Que sea de Sus Altezas qual dellos más quysieran.-Alonso de Quintanilla.-Pero de Covarrubias. Iñigo de Artieta.-Martín de Mesquita.Doctor Villalon.

Memorial detallado de las cosas ocurridas e que facen falta proveer por Sus Altezas en la Cibdad de la Isabela.

L

ISABELA.-HENERO 30 DE 1494 (1).

o que vos, Antonio de Torres, Capitan de la Náo Marigalante, e Alcayde de la Cibdad Isa

bela abeis de descir e soplicar de mi parte al Rey e a la Reyna Nuestros Señores, es lo syguiente.

Primeramente: dadas las Cartas de esehencia que llevais de mí, para Sus Altezas, besareis por mí, sus reales pies e manos, e me encomendareis en Sus Altezas, como a Rey e Reyna, mis Señores naturales, en cuyo servycio yo deseo fenescer mis dias, como esto más largamente vos podreis decir a

(1) Archivo de Indias-Simancas. -Patronato.-Est. 1.°Caj. 1.-Leg. .

Sus Altezas, segund lo que en mi, vysteis e sopysteis. Item: como quiera que por las Cartas que a Sus Altezas escribo e aun al Padre Fray Bruyll, e Thesorero, podrán comprender todo lo que acá, dempues de nuestra llegada se fizo, e esto arto por menudo e estensamente, con todo, dyreis a Sus Altezas de mi parte, que a Dios ha plascido darme tal gracia, para su servycio, que fasta aquí non fallo yo menos, nin se ha fallado en cosa alguna de lo que yo escrebí, e dixe, e afirmé a Sus Altezas; que los dias pasados, antes por gracia de Dios, porque aun muy mas claramente e muy presto por la obra parescerá, porque las cosas de Especyería en solas las orillas, tal vez, creo en pryncipios della, qués razon que se tenga muy mexores fines, e esto mismo en las minas de oro; porque con solos dos que fueron a descobrir, cada uno por su parte, sin detenerse allá, porque hay poca xente, se han descobierto tantos rios poblados de oro, que qualquier de los que lo vieron e coxieron, solamente con las manos, por muestra, vynieron tan alegres, e discen tantas cosas de la abundancia dello, que yo tengo empacho de las descir e escrebir a Sus Altezas; pero porque allá va Gorbala, que fue uno de los descobridores, él dirá lo que vió, aunque acá queda otro que llaman Oxeda, criado del Duque de Medynaceli, muy discreto mozo e de muy gran recabdo, que sin duda e aun sin comparacion, descobrió muncho más, segun el Memorial de los rios, que truxo, dysciendo

quen cada uno dellos hay cosa de non creer; por lo qual, Sus Altezas pueden dar gracias a Dios, pues tan favorablemente se há, en todas sus cosas..

Item: dyreis a Sus Altezas, como quier que ya se las escribo, que yo deseaba muncho en esta Armada, poderles ymbiar mayor quantidad de oro del que acá se espera coxer, si la xente que acá está, cerca la mayor parte, subitamente non fyciese falta; pero porque ya esta Armada non se podia detener acá más, syquiera por la costa grande que fasce, syquiera porquel tiempo es ympropio para yr e poder volver, los que han de traer acá las cosas que aquí fascen muncha mengua, porque si tardaren de irse de aquí, non podrian volverse para Mayo los que han de volver; e allende desto, si con los sanos que acá se fallan, ansí en mar como en tierra, en la poblacion, yo quysiera emprender de ir a las minas otras.

Agora habia munchas dəficultades e aun peligros, porque de aqui a veinte e tres e veinte e quatro leguas en donde ay puertos e rios para pasar, e para tan luengo camino, e para estar allá el tiempo que sea menester para coxer el oro, habia menester llevar munchos mantenymientos, los quales non podrán llevar acuestas nin hay bestias acá que podiesen soplir en los caminos e pasos; non están tan aparexados como quier que se ha comenzado a adovar para que se podiese pasar; e tambien hera gran ynconviniente dexar acá los dolientes en logar abierto, e chozas, e las provysiones, e mantenymientos questán

en tierra, que como quier questos yndios se hayan mostrado a los descobridores e se muestren cada dia muy simples e sin malycia, con todo, porque cada dia vienen acá entre nosotros, non pareció que. fuera buen consexo meter a riesgo e aventura de perderse, esta xente e los mantenymientos, lo que un yndio con un tizon podria fascer poniendo fuego a las chozas, porque de noche e de dia, siempre van e vienen; a cabsa dellos tenemos guardas en el campo, mientras la poblacion está abierta e sin defension.

Item: como abemos visto en los que fueron por tierra a descobrir, que los más cayeron dolientes dempues de vueltos, aun algunos se obieron de volver del camino, hera tambien razon de temer que otro tal contesciese a los que agora yrian destos sanos que se fallan, e seguirse los peligros de allí, de adolecerse ellos en la misma obra, do non hay casa, nin reparo alguno, de aquel cacique que llaman Caonabo, ques ombre, segun relacion de todos, muy malo e muy mal ystruido; el qual viéndonos allá, ansí, desbaratados e dolientes, podria emprender, lo que non osaría si fuésemos sanos; e con esto mismo se allega otra deficultad de traer acá lo que allegasemos de oro, porque o abiamos de traer poco, e ir e venir cada dia, e meterse en el riesgo de las dolencias, o se abia de ymbiar con alguna parte de la xente, con el mismo peligro de perdello.

Ansí, que dyreis a Sus Altezas, questas son las cabsas porque de presente non se ha detenido el . Armada sin se los ymbiar oro, más de las muestras; pero confiando en la Mysericordia de Dios, quen todo e por todo nos ha guiado fasta aquí, esta xente convalecerá presto, como ya lo fascen, e luego se levantan; e es cierto que si tobiesen algunas carnes frescas para convalecer muy presto, se van todos de pie con ayuda de Dios, e aun los más, estarian ya convalecidos en este tiempo, nin porquellos convalescen con estos pocos sanos que acá quedan, cada dia sentiende en cerrar la poblacion e meterla en alguna defensa; e los mantenymientos en seco se han fecho en breves dias, porque non han de ser sino barracadas, que non con xente, los yndios, que si dormiendo non nos faltasen para emprender cosa nenguna, aunque la tobiesen pensada, que ansí fyrieron a los otros que acá quedaron, por su mal recabdo; los cuales por pocos que fuesen e por mayores ocasiones que dieran a los yndios, de haber e de fascer lo que fycieron, nunca ellos osaran emprender de dapñalles si los vieran a buen recabdo; e esto fecho, luego sentenderá er yr a los dichos rios, o dende aqui tomando el camino e buscando los mexores expedientes que se puedan, o por la Mar, e rodeando la Ysla fasta aquella parte de donde se disce que non debe aber más de seis o siete leguas fasta los dichos rios; de forma que con seguridad se puede coxer el oro, e ponello en