas es libre, soberana, é independiente. Pronto todos estos nuevos estados formarán una grande y solemne asociacion, y fixaran de un accorde comun la base de aquella firme confederacion, contra la que todos los ataques extrangeros serian mas absurdos que dañosos. La coalizacion del resto del mundo civilizado, si tal pudiese efectuarse, sucumbiria delante de esta barrera.

"De este modo la America habiendo llegado al punto en que queda asimilada en hecho y en derecho á todas las naciones existentes, deseando vivir en amistad con todo el mundo, no la falta mas que obtener el reconocimiento de la grande familia de que hace parte, y a la que su asociacion no puede menos de presentar muchas ventajas.

"Es con este objeto que el infraescrito Ministro Plenipotenciario de la Republica de Colombia, tiene el honor de comunicar a su Excelencia el Ministro de Negocios Extrangeros las intenciones de su Gobierno.

"La Republica de Colombia está establecida, y su Gobierno está en entera actividad. España no posee ya nada sobre su territorio; y un exercito de 60,000 hombres, soportado por otro exercito de reserva igualmente numeroso, mantienen la existencia de Colombia.

"La Republica tiene todos los caracteristicos de los Gobiernos reconocidos de la tierra; no pregunta a cada uno de ellos porque derecho, ó como se han hecho lo que son-existen: esto es todo lo que necesita saber. Colombia respeta quanto existe; tiene derecho a la reciprocidad: la pide; y esta demanda no va dictada por el interes ni por el miedo; tanto un motivo como el otro es indigno de una nacion libre y generosa.

"¿Quien podria atacarla? ¿quien podria aumentar ó disminuir su riqueza? ¿de quien tiene necesidad? ¿y entre las naciones conocidas, donde

está la que no aspira á establecer relaciones comerciales con ella? Colombia no ignora su fuerza. Si convida á todas las naciones á ir a participar de las riquezas que la naturaleza le ha prodigado, antes lo hace por un sentimiento de generosidad, que por un espiritu de calculo.

"Qualesquiera nacion que se acerque de Colombia con miras beneficas y apacibles, puede sacar con toda seguridad del origen comun de nuestras riquezas. Tal es la unica base de la relacion que deseamos establecer con todos los pueblos de la tierra-cordialidad, libertad, reciprocidad. Los zelos, las desconfianzas que antiguamente separaban las diferentes naciones, armando las unas contra las otras, estan desterradas de la legislacion como también del espiritu de nuestros conciudadanos. No haremos nunca traicion á los principios filantropicos por los que tanta sangre ha corrido en el campo de batalla, y sobre el patibulo.

"Pero despues de haber cumplido con todos sus deberes respecto á las otras naciones, Colombia tiene otros que cumplir hacia si misma, y son, que sus derechos sean igualmente reconocidos. Colombia no debe sus posesiones a nadie: se ha originado a si sola, y no cuenta mas que con sus propios medios de subsistencia. Independiente, libre, fuerte, é invulnerable, no obedece otro sentimiento sino el de una benevolencia universal; solo aspira á que sus relaciones con aquellos que quieran tratar con ella sean faciles, amistosas, y utiles.

'Un vasto y rico continente, habitado por gente civilizada, no puede quedar mucho tiempo olvidado del resto del mundo: sería siempre difícil formar relaciones permanentes y ventajosas, y tales que los intereses comerciales exigen, entre estados cuyos gobiernos no se reconocen reciprocamente.

"Estos principios nada equivocos, estas importantes consideraciones, imponen sobre el infraescrito la obligacion de comunicar a su Excelencia el Ministro de Negocios Extrangeros, las intenciones de su Gobierno, que son las siguientes:

"19, Que el Gobierno de Colombia reconoce á todos los Gobiernos existentes, qualesquiera que hayan sido su origen, ó su forma.

"20, Que no tendra comunicacion excepto con los Gobiernos que reconozcan á Colombia.

"30, Que se asegurara á los miembros de qualesquiera nacion que haya reconocido á Colombia, la proteccion y libertad de comerciar en sus puertos, y la de residir en el pays.

"49, Que los mismos puertos se cerraran, y no se abonaran privilegios, a los individuos de las naciones que no hayan reconocido a Colombia. "59 Que el retardo de admision en los puertos de Colombia, sera proporcionado al retardo del reconocimiento.

"69, Que se tomaran medidas para excluir los generos de los payses que rehusen o retarden reconocer á la Republica de Colombia.

"El infraescrito, al comunicar á su Excelencia los sentimientos y principios de su Gobierno, urge la necesidad de una pronta respuesta. Su Excelencia tiene demasiadas luces para no sentir los motivos de semejante demanda de la parte de un Gobierno, cuya capital esta á una distancia tan grande; y que estando ocupado en el mismo momento con su organizacion interna, y con la de sus relaciones extrangeras, no puede admitir de la dilacion ó minutiae diplomatica, de que antiguamente se acostumbraba, y de que se podria aprovechar en estas nuevas circunstancias, que por la misma razon de su novedad, es aun otro motivo para desear una pronta solucion, la que Colombia espera con igual confianza de las miras sabias del Gobierno de *, y de su propia fuerza.

