2. Otra carta del Rey al Duque de 5 de Setiembre de 1823.

MI QUERIDO HERMANO Y PRIMO. He recibido la carta de V. A. R. de fecha de este dia, remitida por el General Duque de Guiche, y como V. A. R. me declara que no puede tratar sino conmigo solo y libre, espero que para determinar un punto tan interesante tendrá V. A. R. la bondad de decirme lo que es necesario hacer para que me considere en tal situacion, y en este caso, de que modo pensais tratar conmigo. Tan luego como reciba esta esplicacion, sin la cual á nada puedo decidirme, responderé á V. A. R. obligandome, y esperando á hacer cesar las hostilidades. Dios, &c.

FERNANDO.

N° LXXXIII.

Respuesta del Duque, en 6 de Setiembre de 1823.

MI SEÑOR HERMANO Y PRIMO. He tenido el honor de recibir la carta de V. M. de ayer. La Francia no hace la guerra ni á V. M. ni á la España, sino al partido que tiene á V. M. y á su augusta familia cautivos en Cadiz, y no les consideraré en libertad, hasta que esten en medio de mis tropas, ya sea en el Puerto de Santa María, ó en donde elija V. M. Si hasta esta noche no tengo una respuesta satisfactoria á esta, y á la nota que he comunicado al General Alava, acerca de la libertad de V. M., de su Real familia y de la ocupacion de Cadiz por mis tropas, miraré como deshecha toda negociacion.

Soy, &c.

Puerto de Santa María 6 de Setiembre de 1823.

LUIS ANTONIO.

2. Otra carta del Rey al Duque, en 7 de Setiembre de 1823.

MI QUERIDO HERMANO Y PRIMO. He recibido la carta de V. A. R. de fecha de ayer, y por su contenido veo con el mayor dolor que V. A. R. cierra todas las puertas á la paz. Un Rey no puede ser libre alejandose de sus súbditos, y entregandose á la discrecion de tropas estrangeras que han invadido su Reyno; una plaza Española, cuando no contiene traidores, no se rinde á menos que el honor y las Leyes de la guerra no justifiquen su entrega. Sin embargo, yo deseo dar á V. A. R. y al mundo la prueba de que he hecho todo lo que he podido para evitar la efusion de sangre, y ya que rehusa V. A. R. el tratar con cualquiera que sea, escepto conmigo

solo y libre, estoy pronto á tratar solo con vos y en plena libertad, bien sea en un sitio á distancia igual de los dos ejércitos, y con toda la seguridad conveniente y recíproca, ó bien á bordo de cualquiera embarcacion neutral, bajo la fé de su pabellon. El Teniente General Don Miguel Ricardo de Alava va autorizado por mí para poner esta carta en manos de V. A. R. recibir una respuesta mas satisfactoria. Dios, &c.

y espero

Cadiz, 7 de Setiembre de 1823.

FERNANDO.

N° LXXXIV.

1. Convocatoria á Cortes estraordinarias para el 6 de Setiembre de 1823, hecha por la Diputacion permanente.

La Diputacion permanente de Cortes hace saber á todos los Señores Diputados de las mismas, que por el Señor Secretario del Despacho de la Gobernacion de la Peninsula se ha pasado con fecha de hoy el oficio siguiente:

"Escelentisimo Señor. El Rey tiene por conveniente, y aun necesario en las circunstancias del dia, que sin pérdida de momento se congreguen las Cortes estraordinarias, para que deliberen sobre una esposicion que el Gobierno tiene que presentarles acerca del estado actual de la Nacion; lo que comunico á V. E. de orden de S. M., para que con la mayor urgencia se sirva ponerlo en noticia de la Diputacion permanente de Cortes."

En cuya consecuencia la Diputacion permanente usando de la facultad que le concede el artículo 162 de la Constitucion, ha resuelto convocar, como por la presente convoca, á Cortes estraordinarias para el dia de mañana, 6 del corriente, á las 6 de la tarde, debiendose celebrar la única Junta preparatoria á las 12 del mismo dia.

Lo que comunica á V. S. la Diputacion permanente, á fin de que se sirva concurrir á desempeñar sus funciones.

