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aunque más de una vez nos asaltó el deseo de hacer excavaciones en él, la verdad es que, arredrados ante la magnitud de la empresa, jamás nos atrevimos á llevar allí nuestros operarios. Sin embargo, el día llegó en que nos resolvimos, y ayudados por el presidente de la Sociedad, Ilmo. Sr. D. Sebastián Gómez y Muñiz, abrimos algunas zanjas de exploración. Pronto tuvimos ocasión de felicitarnos: habíamos descubierto una gran entrada en forma de rampa, algo del podio y la cavea, los nichos para los vasos sonoros, y otras muchas particularidades que constan en la Memoria escrita por D. Jorge Edward Bónsor. Bien habríamos querido mantener descubiertas las zanjas; pero el colono, que por favor especial concediera el permiso para practicar los trabajos, nos exigió que las llenásemos, con el fin de proceder á la siembra del terreno. ¡Pretensión muy natural, si se tiene en cuenta la crecida renta que paga y su modestísima posición!

Llegado el mes de Abril, proyectamos abrir de nuevo las zanjas, y para ello nos dirigimos al dueño de las tierras y al colono: uno y otro nos dieron el permiso, y el segundo, con una generosidad que le honra, rehusó por segunda vez toda clase de retribución. Autorizados para emprender las excavaciones, era nuestro propósito haberlas practicado en grande escala para este día; pero hemos tenido que contentarnos con bien poca cosa, efecto de no haber recibido la cantidad que para ello solicitamos de la Excma. Diputación provincial (1).

Llego, señores, á la parte más difícil de tratar, la referente á las personalidades. Aun á trueque de ofender la modestia de mis dignos compañeros, voy á tener el honor de presentároslos uno por uno, dando de paso la razón del por qué pertenecen á la Sociedad Arqueológica.

Excmo. Sr. D. Juan de Dios de la Rada y Delgado, presidente honorario. Es autor de la Memoria titulada Necrópolis de Carmona; y ha enaltecido tanto el buen nombre de esta ciudad, y ha descrito

(1) Esta cantidad, consistente en trescientas pesetas, se cobró por fin en el verano de 1887, merced á las gestiones de nuestro convecino y diputado provincial, Ilmo. Sr. D. Pablo Subirá.

tan bien algunos de sus monumentos, que la Sociedad ha hecho en su obsequio lo menos que podía hacer, esto es, ofrecerle la presidencia de honor, en justo pago á la deuda de gratitud con él contraída.

D. Alvaro Campaner y Fuertes, socio honorario.-Es distinguido numismático é historiador. Durante los dos años de su permanencia en Carmona, donde estuvo desempeñando el Juzgado de primera instancia, formó siempre parte de nuestras reuniones íntimas y nos acompañó de continuo en las excavaciones, ilustrándonos con sus consejos. A él se debe el pensamiento de convertir aquel centro de amigos en lo que hoy es Sociedad Arqueológica.

D. Adolfo de Herrera, socio honorario.-Ha trabajado mucho en favor de la Sociedad, que le debe los ciento setenta y siete volúmenes dados á su biblioteca por el Ministerio de Fomento.

Ilmo. Sr. D. Sebastián Gómez y Muñiz, presidente efectivo.Emprendió la restauración del hermoso templo parroquial de Santa María, y á él se debe el que la Real Academia de San Fernando lo declarara Monumento notable de la Nación.

D. Manuel Fernández López, vicepresidente.-Es autor de la Historia de Carmona y de las monografias tituladas Alcázares y Puertas, Familias é Hijos Ilustres y Memorias Religiosas.

D. José Pérez y Cassini.-Es grande aficionado á la numismática é investigador constante de antigüedades. Conoce mejor que ningún otro el término rural de Carmona y los sitios donde se encuentra todo lo que es digno de estudio bajo el punto de vista romano. Publicó en el periódico local La Semana varios articulos arqueológicos.

D. Manuel Delgado y Malvido.-Ha sido el encargado de ejecutar las obras de restauración en nuestra iglesia Prioral y es autor de la descripción arquitectónica de dicho templo enviada á la Real Academia de San Fernando.

Ilmo. Sr. D. Antonio María de Ariza.-Tomó parte en las excavaciones que se practicaron en los alrededores de la necrópolis el año de 1874. Es autor del artículo que publicó El Universal, de Sevilla, con la descripción artística é histórica de los más importantes objetos que se guardan en el museo.

D. Ramón Martínez y Burgos.-Es uno de los miembros más distinguidos de la Sociedad Arqueológica, por cuya prosperidad ha mostrado siempre grande interés.

D. José Vega y Peláez.-Compartió con nosotros en varias ocasio

nes los trabajos materiales de la necrópolis y tomó parte activa en los de la alcázar de la puerta de Marchena, durante los siete meses invertidos en el levantamiento del plano del mismo. Ha sido nombrado bibliotecario de la Sociedad por su afición á la bibliografía.

D. Aniceto de la Cuesta.-Ha tomado siempre parte activa en los trabajos de la necrópolis, y durante cinco meses ha dirigido las excavaciones practicadas en el Cubete y alcázar de Arriba.

D. Martín Iribarren.-Es antiguo archivero del Excmo. Ayuntamiento, y como tal muy competente en lectura y traducción de documentos antiguos.

D. Jorge Edward Bónsor.-Es autor de las Memorias tituladas Excursión la Alcaudete y Descubrimiento de un anfiteatro en Carmona. Ha levantado el plano de casi todos los monumentos funerarios encontrados en la necrópolis.

