Poesías de D. Luis de Gongora y Argoteen la Imprenta Nacional, 1820 - 179 páginas |
Otras ediciones - Ver todas
Términos y frases comunes
Abrenuncio adarga Aforraban agenas amante amor Apolo aquestos arena armada aurora Belerma bella Betis blanca buena BURLESCA Busque cabello CANCION canto Chipre ciego cielo Conde Conde de Villamediana Coridon corona corte cristal cuello dama Dejadme dejó despues dice dichoso digan &c doncella Doña dorada dulce Duque de Lerma engaña envidia escuchar Esgueva espada España fiero flaco Flandes flechas flores fuego galan gallarda gentil gloria guarde halla higas honra huyen lambica Lengua muerta Lisonja llanto llora Loquillas luciente LUIS DE GONGORA madre mano memoria Milagros &c Mirad moro mozo mozuelo muerte muger mula mundo murmuran necio negros nieve ninfa niña noche ojos palmilla paños pecho perdon perlas pisa Pisuerga plata plumas Polifemo quiero rayos ríase la gente rico rocin ROMANCE rubio Soledades SONETO suspiros tambien tenga tenia tierno trenzas Válgame ventura verde vestido vieja viento vista Vitoria viuda vuela zelos ΕΙ
Pasajes populares
Página 3 - ... goza cuello, cabello, labio y frente, antes que lo que fue en tu edad dorada oro, lilio, clavel, cristal luciente, no sólo en plata o viola troncada se vuelva, mas tú y ello juntamente en tierra, en humo, en polvo, en sombra, en nada.
Página 104 - No me aprovecharon, madre, las hierbas"; y yo de papel haré una librea teñida con moras porque bien parezca, y una caperuza con muchas almenas; pondré por penacho las dos plumas negras del rabo del gallo, que acullá en la huerta anaranjeamos las Carnestolendas...
Página 66 - Del cuello pendiente ella, viéndole tomar la espada, con lágrimas y suspiros le dice aquestas palabras: — Salid al campo, señor, bañen mis ojos la cama; que ella me será también sin vos, campo de batalla.
Página 66 - Bien podéis salir desnudo, pues mi llanto no os ablanda; que tenéis de acero el pecho, y no habéis menester armas." Viendo el español brioso cuánto le detiene y habla, le dice así: "Mi señora, tan dulce como enojada, "porque con honra y Amor yo me quede, cumpla y vaya, vaya a los moros el cuerpo, y quede con vos el alma. "Concededme, dueño mío, licencia para que salga al rebato en vuestro nombre, y en vuestro nombre combata.
Página 5 - Raya, dorado Sol, orna y colora del alto monte la lozana cumbre, sigue con agradable mansedumbre el rojo paso de la blanca...
Página 23 - Mayo • y al cielo las estrellas rayo á rayo. Injuria es de las gentes que de una tortolilla Amor tenga mancilla, y que de un tierno amante escuche sordo el ruego y mire el daño ciego Al fin es dios alado y plumas no son malas para lisonjear á un dios con alas.
Página 14 - ROSA Ayer naciste, y morirás mañana. ¿Para tan breve ser, quién te dio vida? ¿para vivir tan poco estás lucida, y para no ser nada estás lozana?
Página 2 - Júpiter ministra el garzón de Ida, amantes, no toquéis si queréis vida, porque entre un labio y otro colorado amor está de su veneno armado cual entre flor y flor sierpe escondida. No os engañen las rosas que a la aurora diréis que, aljofaradas y olorosas, se le cayeron del purpúreo seno; manzanas son de Tántalo y no rosas, que después huyen del que incitan ahora y sólo del amor queda el veneno.
Página 64 - Las flores del romero, niña Isabel, hoy son flores azules, mañana serán miel. Celosa estás, la niña, celosa estás de aquel dichoso, pues lo buscas; ciego, pues no te ve; ingrato, pues te enoja, y confiado, pues no se disculpa hoy de lo que hizo ayer. Enjuguen esperanzas lo que lloras por él ; que celos entre aquellos que se han querido bien, hoy son flores azules, mañana...
Página 6 - Rey de los otros, río caudaloso, que en fama claro, en ondas cristalino, tosca guirnalda de robusto pino ciñe tu frente y tu cabello undoso. Pues dejando tu nido cavernoso de Segura en el monte más vecino por el suelo andaluz tu real camino tuerces soberbio, raudo y espumoso. A mí, que de tus fértiles orillas piso, aunque ilustremente enamorado, tu noble arena con humilde planta, dime si entre las rubias pastorcillas...