Album dedicado al maestro Fr. Luis de Leon

Portada
Oliva y Hermano, 1869 - 233 páginas
 

Páginas seleccionadas

Términos y frases comunes

Pasajes populares

Página 19 - ¡Y dejas, Pastor santo, tu grey en este valle hondo, escuro, con soledad y llanto, y tú, rompiendo el puro aire, te vas al inmortal seguro!
Página 21 - Un no rompido sueño, un día puro, alegre, libre quiero; no quiero ver el ceño vanamente severo de a quien la sangre ensalza o el dinero.
Página 158 - ¡Qué descansada vida la del que huye el mundanal ruido, y sigue la escondida senda por donde han ido los pocos sabios que en el mundo han sido! Que no le enturbia el pecho de los soberbios grandes el estado, ni del dorado techo se admira, fabricado del sabio moro, en jaspes sustentado.
Página 19 - DEL CIELO Alma región luciente, prado de bienandanza, que ni al hielo ni con el rayo ardiente fallece, fértil suelo, producidor eterno de consuelo; de púrpura y de nieve florida, la cabeza coronado, a dulces pastos mueve, sin honda ni cayado, el buen Pastor en ti su hato amado.
Página 20 - Morada de grandeza, Templo de claridad y hermosura, El alma que á tu alteza Nació, qué desventura ¿La tiene en esta cárcel baja, escura? Qué mortal desatino De la verdad aleja así el sentido, Que de tu bien divino Olvidado, perdido Sigue la vana sombra, el bien fingido?
Página 21 - Oh campos verdaderos!, ¡ oh prados con verdad frescos y amenos!, ¡riquísimos mineros!, ¡oh deleitosos senos!, ¡ repuestos valles de mil bienes llenos!
Página 45 - ... la fe, apartado no solo de la conversación y compañía de los hombres, sino también de la vista, por casi cinco años estuve echado en una cárcel y en tinieblas. Entonces gozaba yo de tal quietud y alegría de ánimo , cual ahora muchas veces echo menos, habiendo sido restituido á la luz y gozando del trato de los hombres que me son amigos...
Página 20 - Quay del que los procura, pues hace la prisión, a do se queda en servidumbre dura, cual gusano de seda, que en su delgada fábrica se enreda. Porque el mejor es cargo, y muy pesado de llevar agora, y después más amargo, pues perdéis a deshora su breve gusto que sin fin se llora.
Página 31 - Job le maldice, es señal de ánimo impaciente y desesperado, hacen fuerza a lo que dice, y lo tuercen por diferentes maneras, ya mi parecer sin razón. Persuádome yo que los que de estas palabras se asombran y les buscan salida, nunca hicieron experiencia de lo que la adversidad se siente ni de lo que duele el trabajo...

Información bibliográfica