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hacia mercaba qualquier villa o castillo, o otra grande rentaque en sus Reynos se vendiese para acrecentar el patrimonio Real; era hombre que las mas cosas hacia por solo su arbitrio a placer de aquellos que tenia por privados, y como los apartamientos que los Reyes hacen, y la gran aficcion que sin justa causa muestran a unos mas que a otros, y la exesiba dádiva que les dan suelen provocar a odio, y del odio nacen malos pensamientos y peores obras; algunos Grandes de sus reynos a quien no comunicaba sus consejos ni la gobernacion de sus reynos y pensaban que de razon les devia ser comunicado concibieron tan dañado concepto que algunas veces conjuraron contra él para lo prender, o matar; pero como este Rey era piadoso bien asi Dios uso con él piedad, e le libró de la priseon è de los otros males que contra su Persona Real se imaginaron; y ciertamente se deve considerar que como quier que no sea ageno de los hombres tener aficion a unos mas que a otros pero especialmente los Reyes que estan en el miradero de todos, tanto menos licencia tienen de errar quanto mas señalados y mirados son que los otros, mayormente en las cosas de la justicia de la qual tambien deven usar mostrando su aficion templada al que lo mereciere como en todas las otras cosas; porque de mostrarse los Reyes aficionados sin templanza, y no a quién ni cómo ni por lo qué deven ser, nacen muchas veces las embidias de dó se siguen las desobediencias y vienen las guerras y otros inconvenientes, que a este Rey acaecieron. Era gran músico y tenia buena gracia en cantar y tañer y en hablas en cosas generales pero en las execucion de las particulares y necesarias algunas veces era flaco porque ocupaba su pensamiento en aquellos deleytes de que estaba acostumbrado los cuales impiden el oficio de la prudencia a cualquier que de ellos está ocupado, y ciertamente vemos algunos hombres hablar muy bien loando generalmente las virtudes y vituperando los vicios, pero quando se les ofrece caso particular que les toque, entonces vencidos del interese ó del deleyte no han lugar de permanecer en la virtud que loaron, ni resistir al vicio que vituperaron. Usaba asimismo de magnificencia en los recibimientos de los Grandes hombres y de los Embajado

res de Reyes que venian a él, haciéndoles grandes y sumptuosas fiestas, y dándoles grandes dones: otro si en hacer grandes edificios en los Alcázares y casas Reales y en Iglesias y lugares sagrados. Este Rey fundó de principio los Monasterios de la Virgen Santa Maria del Parral de Segobia y de San Gerónimo del Paso de Madrid que son de la Orden de San Gerónimo, y dotóles magnificamente; y otro si el Monasterio de San Antonio de Segobia de la Orden de San Francisco e hizo otros grandes edificios y reparos en otras muchas Iglesias y Monasterios de sus Reynos: dióles grandes limosnas e hizoles muchas mercedes.

Otro si mandaba pagar cada año en tierras y acostamientos gran número de gente de armas, y allende desto gastaba cada año en sueldo para la gente de á caballo continua que trahia en su guarda otra gran cantidad de dinero y con esto fue tan poderoso y su poder fue tan renombrado por el mundo que el Rey D. Fernando de Nápoles, le embió a suplicar le reciviera en su omenaje. Otro si la Ciudad de Barcelona, con todo el Principado de Cataluña le ofrecio de seponer en su señorio y de le dar los tributos devidos al Rey D. Juan su tio a quien por entonces aquel Principado estaba rebelde: por inducimientos y persuaciones de algunos que estaban cerca de él en su Consejo mas que procediendo de su voluntad tubo algunas diferencias con este. Rey de Aragon su tio que asimismo se intitulaba Rey de Navarra y entró por su persona poderosamente en el Reyno de Navarra y embió gran copia de gente de armas con sus Capitanes al Reyno de Aragon, e hizo guerra a los Aragoneses y Navarros e puédese bien creer esto segun su grande poder e la disposicion del tiempo e de la tierra e la flaqueza e poca resistencia que por entonces avia en la parte contraria. Si este Rey fuera tirano e inumano todos aquellos Reynos y Señorios fueran puestos a su obediencia, de ellos con pequeña fuerza, y de ellos de su voluntad, y para pacificar estas diferencias se trataron vistas entre él y el Rey D. Luis de Francia que como árbitro se interpuso a les pacificar; a las quales vistas fue acompañado de grandes señores y prelados y de gran multitud de caballeros y hijosdalgo de sus Reynos e los gastos que hizo e dádivas que dió y en los arreos