2. Junta preparatoria de las Cortes á las 12 del dia 6 de Setiembre

de 1823.

Reunidos en el local acostumbrado los Señores Diputados, y abierta la Sesion, se leyeron los artículos de la Constitucion y del reglamento interior de las Cortes, que tratan de las causas, modo y fórmulas con que deben en su caso constituirse las Cortes estraordinarias, y en seguida dijo el Señor Presidente de la Diputacion permanente :—

Señores, el Rey ha tenido por conveniente, y aun necesario, que se congreguen las Cortes estraordinarias, para que deliberen sobre una esposicion que presentará el Gobierno de S. M., acerca del estado actual de la Nacion. No puedo hablaros del contenido ni del objeto de esta esposicion, por que no me es conocida; pero es bien notoria la triste situacion á que desgraciadamente se halla reducida nuestra cara Patria, y esto es bastante para que debais apercibiros á devorar nuevas amarguras, y á sufrir nuevos dolores y aflicciones.

Causas y acontecimientos que es inútil referir, porque todos lo saben, nos han traido á una crisis espantosa, y si ha sido áspero y sembrado de espinas el camino que hemos recorrido hasta ahora, no será mas delicioso y ameno el que nos falta que correr. El hombre recto é imparcial nos hará justicia en todos los tiempos y en todos los paises. No es nuestra la culpa de tantos desastres. Llamados por nuestros comitentes, no podiamos dejar de arreglarnos á los poderes que nos confirieron, no estaba en nuestras manos elegir otra regla de nuestra conducta, y no debiamos olvidarnos de los sagrados juramentos que tuvimos que prestar.

Cualquiera que sea la suerte á que estamos destinados, nos resta el honor, y yo espero que vuestro patriotismo, vuestra cordura y vuestra ilustracion, sabrán conservarlo en las nuevas deliberaciones en que vamos á entrar, para conservar tambien el testimonio de una conciencia pura y exenta de remordimientos, con la cual hay consuelo dulce y tranquilidad inalterable en medio de las mayores calamidades y desgracias.

Acto contínuo. El Señor Secretario Valdés (Don Dionisio) leyó la Sesion de la Diputacion permanente de la noche del 5 del corriente, en la que estaba inserto el oficio del Rey y el acuerdo de la misma Diputacion para la convocatoria en la forma que se ha verificado, como así mismo el nombramiento de Secretarios y escrutadores, y la remision de oficio para que S. M. se sirva señalar hora para recibir la Diputacion de Cortes.

El Señor Secretario Llorente leyó la lista de los Señores Diputados existentes en la Isla Gaditana, de los que se hallaban fuera del Congreso, con

conocimiento de las Cortes, y de los que dejaron de seguir el viage del Gobierno desde Sevilla; y el Señor Presidente dispuso se procediese al juramento prevenido por la Constitucion, prestandolo todos los Señores Diputados presentes, que fueron los que á continuacion se espresan

Señor Gener, Presidente. Isturiz. Soria. Llorente. Valdés. Velasco. Buruaga. Muro. Canga. Navarro. Tegeiro. Moure. Rico. Soria. Albear. Argüelles. Quadra. Alava. Rojo. Valdés. Bustos. Alvarez, Don Elias. Murphy. Duque del Parque. Beltran de Lis. Lomoza. Reillo. Gil. Orduña. Barges. Villanueva. Busaña. Trugillo. Lillo. Nuñez Falcon. Seoane. Roset. Adanero. Montesinos. Sierra. Silva. Belmonte. Vilvanos. Domenech. Neira.

Garmendia. Ojero. Soveron. Moreno. Blake. Pedralvez. Rey. Taboada. Bauzá. Torres. Herrera Burtamante. Saravia. Fernandez Cid. Alix. Zulueta. Saavedra. Galiano. Serrano. Gonzalez Alonso. Salvato. Maran. Sotos Tomas. Buey. Adan. Calderon. Gomez, Don Manuel. Posadas. Santa Fé. Lugue. Meca. Torre. Alfonso. Bartolomé. Siguera. Sedeño. Abreu. Garoz. Oliver. Ruiz de la Vega. Atienza. Gonzalez Aguirre. Nuñez, Don Toribío. Munarriz. Escudero. Salvá. Septiem. Melendez. Varela. Gonzalez, Don Manuel. Rodriguez Paterna. Lagasca. Villavieja. Ramirez Arellano. Castejon. Benito. Lopez del Baño. Aillon. Pacheco. Santos Suarez. Ovalle. Belda. Quiñones. Gisbert. Lopez Cuevas. Ximenes. Don Cayetano Valdes.