D. Juan Fernández López.-Es copropietario con D. Jorge Edward Bónsor de la necrópolis romana y secretario de la Sociedad.

Las Reales Academias de la Historia y de San Fernando nos han dispensado en dos veces distintas la alta honra de enviar sus representantes á nuestras reuniones. La Sociedad Arqueológica de Carmona, profundamente reconocida, consigna aquí por mi conducto la expresión de su agradecimiento por tan inmerecido honor. En nombre de la Sociedad me complazco también en dar las gracias á la Comisión de Monumentos de Sevilla, cuyos individuos nos han favorecido con su visita en repetidas ocasiones, nos han ilustrado con sus consejos y nos han exhortado de contniuo á no desmayar en nuestra empresa. Por último, la Sociedad Arqueológica rinde gustosa en este día el homenaje de su gratitud a todas las otras Corporaciones y particulares que más o menos directamente se han interesado por su prosperidad y engrandecimiento.

Carmona 6 de Junio de 1886.

El Secretario de la Sociedad,

Juan Fernández López.

La reunión arqueológica en que fué leída la anterior Memoriaresumen tuvo lugar, como hemos dicho antes, el 6 de Junio de 1886. Hé aquí cómo la describe el periódico La Andalucía, de Sevilla, en el número correspondiente al 8 de Junio de dicho año:

«Muchos y muy gratos recuerdos conservábanse por varios de los invitados á la fiesta con que la Sociedad Arqueológica de Carmona celebrara en 24 de Mayo del año anterior la inauguración del Museo y la Necrópolis Romana, y esto justifica el que, á excepción de aqueIlos cuyas ocupaciones ó enfermedades se lo han impedido, los demás hayan aceptado con gran satisfacción las invitaciones para la solemne reunión verificada anteayer.

Tanto por los nuevos descubrimientos obtenidos durante el año que ha transcurrido, cuanto por el especial carácter de la reunión y la calidad de la mayor parte de los convidados, entre los cuales se contaban nombres distinguidos, parecía que la fiesta igualaría, si no excedia en brillantez, á la que tan buena memoria dejó en los que tuvieron el gusto de asistir á ella.

Así ha sucedido: ésta ha sobrepujado á aquélla. La Sociedad Arqueológica Carmonense y su digno Presidente han hecho cuanto es dable para satisfacer la natural curiosidad de los invitados y su deseo de examinar todo lo notable que encierra Carmona.

Algunos de éstos, impacientes, por una parte, de recorrer la ciudad predilecta de D. Pedro, y por otra, con el deseo natural de saludar á los Sres. Fernández y Bónsor, marcharon á Carmona el sábado

por la tarde, á cuya circunstancia debieron el poder asistir á la reunión arqueológica que en la noche de dicho dia se celebró en casa del presidente D. Sebastián Gómez y Muñiz.

La Real Academia de la Historia habia designado para que la representaran en la sesión del domingo á los Sres. D. Víctor Balaguer, D. Juan de Dios de la Rada y Delgado, D. Antonio María Fabié y D. Celestino Pujol y Campo; mas éstos no han podido asistir, si bien dentro de este mes, según todas las probabilidades, vendrán á visitar la Necrópolis y el Museo. En su consecuencia, aquella Corporación invistió con su representación á los Sres. D. Antonio María de Ariza, D. José Lamarque de Novoa y D. José Gestoso, de los cuales concurrieron el primero y último. A la reunión del 6 de Junio asistieron también D. Sebastián Gómez Muñiz, D. Enrique de la Cuadra, don Manuel Fernández López, D. Claudio Boutelou, D. Emigdio Serrano Dávila, D. Felipe Méndez, D. Mariano Trigueros, D. Diego Diaz Martín, Mr. Arthur Engel, M. George Bónsor, M. Alfonso Nogués, don José Gómez, D. José Barrera, Pro., D. Manuel de la Cuesta, D. Enrique Benot, D. Francisco Ruiz Estévez, D. Juan García Hermosin, D. Mauricio Marién, D. Bernabé Martinez, D. Fernando Belmonte, D. José Pérez Cassini, D. Eduardo Muñoz, D. Antonio García Dana, D. Manuel Delgado Malvido, D. José de Velilla, D. Antonio Zayas, D. Ricardo Parody, D. José del Villar, D. Francisco Corona, D. Emilio Zabala, D. Cayetano Aldana y Tubino, D. José Vega y Peláez, don Ramón Fernández, D. Manuel Rodriguez Mazón, D. Francisco Collantes de Terán, D. Juan Fernández López, D. Enrique Montero de Espinosa, D. Juan Peláez, D. Antonio Collantes, D. Manuel Acal, don Francisco Cortés, D. Manuel Pelayo y del Pozo, D. Angel de Vera, D. Pedro Palencia, D. Prudencio Sánchez de Merodio, D. Aniceto de la Cuesta, D. Esteban Gutiérrez, D. Ramón Pinzón, D. Rafael González, D. Benito Mas y Prat, D. Manuel Rodriguez Morente y don J. Arboleya.

A las ocho de la mañana del domingo, algunos de los más caracterizados socios de la Arqueológica bajaron en coche hasta la estación de la Vega para recibir á los convidados y conducirlos á la Necrópolis, donde debia verificarse la recepción.

La visita á la Necrópolis estaba dividida en el itinerario que al efecto se repartió á los invitados en tres partes: la primera y segunda comprendian casi en su totalidad los descubrimientos hechos hasta

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