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D. JAIME EL CONQUISTADOR ENTREGANDO LA ESPADA A SU HIJO.

FURNO G

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D. JAIME EL CONQUISTADOR ENTREGANDO LA ESPADA A SU HIJO.

rey transportar á Alcira

у сае enfermo.

esta famosa victoria de D. Pedro (1). Por bello que sea todo lo inventado Se hace el por Muntaner, hay que decir que no es verdad. En las legítimas autoridades de la historia solo consta que la noticia de la derrota de Luchente afectó tanto al rey, que enfermó de gravedad; que á los pocos dias llegó el príncipe D. Pedro á Játiva, y le dejó D. Jaime toda su gente para que estuviese velando en la frontera; y que en seguida, se hizo transportar á Alcira, desde donde, agravado la dolencia, envió á buscar á D. Pedro.

por habérsele

Acudió este solícito, y entonces D. Jaime, que se sentia ya moribundo, renunció el reino á favor suyo (2), y en presencia de los ricos-hombres y prelados inculcó al heredero del trono la necesidad de ser constante en la fé, la conveniencia de saber granjearse el amor de los súbditos, y la obligacion de que corriese en buena armonía con su hermano Jaime, á quien dejaba el reino de Mallorca con sus islas adyacentes, el condado de Rosellon y el señorío de Montpeller. Hízole tambien otros varios encargos, recomendóle particularmente algunos de sus servidores, le pidió sobre todo que prosiguiese la guerra con empeño procurando echar de la tierra á los moros, ya que tan mal pagaban sus beneficios, y le mandó que no se ausentase del reino para acompañar su cadáver sino que se le depositase en la iglesia de Alcira ó en la mayor de Valencia hasta que, acabada la guerra, pudiesen llevarle á sepultar en el monasterio de Poblet.

Añade á esto un cronista (3), diciendo saberlo por relacion de los que se hallaban presentes que, terminados estos encargos, se incorporó el rey en la cama, tomó su espada Tizon que estaba colgando á la cabecera, y alargóla al príncipe diciendo que «le daba aquella espada, con la cual él habia sido siempre vencedor, para que la llevase consigo y le recordase siempre de quien era hijo.» El príncipe besó el acero al tomarlo y llorando se despidió del rey, el cual le mandó que regresase inmediatamente á su puesto de la frontera. Debió esto tener lugar el 21 de julio de 1276 ó algun dia antes,

(1) Ni una sola palabra dicen de esto Desclot ni otros historiadores de tanta autoridad como

este.

(2) De esta enfermedad del rey en Alcira y de su abdicacion en su hijo no dice una palabra Muntaner, el cual lleva á D. Jaime del supuesto campo de batalla á Játiva y de Játiva à Valencia donde dice que murió ; pero en cambio de no referir esto, nos cuenta que el rey tenia entonces mas de ochenta años (cap. XXVI de la crónica de Muntaner traducida y anotada por Bofarull, don Antonio). ¡ Mas de ochenta años! D. Jaime nació en febrero de 1208 y murió en julio de 1276. Saquen los lectores la cuenta.

(3) Marsilio: Crónica latina (manuscrita) de la biblioteca de esta ciudad.

TOM. II.

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