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no la solemne proclamación de las virtudes en grado heroico del venerable Fr. Diego, juntamente de la venerable María Gertrudis Salandri, dominica fundadora del monasterio del Rosario en Valentano.

León XIII recibió en audiencia solemne á los superiores generales de los dominicos y á los franciscanos, así como á los miembros de las postulaciones de las referidas causas.

Leyéronse delante del trono por el secretario de ritos los decretos acerca de la heroicidad de las virtudes. Enseguida el superior general de los capuchinos, y padre general de los dominicos, expresaron en nombre de sus Órdenes respectivas su gratitud al Sumo Pontífice.

En su Breve-contestación, el Papa condenó la guerra que se hace á las Órdenes religiosas, tributando grandes elogios á los postuladores de Fr. Diego y Sor María.

Fr. José de Llerena murió en Roma, en los últimos días de Diciembre de 1886, dejando un gran nombre entre los místicos y teólogos contemporáneos.

CAPÍTULO XXI

La «Respública Reginensis>>>

«<Iulipense-Teultuniacum» y el Monasterio de Nuestra Señora de Ten-tu-dia. «Nertóbriga Beturiense» 6 «Concordia Julia.>>

Fregenal de la Sierra. Arias Montano y Díaz Tanco.

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ISTA Cinco kilómetros de Llerena la villa de Reina, que se conoció anterior á los romanos con el nombre de Regina 6 Regiana, pues de

ambos modos le llaman los geógrafos antiguos, que ven asentada en ella á la quinta mansión desde Hispalis (Sevilla) á Emérita (Mérida), según el Itinerario de Antonino Pío (1). Ambrosio de Morales publicó algunas antigüedades de esta villa, y pro.

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bó (1) que corresponde á la ciudad romana que se llamó Respública Reginensis; Viu sostiene (2) que Regina y Regiana son una misma población en el país de los Célticos Beaturienses.

En los campos de esta villa aparecen frecuentemente restos, monedas é inscripciones romanas, que atestiguan más que nada el origen que, tanto Morales como Viu, dan á esta población. Una de las inscripciones más notables que de ella se conoce existe hoy en Llerena, y dice así:

D. M. S.

L. RUFINVS. PRIMVS. ITALICVS
DECVRIO. REGINENSIS. AN. XXXX
FABINA. CAMPANA. UXOR. M. M.
F. H. S. E. T. T. L.

Que traducida dice así: Á los dioses manes ó de los difuntos. Lucio Rufino Primo Itálico, Decurión Reginense, de edad de cuarenta años, está aquí sepultado, etc. Fabina Campana, su esposa, hizo al marido este monumento. >>

Y en la ermita de Nuestra Señora del Monte, situada en el término de Cazalla, no lejos de Reina, se halla esta otra:

M. AVRELIO. ANTONINO. SEVERO. PIO
AVG. FELICI. IM. CÆSARIS. L. SEPTIMI
SEVERI, PII. PERTINACIS. AVG. FILIO
ARABICO. ADIABENICO. PARTHICO

MÁXIMO. BRITÁNICO

MÁXIMO. P. P.

RESPÚBLICA. REGINENSIVM. DEVOTA. NOMINI

FIVS. POSVIT.

Esto es: La República ó municipio Reginense levantó este monumento á Marco Aurelio Antonino Severo Pío Augusto y

(1) Las antigüedades de España que van nombradas en la Crónica, con averiguación de sus sitios y nombres antiguos, p. 100.

(2) En su Extremadura, tomo I, pág. 211.

Felicísimo, vencedor de los Arabes, de los Adiabenses (de la Siria), y de los Partos (en el Asia Menor); Máximo Británico, Máximo, padre de la patria.

Corresponde esta inscripción al año 215 de Cristo y al emperador Caracalla, siendo por tanto una de las inscripciones más notables de España.

Por esta época Reina era una población murada, como mansión militar y municipal de los más notables de la Lusitania. Todavía se ve su antiguo castillo sobre el cerro que domina la villa. Ésta se alojaba dentro de los antiguos muros hasta final del siglo XII, en que la población fué trasladándose á las afueras, formando un arrabal que después comprendió toda la villa, no quedando en el castillo más que la parroquial, Nuestra Señora de las Nieves.

En el siglo XIII Reina era una población importante, que las guerras de los caballeros de Santiago, con los señores feudales fueron diezmando.

Los Reyes Católicos, viendo la despoblación de su castillo y la emigración de sus vecinos á Llerena y Fuente de Cantos, concedieron título de Hijo-dalgo á los que morasen con casa abierta dentro del castillo, y ni aun este privilegio pudo retener á los vecinos dentro del murado recinto, que ya en principios del siglo xviii moraban todos en lo que antes fueron arrabales, y hoy villa.

II

De Reina á Fuente de Cantos aparece La Calera, la antigua Cúrica, octava mansión desde Ostia-Annæ (Ayamonte) á Emérita Augusta. Plinio dice que éste era el municipio IulipenseTeultuniacum, y lo comprueba con inscripciones que se hallaron

entre las ruinas romanas de la villa. Por otra parte, todos los cosmógrafos han indicado á este lugar como la antigua Curica de la Beturia Céltica (1), situada entre Monte-Mariorum y Contributa, á 49 millas de aquél y 34 de ésta. Ptolomeo la asigna 60°30' longitud y 38°40' latitud. Sábese que fundada por los celtas con el nombre de Acurgia 6 Turgia, según unos, 6 Cúriga, según otros, vino á decirse en tiempos de Plinio Curiga-Mucultunia iten quæ Turiga nunc. est., corrección parecida á la de ahora, que llamándose Curica, se denomina hoy Calera de León. Ucultunia debió ser nombre corrompido del que en su fundación se diera á la ciudad; de aquí se vino después á Turiga, Cúriga, Curgia, Curlica y Calera, que hoy lleva.

La siguiente dedicatoria, encontrada en su castillo, justifica la antigüedad de este pueblo:

DIVO. NERVAE

DECRETO. DECVRIONE

MVNICIPIVM. IVULIVUS. TEVLTVNIACVM

PONENDVM. IvssIT. ET. DEDICAVIT.

Que quiere decir: A Divo Nerva: Por decreto de sus Decuriones mandó el Municipio Teultuniaco poner ó levantar este monumento, y lo dedicó al mismo Emperador.>

Esta inscripción que publica Viu, y Ponz pone en Azuaga, corresponde al año 96 6 98 de Cristo.

Calera estuvo ocupada por los árabes, que la denominaron Al-calxera, que quiere decir blanca.

El gran maestre de Santiago D. Pelay Pérez Correa la conquistó á los moros, á quienes venció en los llanos llamados de las Cruces ó del Maestre, haciéndoles replegar á Sierra Morena.

En Calera formó Pérez Correa aquel numeroso ejército de caballeros que partieron á unirse á las tropas de D. Fernando,

(1) Diccionario de Madoz, tomo V, pág. 289.

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