Historia general de España, desde los tiempos mas remotos hasta nuestros dias. Por Don Modesto Lafuente, Volumen3

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Mellado, 1850

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Página 139 - Uno Dos Tres Cuatro Cinco Seis Siete Ocho Nueve Diez Once Doce Trece Catorce Quince Diez y seis Diez y siete Diez y ocho Diez y nueve...
Página 168 - Confia el gobierno de tus provincias y «ciudades á varones buenos y esperimentados ; castiga «sin compasion á los ministros que opriman tus pne«blos: gobierna con dulzura y firmeza á tos tropas «cuando la necesidad te obligue á poner las armas en «sus manos ; sean los defensores del estado , no sus «devastadores ; pero cuida de tenerlos pagados y de «inspirarles confianza en tus promesas.
Página 508 - ¿qué placer hay en invadir y destruir poblaciones, arruinar Estados y llevar el estrago y la muerte hasta los confines de la tierra? Conserva en paz y en justicia los pueblos, y no te deslumhren las falsas máximas de la vanidad: sea tu justicia un lago siempre claro y puro, modera tus ojos, pon freno al ímpetu de tus deseos, confía en Dios, y llegarás al aplazado término de tus días.
Página 121 - En el nombre de Dios clemente y misericordioso: el magnífico rey Abderramán á los patriarcas, monjes, proceres y demás cristianos de España, á las gentes de Gástela y á los que los siguieren de las regiones otorga paz y seguro, y promete en su ánima que este pacto será firme, y que deberán pagar diez mil onzas de oro, y diez mil libras de plata, y diez mil cabezas de buenos caballos, y otros tantos mulos, con mil lorigas y mil espadas, y otras tantas lanzas cada año por espacio do cinco...
Página 332 - La senda de la vida de los reyes está en apariencia llena de aromáticas flores, pero en realidad son rosas con agudas espinas; la muerte de las criaturas es obra de Dios, y principio de bienes inefables para los buenos: sin ella yo no sería ahora rey de España.
Página 138 - ... paladín; aun se conservan en la Colegiata de Nuestra Señora de Roncesvalles, fundada por Sancho el Fuerte, grandes sepulcros de piedra, con huesos humanos, astas de lanzas, bocinas, mazas y otros despojos que la tradición supone pertenecientes á aquella gran batalla.
Página 325 - En el año 267, dia jeuves, 22 de la luna de Xawál, tembló la tierra con tan espantoso ruido y estremecimiento, que cayeron muchos alcázares y magníficos edificios, y otros quedaron muy quebrantados, se hundieron montes, se abrieron peñascos, y la tierra se hundió y tragó pueblos y alturas, el mar se retrajo y apartó de las costas, y desaparecieron islas y escollos en el mar. Las gentes abandonaban los pueblos y...
Página 138 - Por muchos siglos siguieron enseñando los descendientes de aquellos bravos montañeses la roca que Roldan, desesperado de verse vencido, tajó de medio á medio con su espada, sin que su famosa Durindaina ni se doblara ni se partiera; aun muestran los pastores la huella que dejaron estampada las herraduras del caballo de...
Página 62 - Las flechas que los árabes arrojaban solían rebotar en la roca y herir de rechazo á los infieles, mezcladas con las que desde la gruta lanzaban los cristianos. Al propio tiempo los que se hallaban apostados entre las breñas hacían rodar á lo hondo del valle enormes peñascos y troncos de árboles que aplastaban bajo su peso á los agarcnos y les causaban horrible destrozo.
Página 427 - fuerte á maravilla, circundada de siete muros de robusta y antigua fábrica, obra de los pasados reyes, con dobles fosos anchos y profundos llenos de agua, y defendida por los mas valientes cristianos.

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