y otras cosas que fueron necesarias de se gastar y contribuir para tan grande acto mostró bien la franqueza de su corazon, y pareció la grandeza de sus reinos, y guardó la preeminencia de su Persona y la honrra y loable fama de sus súbditos. Fue la habla de estos dos Reyes entre la villa de Fuenterabia que es del reyno de Castilla y la Ciudad de Bayona que es del Reino de Francia en la ribera del mar. Continuó algunos tiempos guerra contra los moros, hizo algunas entradas con gran copia de gente en el reyno de Granada en su tiempo ganó á Gibraltar y Archidona, y otros algunos lugares de aquel reyno constriñendo a los moros que le diesen parias algunos años porque no les hiciese guerra: y los reyes comarcanos temian tanto su gran poder que ninguno osaba hacer el contrario de su voluntad, y todas las cosas le acarreaba la fortuna como el las queria, y algunas mucho mejor de lo que pensaba, como suele hacer a los bien afortunados y los de sus reynos todo aquel tiempo que estuvieron en su obediencia gozaban de paz y de los otros bienes que de ella se siguen. Fenecidos los diez años primeros de su señorio la fortuna embidiosa de los grandes estados mudó como suele la cara próspera, y comenzó á mostrarla adversa; de la qual mudanza muchos veo quejarse, y á mi ver sin causa, porque segun pienso allí hay mudanza de prosperidad, dó hay corrupcion de costumbres, y así por esto como porque se deve creer que Dios queriendo punir en esta vida alguna desobediencia que este Rey mostró al Rey su padre dió lugar que fuese desobedecido de los suyos; y permitió que algunos criados de los mas aceptos que este Rey tenia y a quien de pequeños hizo hombres grandes y dió Títulos y Dignidades y grandes patrimonios, quier lo hiciesen por conservar lo habido, quier por lo acrecentar y añadir mayores rentas a sus grandes rentas, erraron de la via que la razon les obligaba y no pudiendo refrenarla en la envidia concebida de otros que pensaban ocuparles el lugar que tenian, conocidas en este Rey algunas flaquezas nacidas del hávito que tenia hecho en los deleytes osaron desobedecerle y poner discnsion en su casa; la qual porque al principio no fue castigada segun devia creció entre ellos tanto que hizo descrecer el estado del Rey, y el te

mor y obediencia que los Grandes de sus reynos le habian; de donde se siguió que algunos de estos se juntaron con otros Prelados y Grandes Señores del reyno y tomaron al Principe D. Alonso su hermano mozo de once años y haciendo division en Castilla le alzaron por Rey de ella; y todos los grandes y caballeros y las ciudades y villas estuvieron divisas en dos partes, la una permaneció siempre con este Rey D. Enrrique, la otra estuvo con aquel Rey D. Alonso; el qual duró con título de Rey por espacio de tres años y murió en la edad de catorce años. En esta division se dispersó la cobdicia y creció la avaricia, cayó la justicia y señoreó la fuerza, reinó la rapiña y disolucion y la lujuria, y obo mayor lugar la cruel tentacion de la soberbia que la humilde persuacion de la obediencia; y las costumbres por la mayor parte fueron corrompidas y disolutas de tal manera que muchos olvidada la lealtad y amor que debian a su Rey y a su tierra y siguiendo sus interiores particulares dejaron caer el bien general de tal forma que el general y el particular perecia; y nuestro Señor que algunas veces permite males en las tierras generalmente para que cada uno sea punido particularmente segun la medida de su yerro, permitió que hubiese tantas guerras en todo el reyno que ninguno pueda decir ser eximido de los males que de ella se siguieron y especialmente aquellos que fueron causa de los principiar se vieron en tales peligros que quisieran dejar gran parte de lo que primero tenian con seguridad de lo que les quedase, y ser ya salidos de las alteraciones que a fin de acrecentar sus estados intentaron; y así pudieron saber con la verdadera experiencia lo que no les dejó conocer la ciega cobdicia y por cierto asi acaeció, que los hombres antes que sientan el mal futuro, no conocen el bien presente, pero cuando se ven envueltos en las necesidades peligrosas en que su desordenada cobdicia los mete; entonces querrian y no pueden hacer aquello que con menor daño pudieran haber echo.

Duraron estas guerras los diez años postreros que este Rey reynó, los hombres pacificos padecieron muchas fuerzas de los hombres nuevos que se levantaron y hizieron grandes destruciones y gastos en estos tiempos que el Rey todos sus thesoros, y

allende de aquellos, gastó y dió sin medida casi todas sus rentas de su patrimonio real, y muchas de ellas que les tomaron los tiranos, que en aquel tiempo eran de manera, que aquel que de la abundancia de los thesoros compraba villas y castillos, vino en tanta necesidad que vendió muchas veces las rentas de su patrimonio, todo para el mantenimiento de su persona; y vivió este Rey cincuenta años, de los cuales reinó veinte, y murió en el alcázar de la villa de Madrid de dolencia de la hijada de la cual en su vida fué muchas veces de ella gravemente apasionado. (Hasta aqui Hernando del Pulgar).

CAPITULO II.

De la division que hubo en Granada entre los moros.

Division hubo en Granada entre los moros sobre eligir Rey e fué en el tiempo de la prosperidad de este Rey D. Enrrique e fueron dos parcialidades, una queria a Cadiadiz, que era hijo de su Rey natural, e otra la mayor eligieron a uno de los Abencerrazes, e Cadiadiz e su hijo Muley Hacen, que ambos reinaron despues, se binieron huyendo en Castilla al Rey D. Enrrique con doscientos de a cavallo o mas, el cual le recivió y trujo consigo mas de un año en la corte; e les facía muchas honrras e daba tanta suelta a aquellas gentes, que mormuraron del Rey porque enojaban a los christianos por donde andaban.

El dicho Cadiadiz tenia mucha parte en Málaga, e en la sierra de Ronda e Casarabonela, e trató con el Rey D. Enrrique que le daria a Málaga, y que le diese fabor para reynar en Granada; el Rey D. Enrrique sacó muy gran hueste de gente, e fué sobre Málaga, e sabido en Granada mataron al Rey que habian alzado e embiaron secretamente a llamar a Cadahiz (1) que fuese a reynar sobre ellos; e llegando el real y a cerca de Málaga,

(1) Cadiadiz y Cadaiz se encuentra indistintamente en el manuscrito que sirve de texto para esta publicacion, y aun mayores variantes tendrán lugar de notar los lectores no solo en la ortografia sino en otros muchos nombres propios de personas y poblaciones. El rey de que aqui se trata parece ser Aben Ismael III segun la cronologia de Conde.

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