Imágenes de páginas
PDF
EPUB
[ocr errors]

posicion que tuviese relacion con los asuntos comprendidos en aquella ley fundamental fuese admitida a discusion, sin que examirada préviamente por la comision que habia formado el proyecto, se viese que no era de modo alguno contraria á ninguno de «sus artículos aprobados.» Y como muchos diputados creian que la existencia del tribunal de la Inquisicion era incompatible con los artículos constitucionales, pedia que pasára el proyecto ó dictámen al exámen de la comision de Constitucion.

Al fin, despues de acalorados debates se procedió á votar la primera proposicion del vice-presidente, á saber, que se suspendiera por ahora la discusion de este asunto, y quedó aprobada Púsose despues á votacion si pasaria el dictámen à la comision de Constitucion conforme al acuerdo de la sesion de 13 de diciembre, y tambien se resolvió afirmativamente por mayoria (1). De este modo quedaron frustrados en la célebre sesion de aquel dia los trabajos y esfuerzos de los enemigos del sistema constitucional para reponer solemnemente al tribuna! del Santo Oficio en el ejercicio de sus antiguas funciones, hasta entonces más suspendidas de hecho que expresamente abolidas por ninguna ley, y tomaron tiempo los adversarios de la institucion para preparar su abolicion legal, que, como veremos, no tardó en ser decretada.

(1) Diario de las Sesiones de de mayo de 1812. Córtes, tomo XIII.-Sesion del 22

CAPÍTULO XX.

WELLINGTON.-LOS ARAPILES.

LOS ALIADOS EN MADRID.

1811.

(De junio a fin de diciembre.)

Desobediencia de los generales franceses al rey José.-Justas quejas del mayor general Jourdan sobre este punto.-Realízanse sus temores.--Levanta Wellington sus reales de Fuenteguinaldo.-Toma los fuertes de Salamanca.-Movimientos del ejército francés de Portugal: Marmont.-Célebre triunfo de los aliados en Arapiles.-Premio de las Córtes á Wellington: el Toison de oro.-Retirada de los franceses.-Marmont herido. - Clausel general en gefe.-Va José con ejército de Madrid à Castilla.-Llega tarde.-Regresa por Segovia á Madrid. Huye el ejército francés al Ebro.-José y los franceses evacuan la capital.-Entran en Madrid Wellington y los aliados.-Alegría y festejos en la poblacion.—Publícase la Constitucion de la monarquía.-Toman los aliados el Retiro.-Bando del general Alava.-Penosa retirada de José á Valencia.-Rinde el Empecinado la guarnicion de Guadalajara.-Recogen los frenceses las guarniciones de Castilla la Vieja. -Pierden la de Astorga.-Parte Wellington de Madrid á Búrgos.-Cerca y combate el castillo.-Brillante defensa de los franceses.-Levanta Wellington el sitio con pérdida, y se retira de Búrgos.-Fatal ocasion en que lo hizo: cuando las Córtes le acababan de nombrar Generalísimo de todos los ejércitos de España. - Re

siéntese el general Ballesteros de este nombramiento.-Es separado del mando de Andalucía.-Refónese el ejército francés de Portugai, y es reforzado.-Vuelve sobre Búrgos.-Persigue á Wellington y á los aliados.-Evoluciones de unos y otros en Castilla la Vieja.-Retirase Wellington á Salamar.ca.-Destruccion de puentes.-Síguele el francés.-Retrocede el general británico á Portugal.-Pasa el 6.° ejército español á Galicia.-Distribucion del ejército francés y regreso de José à Madrid.-Va Wellington á Cádiz.-Obsequios que recibe.-Se presenta en las Córtes.-Le dan asiento entre los diputados. Su discurso.-Contestacion del presidente.-Pasa Wellington à Lisboa.

