Las obras de Juan Boscán: repartidas en tres librosLibrería de M. Murillo, 1875 - 593 páginas |
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Página 21
... valerme ; No sé cómo socorrerme , Ni sé , de puro despecho , Qué hacerme . O ! que no sé qué me daña , Y sé que todo me mata , Porque amor así me trata Que en una cosa me engaña Y en dos mil me desbarata . Estoy de mi pensamiento Ya tan ...
... valerme ; No sé cómo socorrerme , Ni sé , de puro despecho , Qué hacerme . O ! que no sé qué me daña , Y sé que todo me mata , Porque amor así me trata Que en una cosa me engaña Y en dos mil me desbarata . Estoy de mi pensamiento Ya tan ...
Página 40
... quiere dexarme , Ni tomarme por vencido . Qué haré ? Perdido , que ya no sé n Cómo sufra tal engaño , Que se paguen con el daño Los servicios de mi fé . m Ved cómo podré valerme , Que en el mal donde 40 Libro Primero .
... quiere dexarme , Ni tomarme por vencido . Qué haré ? Perdido , que ya no sé n Cómo sufra tal engaño , Que se paguen con el daño Los servicios de mi fé . m Ved cómo podré valerme , Que en el mal donde 40 Libro Primero .
Página 41
repartidas en tres libros Juan Boscán William Ireland Knapp. Ved cómo podré valerme , Que en el mal donde me envuelvo , Quando más veo ofenderme , Ni huyo , ni estoy , ni vuelvo , Ni aun oso defenderme . Ya caido Estoy en tierra vencido ...
repartidas en tres libros Juan Boscán William Ireland Knapp. Ved cómo podré valerme , Que en el mal donde me envuelvo , Quando más veo ofenderme , Ni huyo , ni estoy , ni vuelvo , Ni aun oso defenderme . Ya caido Estoy en tierra vencido ...
Página 55
... valerme ; Mas amor por no perderme , Porque quedase perdido , Anduvo por recogerme . Si vuestra merced no fuera , No hiciera el amor esto ; No me matára tan presto , Señora , si no pusiera Sus armas en vuestro gesto . El combate fué ...
... valerme ; Mas amor por no perderme , Porque quedase perdido , Anduvo por recogerme . Si vuestra merced no fuera , No hiciera el amor esto ; No me matára tan presto , Señora , si no pusiera Sus armas en vuestro gesto . El combate fué ...
Página 63
... valerme de miedo , Y déxolo de medroso ; El comienzo es con denuedo , Despues luego ya no oso , Y si oso , ya no puedo . Temo , señora , miraros , Pero más temo no veros , He miedo de más amaros , Y de miedo de perderos Ya no oso ...
... valerme de miedo , Y déxolo de medroso ; El comienzo es con denuedo , Despues luego ya no oso , Y si oso , ya no puedo . Temo , señora , miraros , Pero más temo no veros , He miedo de más amaros , Y de miedo de perderos Ya no oso ...
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Términos y frases comunes
Abido acidente Adolfo de Castro ageno agora alma amar Ambéres amor andar arrepentido baylar blandamente buen Cancion cativo cielo Cirene congoxa consiente contento contino COPLA corazon cruda crueza cuidado cuitado culpa cura daño deleyte dellos descanso deseo despues desto desventura dexa dice Diego de Mendoza digo dixo dolor dulce engaña entender escusado espanto esperanza estaba estoy estraña estremo fantasía Francisco Petrarca fuerza fuí Garcilaso gloria habia hallo holgar Leandro llaga llorar luego matarme miedo mirar miraros mis males morir mudar muero muerte mundo Nápoles Neptuno Nucio OBRAS DE BOSCAN ojos padece pasado pasion pena pensamiento pensar perdido pienso placer poco porfía Propercio Proteo pudiese qual qualquier quán Quando queda querella quereros quexarme quiero quisiera razon remedio Sedano sentido sentimiento seso siento SONETO sufrir tambien temo temor tengo ternán tiento tormento triste tristura vella vencido verme verso viendo vitoria vivir
Pasajes populares
Página 169 - Navagero me había dicho ; y así comencé a tentar este género de verso. En el qual, al principio, hallé alguna dificultad por ser muy artificioso y tener muchas particularidades diferentes del nuestro. Pero, después, pareciéndome, quizá con el amor de las cosas propias, que esto comenzaba a sucederme bien, fui paso a paso metiéndome con calor en ello.
Página 417 - Sólo quiero escusar tristes pobrezas, por no sufrir soberbias de hombres vanos, ni de ricos estrechos, estrechezas. Quiero tener dineros en mis manos, tener para tener contenta vida con los hidalgos y con los villanos. Quien quiera se desmande y se desmida, buscando el oro puro y reluciente, y la concha del mar Indo venida.
Página 489 - ... no pongan ni consientan poner en tiempo alguno ni por alguna manera, so pena de la nuestra merced y de diez mil maravedís a nuestra cámara, a cada uno que lo contrario hiciere.
Página 416 - Vitoria general de mi tristura. Y aquellos pensamientos míos tan vanos, ella los va borrando con el dedo, y escribe en lugar dellos otros sanos. Así que yo ni quiero ya, ni puedo tratar sino de vida descansada, sin colgar de esperanza ni de miedo.
Página 422 - Lo que desde este tiempo a la mañana pasare, pase agora sin contarse, pues no cura mi pluma de ser vana. Basta saber que dos que tanto amarse pudieron, no podrán hallar momento en que puedan dejar siempre de holgarse.
Página 6 - Toledo, de Valencia, de Galicia, de Mallorca, de Sevilla, de Cerdeña, de Córdoba, de Córcega, de Murcia, de Jaen, de los Algarves, de Algecira, de Gibraltar, de las Islas de Canaria, de las Indias Orientales y Occidentales, Islas y Tierra Firme del Mar Océano; Archiduque de Austria; Duque de Borgoña, de Bravante y Milán; Conde de Hapsburgo, de Flandes, de Tirol y Barcelona; Señor de Vizcaya y de Molina, ete.
Página 189 - El tiempo vuelve, y bullen esperanzas; yo estoy atento a ver qué ha de ser esto ; un corazón, tan flaco, no es dispuesto a sostener las prósperas mudanzas. Señales hay de no sé qué bonanzas...
Página 474 - Boscán tarde llegamos. ¿Hay posada? — Llamad desde la posta, Garcilaso. — ¿Quién es? — Dos caballeros del Parnaso. — No hay donde nocturnar palestra armada. — No entiendo lo que dice la criada. Madona, ¿qué decís? — Que afecten paso, que ostenta limbos el mentido ocaso, y el Sol depinge la porción rosada.
Página 412 - Nunca terná de qué pueda alterarse. Todo lo alcanzará sin dar gran salto : Sin moverse andará por las estrellas Seguro de alborozo y sobresalto. Las cosas naturales verá bellas, Y bien dirá entre ai que son hermosas, Pero no parará por eso en ellas.
Página 409 - Escucha el dulce canto que las aves En la verde arboleda están haciendo Con voces ora agudas, ora graves. Mira las limpias aguas, que riendo Corren por los arroyos, y estorbadas Por las pintadas guijas, van huyendo. Las sombras que al sol quitan sus entradas Con los verdes y entretejidos ramos, Y las frutas que están dellos colgadas.