GAPITULO GLXVII.

Como el Gran Capitan fizo saber al rey de España las cosas de Nápoles, e de como el rey proveyó socorro a Puerto Carrero e de la guerra.

El Gran Capitan juntó la gente en Barleta que es una ciudad en la Pulla, donde tenia los rostros a los enemigos, e las espaldas a la mar por donde podia ser socorrido asi de gente como de mantenimientos entró en Barleta 40 de Junio de 1502 e estuvo en ella cerca de dos meses.

De como los Franceses eomenzaron la guerra.

A 15 dias de Agosto de dicho año comenzaron los Franceses a romper la capitulacion que fueron acercar a Canosa un Lugar donde está por Capitan de Peones Pedro Navarro con otros dos capitanes con fasta 600 hombres, e el ejército de los Franceses de mucha gente de a pié e de a caballo, e mucha Artilleria lo cercó alli, e le dieron fasta catorce combates, e les derrivaron con la Artilleria la mitad de la muralla e nunca les pudieron entrar, e mataron los cercados de los cercadores mas de mil hombres con los combates sin perder quince hombres de los suyos; e el Gran Capitan envió a decir a Pedro Navarro que asi por la Villa ser flaca, como por no tener el aparejo para le socorrer por estar todo el exército de Francia alli junto sobre

el, que no se hiciese fuerte, e no se pudiese tener, que ficiese el mejor partido que pudiese, e que si algunos dias se pudiese tener, que él le socorreria aunque mucho peligro le fuese. E el dicho Pedro Navarro no tenia gana de facer partido sino tenerse fasta ser socorrido. E uno de los dos Capitanes secretamente trataba partido por el peligro que esperaban, e ansi que cuando supo esto Pedro Navarro, e vió que no fallaba' medio de se poder defender, acordó de facer el mas honrado partido que ninguno jamás fizo, en esta manera: Que le dexasen salir al dicho Pedro Navarro e a los otros dos Capitanes con toda su gente armados por medio de su real con sus banderas tendidas, e con sus tambores, e trompetas tañendo e diciendo Espana, España; e que dejasen salir todos los del Lugar que con él quisiesen ir con toda la facienda que quisiesen llevar; e que los que quedasen no les fuese fecho enojo ninguno, e asi salieron e fué fecho, e se fueron camino de Barleta e los salió a recibir el Gran Capitan mas de una Milla del Lugar, e abrazó c besó en el rostro e Pedro Navarro, e les dixo muchas palabras · de honra e amor.

Despues de esto a 28 dias del mes de Agosto del dicho año de 1502, pasó toda la Hueste de los Franceses por delante dé la Puerta de Barleta, e salieron a ellos algunos Ginetes e lancearon en la zaga a algunos de ellos, e fueron a sentar su real en las faldas de las Viñas de la ciudad de cabo de un rio que llaman Lefanto, e estuvieron alli tres dias, e iban a comer ubas de las Viñas, e salieron por mandado del Gran Capitan D. Pedro de Acuña, e Pedro At de Mecina e Mosen Peñalosa con cierta gente e atajaron fasta 200 Suizos, de los cuales no escapó ninguno e estonce los Franceses alzaron su real e fuéronse a poner por aposentos por los Lugares que habia por alli e dende pocos dias se partió Mr. de Overni para Calabria.

CAPITULO OLXIX.

De don Diego de Mendoza.

A 19 de Henero de 1503 años Vispera de San Sebastian fué el Comendador Mendoza por el dinero que restó del resgate, segun es dicho atrás con quince de caballo, e acordaron los franceses de lo poner una celada en el camino de 55 de caballo para que le tomasen el dinero, e lo prendiesén e tomasen, e fué de ello avisado el Gran Capitan, e proveyó que D. Diego de Mendoza saliese con ciertos ginetes e hombres de armas, a se poner en una sobre zelada, e como los Franceses ya estaban envueltos con el dicho Comendador, llegó el dicho D. Diego de Mendoza con la gente que llevaba, e de los 55 Franceses mataron los cincuenta, e los cinco fueron feridos e se acogieron a uña de caballo, e no se pudo sofrir el Gran Capitan, e fué a ver como se hacia con siete de caballo e fué a tiempo que tambien fizo su parte.

CAPITULO GLXX.

De Castellaneta e de lo que ahi acaeció.

A 12 de Henero de 1503 acaeció que en Castellaneta estaban aposentados cien lanzas Francesas, e sobre una bota de vi-,

no los Franceses mataron un Clérigo de Misa, e de despecho de esto los del Lugarón enviaron a llamar a Pedro Navarro, e a Luis de Herrera, que estaban seis millas de alli, e que ellos le abririan las Puertas, e vinieron, e entraron en el Lugar, e fueron sentidos, e los Franceses se quisieron defender, e los españoles mataron a cuarenta de ellos, e prendieron sesenta, e ovieron todo el despojo, e vino sobre ellos el Duque de Nemos con mucha gente, e convatiéronlos, e los castellanos les mataron cincuenta hombres, e desque vido esto, volviose que no fizo nada.

CAPITULO GLXXI,

Del desafio de los italianos e franceses.

A 13 de Febrero del dicho año de 1505 se desafiaron 15 Franceses con 13 Napolitanos, e fué concierto que de los que estos fuesen vencidos e rendidos, e echados del campo, perdiesen por cada uno cien ducados, e las armas e el caballo; fueron vencidos todos trece franceses, e echados del campo e pagaron el precio, e los Italianos fueron vencedores, e fué de ellos Capitan Jacobo Torre Fieremosta. Fizoles el Capitan mucha honra, e dioles para salir al desafio a cada uno un sayo de Raso la mitad morado, e la mitad blanco para sobre las armas.

GAPITULO CLXXII.

De lo que fizo el comendador Solis.

En estos mesmos dias fué elComendador Solis a Councia que

tenian cercada la Fortaleza a los Principes, e estaban con la ciudad aposentados, e entró de noche el dicho Comendador con fasta cincuenta de caballo, e púsose en la Plaza diciendo: España, España, e mató mas de treinta de ellos, e prendió mas de sesenta, e toda la otra gente se descolgaron por la Muralla abajo; tras esto salió D. Diego de Mendoza con cien hombres de armas e cien ginetes, e se pusieron en una celada para la gente que salia de Visella a facer el hervaje, e corrieron el campo, e lancearon los que alcanzaron, e atajaron una ordenanza de setenta suizos bien armados, los cuales se metieron en una Torre e llegó alli D. Diego a requerir que se dieran, e no se fuerou en tal consejo e convatiéronlos, e tomáronlos, e despeñaronlos a todos, salvo uno, que enviaron con la nueva con dos cuchilladas por la cara,

CAPITULO CLXXIII.

De Lescano.

A 20 de febrero del dicho año fué Lescano el Capitan en busca de las cuatro Galeras del Pen. Joan con su armada, e la socorrió, e metió en el Puerto de Tranto que es de Venecianos, e prendió a algunos porque toda la gente huyó e libró de cautiverio a muchos Españoles que andaban herrojados; las cuales Galeras facian mucho daño porque corrian toda la costa, e quitaban todos los mantenimientos que iban al real de los Españoles, e tomó las dichas Galeras el dicho Lescano, e sino fuera por no quebrar con los Venecianos, no escapara hombre de los que en ellas andaban.