aunque le fué muy costoso darlo segun la estimacion y reverencia y precio que sabe que los Christianos tenian allá, y la gran devocion en aquel Santo hierro y en las otras Santas Reliquias que están en Constantinopla en poder de los Christianos Grecos y el Papa sabiendo que venian los Embajadores y trahian el Santo hierro, embiolo a recivir con dos Obispos a la Marca de Ancona, los cuales le trugeron de alli a Roma, e salió el Papa vestido de Pontifical con todos los Cardenales a lo recivir con grandes procesiones todos a pié, y el Papa se sentia mal, e iba en unas andas, y salieron por la puerta del Pópulo a recivirlo, y el Papa se apeó de las andas, e se humilló en tierra con muy grande acatamiento, e lo tomó en las manos en una caja de oro donde venia engastado en un viril Christalino de muy fermosa hechura y por todas partes se aparecia el propio hierro la punta acia arriba; e el Papa lo mostró al pueblo donde todos le adoraron como may Santa Reliquia que tocó en el costado de Nuestro Redemptor, e fué en tiempo de su pasion alli presente, e asi en las andas lo trujo el Papa fasta la Iglesia de San Pedro donde lo pusieron en muy honrado lugar, y el hierro era, segun parecia a todos los que le adoraron, y pudo ser que algun Gran Señor de los que han tenido aquellas Santas Reliquias en guarda, le quitase algo de lo que entró en el Santo Costado y glorioso para mas devocion, asi como hizo un Emperador de Grecia que hizo una barbada para el freno de su cavallo, en que gastó uno de los Clavos con que Nuestro Redemptor fué clavado en la Cruz, e sojuzgó, e ganó, muy grandes tierras, e reynos, e tubo que por virtud de aquel freno lo habia Dios hecho victorioso, segun cuenta Mosen Juan de Mandavilla, y el dicho fierro es de esta hechura y tamaño a lo que parece, la mitad de la Verdadera Cruz en que Nuestro Redemptor pareció; e era fasta entonces que fué embiado al Papa como he dicho el fierro de la Lanza con que el Caballero firió el Sagrado Costado de Nuestro Redemptor despues de haber espirado, e una de sus ropas sin costura, e la esponja, e el vaso en que le dieron a beber el hiel y vinagre cuando estaba en la Cruz, e una parte de la corona con que Nuestro Redemptor fué coronado en la Cruz

e uno de los clavos, e otras muchas reliquias, e eso mismo está en Constantinopla, e el cuerpo de la gloriosa Santa Ana Madre de Nuestra Señora Santa Maria, que lo fizo traer alli Santa Elena, e yace el Cuerpo de San Lucas e otros muchos Santos. Murió el Papa Inocencio Octavo desde a poco tiempo despues de haber recivido el Santo Fierro en el año de 1492 a 27 de Julio, e criaron Papa los Cardenales al Vice Chanciller Arzobispo de Valencia, el cual se llamó Alejandro Sesto, fuele muy contrario el Cardenal Ad vincula Sancti Petri, en la eleccion y aun despues en algunas cosas.

CAPÍTULO GIV.

Del fallecimiento de algunos Grandes é del Marqués Duque de Cádiz.

En el tiempo del Cerco de Granada murió en Castilla en su tierra e casa el noble Caballero D. Pedro Fernandez de Velasco, Conde de Haro, Condestable de Castilla. Sucediole el Sr. D. Bernardino su hijo; murió el Adelantado de Andalucia D. Fadrique viniendo del real de Granada, de su muerte natural, en el Campo cerca de Antequera en una tienda, alli le trugeron los Sacramentos, e dió su alma á Dios gimiendo sus pecados con muy gran contricion en 4 dias de Febrero año de 92, subcediole su hijo D. Francisco Enriquez.

Murió el Duque de Medina Sidonia D. Enrique Guzman en su villa de S. Lucar en sus palacios este dicho año de 1492 viernes noche, amaneció sábado de mañana finado á 20 dias del mes de Agosto, subcediole su fijo D. Juan de Guzman. Murió el esforzado Caballero Marqués Duque de Cádiz D. Rodrigo Ponce de Leon en la ciudad de Sevilla dentro de sus casas de achaque de una opilacion que se le hizo andando en la guerra con

tra los moros, recivió todos los Sacramentos é dejó por su subcesor á su nieto D. Rodrigo; este fué el Caballero que mas trabajó de los Grandes de Castilla en la guerra que desque de Alhama tomó: no ovo entrada que el Rey ficiese que no fuese en ella, en todos los diez años que duró la conquista del Reyno de Granada, él fizo el comienzo y vido el fin, á ovo su parte de la gloria é victoria, que él fué presente en la entrega de Granada, que fué el sello de la Conquista, y así mesmo fué honrado en la vida y amado de los esforzados, ansi fué muy honrado en la muerte, pasó de esta presente vida en lunes 27 de Agosto de 1492, dada la una, en presencia del Prior é del Vicario de San Gerónimo, que lo absolvieron con la Santa Cruzada é consolaron hasta la fin, la cual él era, é ovo muy buena é con mucho arrepentimiento de sus pecados, é fizo cristianos actos, é su testamento é firmolo ante Christobal Gutierrez é Francisco Sanchez Escribanos de Sevilla en presencia de todos los cuales estaban asi Caballeros como Dueñas. Desque ovo espirado luego el Sr. D. Luis Ponce é su padre D. Pedro Ponce Señor de Villagarcia é todos sus parientes é hermanos é criados é escuderos de casa se cubrieron de Xerga, y eran tantos, que no cabian en toda la casa, é alcanzó mucha honra en su fin que estubieron á su fallecimiento é enterramiento, y se cubrieron por él de luto el Sr. D. Alonso de Aguilar que era mucho su amigo y D. Pedro Puerto Carrero, hermano de la Señora Duquesa, Señor de Moguer, y el Sr. D. Luis Puerto Carrero Señor de Palma y otros muchos honrados Señores Fernan Darias Señor del Viso é Pedro de Vera, é D. Luis Mendez Portocarrero e Francisco Calaño é otros, todos estos se cubrieron de luto, que faltó Xerga, con el fallecimiento del Duque de Medina é pusiéronlo en un ataud aforrado en terciopelo negro, é una cruz blanca de damasco en presencia de los dos frayles vestido de una rica camisa é un jubon de brocado é un sayo de terciopelo negro é una marlota de brocado, fasta en piés é unas calzas de grana é unos borceguies negros é un cinto de hilo de oro, é su espada dorada ceñida segun él acostumbraba traher cuando era é andaba en las guerras de los moros, é ansi descendieron el ataud con él de la sala é lo

