bles. Por desgracia, en lo general, las naciones no acostumbran á respetarse mutuamente en otra razón que en la de la resisten cia que cada una puede oponer á las ideas de la otra. Es verdad que la decidida que opondrían nuestros pechos en cualquier caso no conocería dificultades ni riesgos, y, como otras veces, haría sensibles al que nos insultase los resultados de su atrevimiento; pero en tales casos, si los medios de defensa no están reunidos, si de repente se trata de formarlos, ¿dónde se enconcontrará, ni tiempo ni caudales para verificarlo? La Patria vence, no hay duda, porque prefiere su dignidad, su libertad y su gloria á los más duros y penosos sacrificios, y porque la sangre de sus hijos, corriendo con abundancia y en unión, aparta ó arrastra los inconvenientes; pero suele quedar vencedora, libre y arruinada. Poco útiles serían los Ejércitos si su organización y su ins trucción no fuesen proporcionadas á los progresos de las luces en la ciencia de la guerra, y serían perjudiciales si la severidad de la disciplina no los hiciese amados de sus conciudadanos y formidables al enemigo. Si el Ejército español (en otro tiempo el primero de la Europa) pudo decaer después algún tanto por causas demasiado conocidas, ahora, que las luces extienden con libertad su benéfica infiuencia, debe recuperar su antiguo esplendor. Los representantes de la Patria, que se proponen constituirlo de una manera digna de esta Nación valiente, acreditan que están penetrados de los principios sentados, y por lo mismo no necesito yo inculcarlos con mayor expresión. Me resta sólo pedir al Congreso que, en cuanto le permitan las diferentes y complicadas atenciones que van á ocuparlo, coloque esta entre las de mayor importancia, sin perderla de vista hasta su conclusión, seguro de que el Ejército en todas ocasiones se mostrará digno de sus desvelos. Madrid, 6 de Marzo de 1821.-Ignacio Balanzat. ÍNDICE PARTE PRIMERA OJEADA HISTÓRICA 18 21 La segunda legislatura. I. Los dos sistemas.-El triunfo liberal.-Sucesos del año 20.-- El divorcio de las potestades.- El Rey y los Ministros.-El respeto á la realeza.-La revolución española y la revolución francesa. La apertura de Cortes.- La coletilla del Rey.-— Indignación de los Ministros.-El Rey los exonera. - Revuelo popular.- La consulta á las Cortes.-Digna contestación.- El nuevo Ministerio.-Las informaciones ante las Cortes. Admirable labor parlamentaria.-Las representaciones.-In- fantilismo constitucional.-La ley de 17 de Abril.-Tremenda sanción penal.-Disposiciones contra el clero.-La extinción de los guardias de Corps.-Alteración de la moneda. -Otras disposiciones. - Cesantias á los Ministros.-El asesinato del cura Vinuesa.-Pánico del Rey.-Notable debate en las Cor- tes. La prórroga de sesiones.-El decreto de amnistia. --Los 18 21-22 II. El interregno parlamentario.-Recrudecimiento de las fac- Páginas. licia nacional.-Ley orgánica de la Armada Naval.-La mo- neda francesa.-Reformas crematisticas. -Creación de un resguardo maritimo.-El Reglamento de Beneficencia.-El Código penal.-Sucesos políticos.-Representación de Riego á las Cortes.-Disturbios en Madrid.-La rebelión en Sevi- lla y Cádiz.-El Mensaje del Rey á las Cortes.-Debate em- peñado. La respuesta abierta.-La respuesta cerrada.- Los ministros protestan.-Palabras imprudentes.-La en- mienda de Calatrava.-Grave situación de las provincias.- Los asuntos de América.-Proyecto de confederación hispa- noamericana. -Nuevos decretos. -La libertad de imprenta. Páginas. 1822 Las Cortes ordinarias. III. Riego, Presidente.-El partido demócrata.-Debate sobre las actas.-El nuevo Ministerio.-Oposición en las Cortes.- Labor parlamentaria.-Comparecencia de los Ministros.- Proposiciones sobre incompatibilidades.-El sable de Riego. Notable escena parlamentaria.-Honras à los héroes.-La insurrección realista. -Sucesos en Valencia.-Acusaciones contra los Ministros. - Palabras de Bertrán de Lis.-Mejoras en la Hacienda pública.-El Código penal. -Otros decretos. IV. Nuevo Ministerio.-Repugnancia del Rey. -Apuros eco- - Páginas. tos sediciosos.-El pánico del Rey.-Reposición del Ministe- 18 23 Las Cortes de Sevilla y Cádiz. V. Los nuevos Ministros.-Las amenazas de las Potencias.-- La traslación.-Incidente sobre la salud del Rey.-El viaje á Sevilla. Los franceses pasan la frontera.-Palabras de Ar- güelles.-Reformas en el Ministerio.-La capitulación de Madrid. La sesión del 11 de Junio.-«El delirio momentȧ- neo de S. M.»-La corte en Cádiz.--La Regencia de Valdés. El Tribunal de Cortes.-Angustiosas circunstancias. -Las Cortes extraordinarias.-La sesión secreta del 28.-El Rey sale de Cádiz.-El decreto de 1.o de Octubre.-Doblez del La legislatura extraordinaria. |