a perfecto estado de conservacion en que permanecen despues de m.. ita de e.eca

Mora de Orelo están ice famosos batos armes de las Callas,

malamente vocoumós, yet donde se rente a escola y aristoerática vetat. Tenen beroers silincs trazados por don Vera Rodri..tale per doc Pedro Menendez, onn todas las tomoddades echar para a lema.

Vera á Lanon & casa del padre de Canedo, descansamos en ella dia da, que va emp.samos en ordenar los apuntes que hablamos recoglo, de la que apenas hemos podilo usar una pequeña parte por falta de espacio, y tandonamos deft.livamente á Asturias, ese bellisimo pais que aluatere & la corte de lacayos y aguadores y que tan mal conocido y peor juzgado es por los cortesanos.

CAPITULO XXXIV.

Historia y descripcion de Galicia.

El antiguo y considerable reino de Galicia, ocupa la parte mas occidental de las provincias septentrionales de España. Su figura es semejante a la de un rombo, y linda por el Norte con el Océano cantábrico; por el Este con el principado de Asturias y reino de Leon; por el Sur con el reino de Portugal, y por el Oeste con el Océano Atlántico. Comprende 1,032 leguas cuadradas, habitadas por 1.471,982 almas. El clima es muy saludable aunque varía, como es natural en un territorio tan estenso; asi se observa que es muy templado y apacible en las costas; caliente, seco y agradable al Sudoeste; frio y húmedo al Norte. Las producciones de su terreno muy fértil, son muchas y variadas, pues tan pronto se encuentran dilatados viñedos, de donde se elabora un vino que (en algunos territorios), puede competir con el de Andalucía, como trigo, maiz, legumbres, lino, cáñamo, flores, naranjos, limoneros, moreras, castaños, olivos, y todas clase de sabrosas frutas. Es, pues, Galicia, una de las partes de España mas feraces, y en donde se esperimenta menos miseria, á pesar de la vulgar preocupacion que abrigan contra esa hermosísima provincia las personas ignorantes, y aun algunas de las que presumen de ilustradas, que la suponen la Siberia española.

La superficie de Galicia se halla alternativamente interrumpida con deliciosos y frondosos valles, y montes mas o menos considerables, de los que debemos mencionar los de Cervantes, Cebrero, Courel, Sierra de los Caballos, Segundera y Canda, que pueden considerarse de primer órden los de Agasalla, Cubeiro, Labio, Sierra de Naron, Sabiñao, San Mamed, La Quera, Baldriz, y las Galleiras de Araujo de segundo; y finalmente, el Cuadramon, Gistral, la Carba, la Loba, Coba de Serpe, Bocelo, Faro, Paramo, Suido, Bayo, Capelada, Pico Sacro, y otros que pueden clasificarse de ter

RECUERDOS.

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cero. Todas estas cordilleras son ramificaciones de los Pirineos cantábricos y asturianos, y están cubiertos de encinas, nogales, castaños, y otra multitud de árboles de construccion, yerbas y plantas medicinales. Habia en otro tiempo osos y asnos salvages; hoy solo se encuentran lobos, zorras, cabras, corzos, ciervos y jabalies. Tambien muchas aves de rapiña.

La costa tiene de estension no menos que 240 millas, desde la villa de Rivadeo, que señala el confin con Asturias, hasta la de la Guardia, que está enfrente de Portugal. Se encuentran en ella los cabos y puntas de` Burela, San Ciprian, Estaca de Bares, Ortegal, Monte Faro, Prioiro, Nariga, Roncudo, Tosto, Vilaño, Nave, Finisterre, Montelon, Corrubedo, San Vicente Lourido, Silleiro y Santa Tecla, y las rias de Rivadeo, Vivero, Bares, Santa Marta, Cedeira, Ferrol, Puentedeume, Sada, Coruña, Cormes, Camariñas, Corcubion, Muros, Carril, Marin, Vigo y Bayona, que ofrecen mas de cincuenta puertos cómodos, para abrigo de los buques.

Varias islas se ven tambien cercanas á la costa; de estas son las mas notables las de Bayona, al frente de su puerto, y que cierran la entrada de la hermosa ria de Vigo; las de Ons á la entrada de la de Pontevedra, la de Favora al principio de la ria de Aroza, y otra de este mismo nombre dentro de la ria, las Estelas entre Bayona y Vigo, la de San Simon dentro de la ria de Vigo, la de Tambre dentro de la ria de Pontevedra, las de Cortegada, Dionla, Sagra, Venza, y Rua en la de Aroza, la de Guebra en la ria de Noya, las Olveiras cerca de Corcubion, la de Sisarga entre Corme y la Coruña, la de San Vicente en la ria de Santa Marta, la Conejera y la Gubeira en las de Barres y Vivero, y las de San Ciprian al frente del puerto de su mismo nombre.

