Imágenes de páginas
PDF
EPUB

Tan luego como el rebelde infante castellano llegó á Tanger, ofreció al rey Yussuf de Marruecos, que se hallaba en Fez, que si ponia á su dísposicion algunas tropas recobraria para él á Tarifa, arrancándola del poder de su hermano. El emir ordenó á sus caudillos que le acompañáran con cinco mil zenetas de caballería, con cuya hueste y con las tropas que de Algeciras le dieron, puso el infante don Juan su campo delante de Tarifa, y comenzó á batir sus muros con toda clase de máquinas é ingenios que entonces se usaban. Defendia la plaza con valor y con inteligencia Alfonso Perez de Guzman. «Apurado el príncipe Juan, dice el historiador arábigo, por no poder cumplir la palabra que habia dado al rey, acordó de probar por otra via lo que por fuerza no era posible.» El recurso á que apeló don Juan habia de dejar memoria perpétua en los siglos por el rasgo de grandeza y de patriotismo á que dió ocasion. Tenia el infante en su poder un tierno mancebo, hijo de don Alfonso de Guzman, al cual colocó frente á la muralla de Tarifa, y envió á decir á Guzman que si no le entregaba la plaza podia ver desde el muro el sacrificio que estaba resuelto á hacer de su hijo. Lejos de doblegarse por esto el ánimo heróico de Guzman, antes querré, contestó, que me mateis ese hijo, y otros cinco si los tuviese, que daros esta villa que tengo por el rey . Y arrojando desde el adarve al campo su

(1) Dijo (son las palabras de la Crónica) que antes queria que

propio cuchillo, se retiró. El infante don Juan (¡indigna y cobarde accion que nos duele tener que referir de ún príncipe castellano!) degolló al tierno hijo de Alfonso con el cuchillo de su mismo padre, y llevando mas allá su ruda barbarie, hizo arrojar la cabeza á la plaza con una catapulta para que su padre la viese. Barbarie inútil, puesto que lejos de consternar á Alfonso la vista de la sangrienta prenda, le animó á defender con mas bravura la plaza, tanto que al fin el príncipe cristiano y sus auxiliares musulmanes tuvieron que abandonar el cerco y retirarse vergonzosamente á Algeciras (). Este rasgo de inaudita y ruda heroicidad valió á Alfonso el renombre con que le conoce la posteridad de Guzman el Bueno (1294).

Viendo el rey de los Beni-Merines que perdida Tarifa no podria conservar á Algeciras contra las fuerzas y el poder naval de don Sancho, prefirió dársela al rey de Granada por una cantidad de mitcales de oro, á fin de que no saliese del dominio de los musulmanes, y en su virtud se posesionó de ella Mohammed de Granada, quedando de este modo los africanos sin una sola posesion en la península española, «y Abu Yacub, dice su historia, cuidó de sus cosas de Africa, sin pensar mas en Andalucía.»>

Las vicisitudes de la suerte trajeron otra vez por

le matasen aquel hijo y otros cinco si los toviese que non darle la villa del rey su señor de que le hiciera omenage,» Cap. 40.

TOMO VI.

(1) Los árabes de Conde consignan tambien este hecho glorioso del célebre Guzman. Part. IV., cap. 13.

15

este tiempo á Castilla al infante don Enrique, hijo de San Fernando y tio del rey, aquel príncipe valeroso y aventurero, que despues de haber estado en Túnez y peleado en Sicilia en favor de Conradino, habia sido encerrado en una prision por Cárlos de Anjou en la Pulla, y á quien al cabo de veinte y seis años acababa de poner en libertad en virtud de un tratado el rey Cárlos el Cojo. Recibióle don Sancho muy bien, y señaló grandes heredades y tierras para su mantenimiento. Este príncipe despues de tantas aventuras por estraños reinos estaba destinado todavía á causar ne pocas perturbaciones y á correr nuevos azares en España. Don Sancho le llevó consigo, juntamente con los hijos de don Juan Nuñez, á la última de sus expediciones bélicas, cuyo objeto fué acabar de expulsar de Vizcaya al rebelde don Diego Lopez de Haro, que aun andaba revolviendo el pais.

