Historia de la literatura colonial de Chile, Volumen1

Portada
Impr. y liberia del Mercurio, 1878
 

Páginas seleccionadas

Otras ediciones - Ver todas

Términos y frases comunes

Pasajes populares

Página 27 - Que esta flaca persona atormentada de golpes de fortuna, no procura sino el agudo filo de una espada, pues no la acaba tanta desventura: aquella vida es bien afortunada, que la temprana muerte la asegura; pero a nuestro bien público atendiendo, quiero decir en esto lo que entiendo.
Página 152 - Al recibirle forma aquel ruido Que el árbol sacudiéndole la hoja; El cuerpo en un instante se remoja, Y esgrime el brazo y músculo fornido, Supliendo con el arte y su destreza El peso que le dio naturaleza.
Página 26 - Teniendo tan a golpe a los cristianos volvéis contra vosotros el cuchillo? Si gana de morir os ha movido, no sea en tan bajo estado y abatido. Volved las armas y ánimo furioso a los pechos de aquellos que os han puesto en dura...
Página 32 - ¿No hubiera alguna espada aquí de cuantas contra mí se arrancaron a porfía, que usada a nuestras míseras gargantas cercenara de un golpe aquesta mía? Que aunque ensaye su fuerza en mí de tantas maneras la fortuna en este día, acabar no podrá que bruta mano toque al gran general Caupolicano".
Página 111 - Y pues del fin y término postrero No puede andar muy lejos ya mi nave, Y el temido y dudoso paradero El más sabio piloto no le sabe...
Página 30 - Hecha la confesión, como lo escribo, con más rigor y priesa que advertencia, luego a empalar y asaetearle vivo fue condenado en pública sentencia. No la muerte y el término excesivo causó en su gran semblante diferencia, que nunca por mudanzas vez alguna pudo mudarle el rostro la fortuna. Pero mudóle Dios en un momento, obrando en él su poderosa mano, pues con lumbre de fe y conocimiento se quiso baptizar y ser cristiano...
Página 27 - En la virtud de vuestro brazo espero Que puede en breve tiempo remediarse, Mas ha de haber un capitán primero Que todos por él quieran gobernarse: ^ Este será quien más un gran madero Sustentare en el hombro sin pararse; Y pues que sois iguales en la suerte, Procure cada cual de ser más fuerte".
Página 31 - Donde con el esfuerzo acostumbrado, Sin mudanza y señal de sentimiento, Por la escala subió tan desenvuelto Como si de prisiones fuera suelto. Puesto ya en lo...
Página cxxxi - Pisada en esta tierra no han pisado que no haya por mis pies sido medida; golpe ni cuchillada no se ha dado, que no diga de quién es la herida; de las pocas que di estoy disculpado, pues tanto por mirar embebecida truje la mente en esto y ocupada, que se olvidaba el brazo de la espada.

Información bibliográfica