Indicamos al final del penúltimo capítulo el pensamiento de lord Wellington de lanzarse con el ejército aliado sobre Castilla la Vieja, aprovechando la circunstancia de ver á Napoleon enredado ya en la guerra con Rusia, y mermado de una parte de sus mejores tropas el ejército francés de España. Bien penetraron ó previeron el proyecto del general británico, así el duque de Ragusa (Marmont) que inandaba el ejército francés de Portugal, como el rey José y el mayor general Jourdan, y con tiempo procuraron prevenirse para el golpe que por Castilla veian amenazar. Mas para esto necesitaban de la cooperacion y auxilio de los ejércitos de Andalucía, de Extremadura, y aun del Norte, y pronto comenzó á esperimentar el rey José en la conducta de sus generales cuán acostumbrados estaban á no obedecer sus órdenes, y cuán poco le servia el mando supremo de que últimamente le habia investido el emperador su herinano. El duque de Dalmacia singularmente, fuese re

sentimiento de no haber sido él nombrado mayor general, fuese hábito de mandar casi como soberano en Andalucía, es lo cierto que ó se negaba á toda combinacion que el rey le propusiera, ó le respondia proponiéndole otra contraria.

Así el mayor general Jourdan, escribiendo al ministro de la Guerra, se lamentaba diciendo: «El du«que de Ragusa anuncia de una manera positiva que lord Wellington va á tomar la ofeusiva sobre él; sin << embargo el duque de Dalmacia, que en este caso debia enviar al conde de Erlon en socorro del ejército «de Portugal, no ha hecho nada. El duque de la Albufera (Suchet), que debia dirigir una division sobre Madrid, se niega á ello; y el conde Cafarelli «pretende que no puede enviar hoy socorro alguno

[ocr errors]

sin exponer las provincias del Norte à un peligro in

«minente. Si pues Wellington marcha con todas sus «fuerzas reunidas, el ejército de Portugal tendrá que combatir solo. Es posible que el enemigo sea batido; pero si sucediera lo contrario, podria haber resulta dos muy fatales, y todo por no haber sido ejecutadas las órdenes del rey. Si estas órdenes hubieran sido cumplidas, el rey, reuniendo su guardia á las tropas del ejército del Mediodía y de Aragon, que se «<habrian aproximado al Tajo. hubiera ido sobre el flanco del ejército inglés con un cuerpo de 20 ó 25,000 hombres, lo que ciertamente habria asegurado un éxito brillante.......» «Estoy tan firmemen

a

[ocr errors]
[ocr errors]

te penetrado del peligro que corren los ejércitos, si «quedan así aislados, sin punto de apoyo en el cen

tro, que he creido deber hacer presente à V. E. mi opinion. Podrá no ser fundada, pero al menos mi conducta es dictada por el celo del servicio de «S. M. I. y por la gloria de sus armas. »

Realizáronse los temores del rey José y cumpliéronse las previsiones de su mayor general. El 13 de junio (1812) levantó Wellington sus reales de Fuenteguinaldo, y con el ejército aliado dividido en tres columnas, agregados á él don Cárlos de España y don Julian Sanchez, púsose á corta distancia de Salamanca, que evacuó Marmont, tomando la vuelta de Toro, dejando solo 800 hombres en tres conventos que habia fortificado, y que servian para vigilar el paso del Tórmes y su puente. Una division inglesa pasó el rio por un vado (17 de junio), y entró en la ciudad de Salamanca, cuyos habitantes la recibieron con la alegría y la agasajaron con el gusto de quienes llevaban tres años de vivir bajo la opresion de los franceses. Dió lugar Marmont con su retirada à que los aliados á hicieran venir de Almeida el tren de batir de que carecian, y cuando volvió á aparecer (20 de junio), ya aquellos habian comenzado á batir los fuertes, y no atreviéndose á atacar á los ingleses apoyados en la excelente posicion de San Cristóbal de la Cuesta, intentó atraerlos á otro campo de batalla maniobrando sobre el Tormes. Wellington se limitó á observar sus

« AnteriorContinuar »