Revista de la biblioteca, archivo y museo [de Madrid], Volumen1

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Ayuntamiento de Madrid., 1924

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Página 479 - En esta fuente , cuya márgen pisa . . Tal vez con breve estampa el pie de nieve, En la del agua retrató su risa Y con sus rosas su hermosura bebe: Tuviera el valle nueva flor Narcisa, Pues á mirarse Filida se atreve, Pero turbó el cristal llorando enojos El claro aljofar de sus verdes ojos.
Página 471 - Con cuya muger bailaba, Requebrándola en su ausencia. Esto acechaba el villano, Y al abrazarme con ella , Sobre el bonete me daba Seis palos en la cabeza. Crecí con los buenos años, Y como ya por la puerta Del retablo no cabia, Dejé el retablo por fuerza.
Página 480 - Y en el papel de .un álamo escribieron Para memoria de aquel triste dia, Ninfas de Manzanares , y Pastores, Ya no hay Amor, que aquí murió de amores.
Página 479 - No pudiendo Lisardo resistirse A tanto amor, y por ventura amado, Con dulces ansias intentó morirse...
Página 480 - Oyó las quejas la serrana hermosa, y llegando al lugar, a donde estaba, al frió labio le aplicó la rosa, que los divinos suyos animaba : y fue aquella virtud tan poderosa, que le dio vida al tiempo que espiraba; y desde entonces Nymphas y pastores a desmayos de amor aplican flores...
Página 224 - Cambronero, fina y esbelta dama, con dotes de poetisa y «ojos árabes», a la que dedicó una poesía laudatoria y apasionada, de la que son estos versos: ¿No te bastan los rayos de tus ojos, De tu mejilla la purpúrea rosa, La planta breve, la cintura airosa, Ni el dulce encanto de tus labios rojos?...
Página 10 - Onofre — a un lugar sagrado? —Yo — prosiguió Juanillo — no trato al lugar con indecencia; a los que mienten en él, siendo sagrado lugar, es sólo a los que llamo mentidores, pues profanándole, le hacen mentidero, que entre ellos se dicen más mentiras que entre sastres y mujeres...
Página 6 - Adiós, de San Felipe el gran paseo, donde si baja o sube el turco galgo como en gaceta de Venecia leo. Adiós, hambre sutil de algún hidalgo, que por no verme ante tus puertas muerto, hoy de mi patria y de mí mismo salgo.
Página 511 - ¡La Virgen del Pilar dice Que no quiere ser francesa, Que quiere ser capitana De la tropa aragonesa...
Página 465 - No se fiaba de su salud, con ser tan buena, porque sabía que cualquier enfermedad tiene más peligro en los hombres muy sanos que en los muy achacosos, fuera de que había tenido de un año a esta parte dos disgustos (como si para una vida no bastase uno) que le tenían casi rendido a una continua pasión melancólica, que ahora nuevamente se llama hipocondríaca.

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