"El infraescrito se aprovecha de esta ocasion para asegurar á su Excelencia el Ministro de Negocios Extrangeros de su mas alta consideracion. (Firmado) "E. A. ZEA".

"Paris, el 8 de Abril de 1822".

Ningun diario Ingles respetable hizo comentos impropios sobre la nota precedente. Esto se reservaba unicamente para los papeles Franceses. Pondremos ante el lector estas dos muestras de ridiculidad absurda, y nuestra replica á las mismas.

Sobre la circular del Señor Zea, el Drapeau Blanc del 19 de Abril contiene, entre otras, las siguientes observaciones:

"El autor de la circular," dice este papel, "comienza diciendo, que todo el universo habia oido de la grande lucha entre los Colombianos, y sus antiguos amos, los Españoles.

"Todo el universo!" dice el Drapeau Blanc, "eso es decir demasiado. Yo pregunte á mi lavandera en Boulogne, y á mi quesero en Viry, si habian oido de tal lucha, y confesaron humildemente que jamas habian oido hablar de la grande lucha que habia hecho temblar la tierra.

"En una palabra, es demasiado para Colombia amenazar al mundo entero de ser excluido de sus puertos si no reconoce su independencia; porque es probable que Colombia tenga mas necesidad del comercio del mundo, que el mundo necesidad de su comercio.

"Despues de haber dado nuestra opinion sobre la Nota del Sor Zea, declaramos que no confundimos con el diplomatico republicano, aquel ilustre sabio, aquel literato distinguido, en una palabra, aquel hombre tan digno de una estimacion universal por lo vasto de sus conocimientos, como por la amabilidad de su caracter, la suavidad de sus modales, y la brillantez de su ingenio. SALGUES."

Las siguientes fueron las observaciones que hicimos al momento de su publicación:—

El primer punto que en este trozo (que hemos aquí acortado mucho) merezca réplica alguna, es aquel en el que se asegura que la República amenaza al mundo, de que el mundo tiene mas necesidad de Colombia para el comercio, que Colombia del mundo. Ahora pues, ninguna amenaza hay en decir en nombre de la República, y eso á todo el mundo, lo que todo hombre libre dice quando piensa negociar con otro,-traficare contigo baxo la condicion de que ha de ser en terminos justos y reciprocos, de otra suerte no lo hago. Se entiende que todo comerciante dice esto al mundo entero; ¿pero quien es el que toma eso por amenaza, quando no es mas que establecer una regla, ó promulgar un principio? ¿Estaría bien decir al que notifica publicamente, que ciertos generos se venderan baxo ciertas condiciones, que es un mentecato por desafiar al mundo, y que maldita la necesidad tiene el mundo de él? Seguramente que el mundo puede subsistir sin el comercio de Colombia, ó de qualesquiera otro pays particular; ¿pero debe por eso Colombia, ú otro pays particular, franquear su comercio á los demas payses? Si este bello retazo de chanzas y graciosidades hubiese sido dirigido á los legitimos monarcas de Francia y España, que reconocieron é hizieron un tratado con los Americanos del Norte, quando apenas había comenzado la insurrección, quando las tropas Inglesas estaban poniendo el sitio á sus ciudades, y que los navios de Inglaterra bloqueaban sus puertos, quiza hubieramos podido hallar algo de sentido. Pero seria una retaliacion demasiado amarga atraer á la memoria las inauditas crueldades de los Españoles, quando invadieron un pays lexano, y cazaron sus inocentes habitantes con perros de presa; y seguramente que los Legitimos de España y de Francia no deben estar muy agradecidos a Monsieur Salgues, por las ironicas reprehensiones que su zelo le ha sugerido. Luis XVI. dio uno de los golpes mas tremendos á la legitimidad, asistiendo á los Americanos al principio de la revolucion; y, para hacerlo mas vergonzoso, sus miras no eran las de ayudar á hombres que se batian por su libertad, pero unicamente para perjudicar al legitimo monarca de Inglaterra. Todo esto M. Salgues nos ha traido á la memoria, con malicia ó con simpleza, no importa. Seriamente, la causa del muy legitimo rey de España, y la conducta de sus predecesores, no puede ganar mucho ya sea argumentando ó ridiculizando, pues de todos los modos recae siempre sobre ellos. Una de las historias que pinta una nacion con colores los mas negros, es la de la conquista de America. La empresa de borrar la mancha seria inutil. Es indelible, y todo el universo lo sabe, excepto quiza la lavandera, el quesero, y el erudito M. Salgues. Pero la verdadera explicacion de le saña de M. Salgues es esta:-Cree, como muchos de sus alucinados compatriotas, que Francia ha perdido su libertad baxo los Bourbones y las bayonetas Inglesas; y se resiente al ver que hay otras naciones que pretenden ser mas libres que la suya, pues eso es, en otras palabras, ser mas grande que Francia. A su vista amarillenta se le figura ver las alas del aguila Francesa cortadas para siempre,— hasta los mismos cañones arrancados,—agitarse en el polvo,-sus ojos ofuscados y hundidos,-y quando en ellos penetra un rayo de luz, que la hace ver seres libres y dichosos, que ella, en el tiempo de su poderío, hubiera podido facilmente destruir, lo unico que

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