En seguida se procedió á la eleccion de Presidente, Vice-Presidente y Secretarios, resultando nombrado para el primer cargo, el Señor Gomez Becerra, para el 2o, el Señor Gonzalez Aguirre, y para Secretarios por su orden, los Señores Soria, Salvá, Ayllon, y Alfonso.

Concluida la votacion del segundo Secretario, promovió el Señor Beltran de Lis, la duda de si deberian admitirse votos á favor del Señor Latre, respecto á que algunos Señores solicitaban dispensarselos.

A su consecuencia manifestó el Señor Presidente que la mesa tambien lo había dudado, sin embargo de que los admitió, en razon de que este Señor Diputado no había prestado juramento, cualidad que se juzgaba indispensable; ademas de que hallandose el Señor Latre empleado por el Gobierno, parecía incompatible esta circunstancia con el nombramiento de Secretario, por lo cual estimaba que la Junta lo decidiese, y hecha la pregunta de si se admitian votos á favor de cualquiera de los Señores que se hallasen en el caso del referido Señor Latre, se decidió por la afirmativa.

Los Señores nombrados ocuparon sus respectivos asientos, y el Señor

Presidente dijo:-Las Cortes estraordinarias quedan instaladas hoy 6 de Setiembre de 1823, conforme al oficio de convocacion.

Se leyó un oficio del Señor Secretario de Gracia y Justicia, participando que S. M. se había servido señalar la hora de las 5 de esta tarde, para recibir la Diputacion que debía poner en su noticia la instalacion de las Cortes, y á su consecuencia fueron nombrados para componerla los Señores Canga, Valdés, Bustos, Varela, Lugue, Villavieja, Murphy, Pedralvez, Ruiz de la Vega, Seoane, Gisbert Rojo, Trujillo, Escudero, Ramirez Arellano, Moreno, Bauzá, Herrera Bustamente, Garoz Serrano, Belda, Alix, Buey, y dos Señores Secretarios.

El Señor Presidente manifestó, que debiendo ponerse luces en el salon, se suspendía la Sesion hasta las 4 de la tarde en punto.

Continuando la Sesion de la Junta preparatoria, se volvió á leer la lista de los Señores Diputados que componen la Comision, la que se dirigió á Palacio, y restituida al Congreso, espuso el Señor Canga que la Diputacion había puesto en noticia de S. M. hallarse instaladas las Cortes estraordinarias, convocadas en virtud de su orden, habiendo nombrado por Presidente al Señor Gomez Becerra, Diputado por Estremadura, y que se ponía en su noticia por si S. M. tenía á bien concurrir á la apertura, que sería esta misma tarde á las 6 de ella, que S. M. había contestado que la premura del tiempo no le permitía asistir á este acto, por no hallarse preparado al efecto.

El Señor Presidente contestó quedar las Cortes enteradas de la exactitud con que la Diputacion había desempeñado su encargo, previniendo que á las 6 sería la apertura de las Cortes, y levantó la Sesion.

3. Apertura de las Cortes estraordinarias en Cadiz, el dia 6 de Setiembre de 1823 á las 6 de la tarde.

Reunidos los Señores Diputados, abrió la Sesion el Señor Presidente, y entraron á jurar, tomando asiento en el Congreso, los Señores Infante, Alava, Sanchez, Don José, Prat, Escovedo, y Ferrer, Don Joaquin.

En seguida se leyeron los artículos 121 y 123 de la Constitucion, y el 161 del reglamento interior, y hallandose presentes todos los Señores Secretarios del Despacho, el de la Gobernacion de la Península puso el discurso del Rey en manos del Señor Presidente de las Cortes, quien lo leyó; y dice así.

"Señores Diputados: En aquel dia solemne en que se cerraron las Cortes ordinarias del presente año, os anuncié que si las circunstancias lo