Habíasele ido agravando á don Sancho la enfermedad que contrajo en el sitio de Tarifa, y como se aproximase el invierno (1294), vínose para Alcalá de Henares, donde quiso prevenirse para el caso de muerte que no veia lejana, otorgando su testamento ante el arzobispo de Toledo y otros prelados, su tio el infante don Enrique y muchos ricos-hombres y maestres de las órdenes militares. En él señalaba por heredero del trono á su primogénito don Fernando, y atendida su córta edad, que era de nueve años solamente, nombraba tutora del rey y gobernadora del

reino hasta la mayoría del príncipe á la reina doña María de Molina, señora de gran prudencia y entendimiento. A don Juan Nuñez le recomendó mucho que no abandonára nunca al príncipe su hijo «hasta que tuviese barbas,» segun espresion de la crónica, y él lo ofreció asi bajo juramento. Hízose luego trasladar á Madrid, y de aqui fué llevado en hombros humanos á Toledo, donde al cabo de un mes (abril de 1295), recibidos con cristiana devocion todos los sacramentos de la Iglesia, espiró á poco mas de la media noche del 25 de abril á los treinta y seis años de edad no cumplidos y á los once de su reinado ("). Diósele sepultura en la catedral de Toledo en una tumba que él mismo se habia hecho erigir cerca de la de Alfonso VII ).

(1) Diez y seis, dice equivocadamente Romey. El infante fué preso en 1269.

(2) Tuvo don Sancho el Bravo de doña María de Molina cinco bijos legítimos y dos hijas: don Fernando que le sucedió en el reino,

don Alfonso que murió poco antes que su padre, don Enrique, don Pedro, don Felipe, doña Isabel y doña Beatriz. Fuera de matrimonio tuvo otros tres hijos, Violante, Teresa y Alfonso.-Florez, Rein. Catól. tom. II.

CAPITULO V.

ALFONSO III. (el Franco) EN ARAGON.

De 1285 & 1291.

Opónense los aragoneses á que se intitule rey de Aragon hasta que reciba la corona y les confirme sus fueros.-Razon que dió el monarca para haber usado aquel titulo.-Pretenden los de la Union que el consejo y casa real se ordenen á gusto y acuerdo de las córtes: respuesta de Alfonso.-Proceden por sí los ricos-hombres á nombrar el consejo del rey.-Excision entre los ricos-hombres.-Exageradas pretensiones de los de la Union: su empeño en cercenar las atribuciones de la coroua: firme y severa conducta del rey.-Insistencia de los ricos-hombres: cede el monarca y les otorga el famoso Privilegio de la Union: esplícase lo que era este,-Renuncia el príncipe de Salerno sus derechos á la corona de Sicilia en don Jaime, hermano de Alfonso de Aragon: toma posesion del reino.-Relaciones del monarca aragonés con Roma, Sicilia, Francia, Inglaterra, Mallorca, Navarra y Castilla.-Tregua con Francia por mediacion del rey de Inglaterra.-Tratado de Oloron entre el aragonés y el inglés. Reclamaciones y dificultades por Francia y Roma.-Negociaciones, embajadas y conferencias entre príncipes.-Vistas de tres reyes y tratado de Canfranc.-Reto entre el de Mallorca y el de Aragon. Corona el papa al príncipe de Salerno como rey de Sicilia.Conflictos.-Negociaciones para la paz general.-Capitulaciones de la paz de Tarascon, humillantes para el aragonés.-Justas quejas del de Sicilia.-Muerte de Alfonso III. de Aragon: su carácter.-Jaime II., rey de Aragon y Sicilia.

Causa admiracion en verdad ver cuán somera mente han tratado nuestros historiadores generales las cosas de Aragon en es tos siglos, siendo como era

« AnteriorContinuar »