pusieron en unas andas enforradas de terciopelo negro á bajo en el cuerpo de la casa, donde los Ponces sus hermanos y parientes y la Duquesa su mujer y otras muchas Dueñas hicieron sobre él grandes lloros é sentimiento: eso mesmo ficieron sus escuderos é criados é otros é otras muchas de su tierra é tambien de la Ciudad que era muy bien quisto Caballero. Desque fué noche antes de Ave Maria vinieron mas de ochenta Clérigos con la Cruz de Santa Catalina é tres órdenes de Frayles del Cármen de la Merced é de S. Francisco, y encomendáronlo e sacáronlo en las andas, acompañándolo los Eclesiásticos, el Provisor é todos los demás honrados Canónigos de la Iglesia mayor é Arcedianos é dignidades é los Obispos que se hallaron en la ciudad. E de lo seglar el Conde de Cifuentes Asistente de Sevilla y la mayor parte del Regimiento de la Ciudad de Veinte y cuatros y Alcaldes mayores é otras gentes, que no cabian por todas las calles; llebaronlo por la calle de la Lóndiga é por S. Leandro faciendo por sus trechos sus paradas donde la Clerecía decia sus responsos é las gentes que seguian sus ploros y les ayudaban las Dueñas que salian á mirar desde sus puertas é ventanas á lo llorar, é daban tan grandes gritos las mujeres de la Ciudad por donde lo llebaban como si fuera padre, ó fijo, ó hermano de todos, é siguieronlo é acompañáronlo tantas gentes fasta S. Agustin, que no cabia por las calles ni por los adarves, ni en la Iglesia de S. Agustin é ansi iban las gentes acompañándolo y honrándolo como cuando facen la fiesta del Corpus Christi en Sevilla aunque era de noche; salieron con él desde su casa doscientas cuarenta hachas de cera encendidas que parecia por donde iban que era en mitad del dia: acompañáronle asimesmo desde casa hasta la sepultura diez vanderas que por sus fuerzas é guerras que fizo á los moros antes que el Rey D. Fernando comenzase la conquista de Granada les ganó, las cuales en testimonio alli iban cerca de él é las pusieron sobre su tumba, donde agora están sustentando la fama de este buen Caballero, la cual no puede morir é es inmortal, así como el ánima, é quedaron allí en memoria. Saliéronle á recivir los Frailes de S. Agustin con la Cruz é cirios é ocho incensarios bestidos de Almáticas negras

é asi lo metieron muy honradamente en la Iglesia e pusieron las andas en una muy alta cama donde estaba fasta que le digeron cuatro Vigilias cada Orden la suya; é otra la Clerecia; é dichas lo depositaron en su tumba cerca de los Condes D. Juan su Padre é D. Pedro Ponce su Abuelo, Ntro Señor le dé santa gloria: otro dia la digeron muchas misas.

El Rey e la Reyna desque supieron la muerte del Marqués Duque de Cádiz, se retrageron é encerraron é ovieron mucho sentimiento, é pusieron luto negro por él e las Damas lloraron mucho en casa del Rey que lo amaban mucho que las servia é daba mucho é lo conocian de como recivia é acompañaba á la Reyna y á ellas en tierra de moros porque llebándolo la Reyna é ellas cerca de sí, facian cuenta que llebaban al Cid Ruy Diaz en su tiempo; porque los moros le temian mucho, tanto que donde quiera que sabian que iba e conocian su bandera, no esperaban ni osaban pelear.

Dares y Homero, cronistas, escribieron muy por estenso en las historias las facciones de Hector, é Paris, é Troylo sus hermanos, é de los otros troyanos que fueron famosos en las armas, y eso mesmo los de Diomedes e Ulises é Menalas, é Agamenon é de Aquiles griego que fasta hoy viven por ser escritas aunque fueron gentiles y sin ley; pues cuanto mas debian ser escritas las cosas hazañosas é virtuosas, que los Nobles Caballeros de España facen y han fecho en las guerras e junto con ellos las facciones y condiciones de cada uno, e porque las de este Noble Caballero Duque de Cádiz merecen ser escritas son las siguientes.

Era hombre de buen cuerpo mas mediano que grande, de muy recios miembros brazos é piernas, muy gran caballero de la gineta, era blanco en el cuerpo é rojo en la cara y cavellos é pezcuezo é manos: era hermoso de gesto, la cara mas larga que angosta ni luenga, no habia en ella reprension, la habla é órgano de ella muy clara é muy buena, los cavellos rojos é crespos, é las barbas rojas; era muy esforzado é bravo é muy feroz á sus enemigos, é muy verdadero amigo de sus amigos; amaba mucho sus vasallos, é volvia por ellos cuando lo ha