Los rios que bañan á Galicia son muchos y caudalosos; los de mas consideracion son: el Miño, que nace en la fuente Miñan, cerca del monasterio de Meira, cinco leguas de Lugo, el cual recibe las aguas de los rios Miñotelo, Bean, Anllo, Tamboga, Ladra, de bastante caudal, y que viene ya unido al rio Parga, Nasla, Ferreira, Ferreirua, Toldao y Asma por la derecha, y por la izquierda el Luaces, Lea, Botra, Chanca, Neira, Loyo, y Sabiñao. Unese despues al renombrado Sil, y aumenta su gran caudal con los rios Bubal, Barbantes, Avia, Tea, Loro, y Miñor, que se le reunen por su orilla derecha, y los de Loña, Barbaña, Arnoya, Valladares y Coura por la izquierda. Despues de bañar este rio las ciudades de Lugo, Orense y Tuy, y de dividir á España de Portugal por un espacio de catorce leguas, entra en el Océano cerca de la Guardia. El Sil aunque tiene su origen en las montañas de Leon, recorre una gran parte de Galicia, en cuyo reino entra por Valdeorras; recibe por su derecha los rios de Cua, Burbia, Selmo, San Vicente, Saldon, Quiroga y Cabe, y por la izquierda el Buera, Cabrera, Vibey

y Leboreiro. Despues de los referidos merecen nombrarse el Tambre, que nace cerca del monasterio de Sobrado, y desagua en el mar en Noya; el Ulla que tiene su origen en el lugar de Soengas, cerca de Puerto Marin, y despues de recibir las aguas del Tambre, Furelos, Arnego, Deza y Sar, entra en el Océano formando la ria de Aroza; el Limia que tiene su nacimiento en Codesedo, no lejos de Orense, forma el gran lago de Limia, recibe el rio Ginzo y otros pequeños, y entra en Portugal; el Eo, el Masma, el Oro, Vivero, Jubia, Eume, Caldelas, Aucen, etc. En todos se encuentra copiosísima pesca de anguilas, truchas, lampreas, salmones, reos, etc.

El terreno es muy abundante en delicada caza, y en él la industria de los habitantes hace propagar las mejores razas de toda clase de volatería, asnos, ovejas, cabras, cerdos, yeguas, mulas, y sobre todo bueyes, que

son los mas numerosos y mejores de España. En la cria de ganados se aventajan los gallegos á los habitantes de todas las otras provincias, proporcionando á aquellos escelentes pastos por medio de prados naturales y artificiales. En este reino abundan las aguas minerales, de las que son las mas notables, las frias de Camondes y de Bejo; las termales de Caldas de Reis, Caldas de Cuntis, Baude, Viana, Lugo, Orense, Bretun, Cortegada, Be

ran, Caitilas Artes & Carinys. Entre las innumerables formes mocables denes mennozare la de Cetret, que a pesar de su distanma del mar, y de talare en acima de un monte, tene fujo y redujo, y la de Loucane, unu ma al plante y explosa cuanto mayor es el calor. Tambien posee Ja da menas canteras de marmo. Llanes, jupe y otras piedras, vitriolo, azire, minas de cobre, hierro, estato, antimonio, y segun todos los geógrala antiqua y modemos muchas de oro y plata de las que se ha perdido

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Los caminos son en general muy malbos y deles, presentando tambien á los viageros el peligro de los salteadores, que abundan bastante en Galicia, por las muchas gargantas, encrucijadas y espesuras que en el terreno se encuentran á cada paso, y por la cercanía á Portugal, donde se ocultan los malhechores en cuanto perpetran un robo, burlando la persecucion de las tropas. Hay sin embargo, algunas hermosas carreteras construidas con el mayor lujo, tales son, la que desde la Coruña conduce por Santiago, el Padron y Pontevedra, á Tuy y Vigo, que atraviesa todo el reino, y la que va desde la Coruña á Lugo y Madrid.

El comercio de este reino es poco considerable, cual acontece generalmente en Espana; esporta, sin embargo, lienzos, ganados, pescados y carnes saladas, etc., para América, el estrangero y el interior, quedando aun muchísimos quintales de lana, y sus buenos vinos. La industria, si se exceptúa la agricola, no está tan desarrollada cual era de desear; cuenta, sin embargo, Galicia con muchas fábricas de tejidos de lana, sombreros, panos burdos, cristales, lienzos finos y ordinarios, curtidos, elaboracion de cobre y hierro, y salazon de carnes y pescados.

Los gallegos son laboriosos, constantes, honrados y valientes á toda prueba, lo que los constituye los mejores soldados que se conocen, sóbrios, sufridos, sérios, discretos é inclinados á la melancolía, pero afectos á la sociabilidad. Los vicios de que mas suelen adolecer, son la codicia, la venganza y los celos y la inclinacion á la bebida. La primitiva rudeza de los gallegos se modifica de dia en dia, y en las montañas se encuentran aquellas costumbres simples y puras de los pueblos pacíficos y hospitalarios. Son generalmente robustos, de elevada estatura, blancos, rubios y bien formados, y las mugeres se distinguen por su belleza. Lo mismo que sus vecinos los asturianos, con quien tienen muchos puntos de semejanza, abandonan en gran número sus hogares para ganar su vida en paises distantes. El idioma gallego, es el castellano antiguo, mezclado con algunas frases portuguesas y latinas, y pueden servir de muestra del que se habla hoy, los siguientes versos del muy erudito escritor Fr. Martin García Sarmiento, del órden de San Benito, que floreció á mediados del siglo pasado. El asunto