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Henrriquez, y en otras partes otros cavalleros; mas aunque se conbatió la villa no se ganó aquel dia.

CAPITULO DECIMO.

Cómo Don Henrrique, conde de Niebla, é Don Pero Ponce de Leon y el condestable Don Rui Lopez de Avalos y el obispo de Santiago fueron á correr á

Málaga.

En tanto que Antequera estava çercada salieron del real Don Henrrique de Guzman, conde de Niebla; Don Pero Ponce de Leon, señor de Marchena; Don Lope de Mendoça, arçobispo de Santiago; Don Rui Lopez de Avalos, condestable de Castilla; Gomez Manrrique, adelantado de Castilla; Pero Manrrique, adelantado de Leon; Don Lorenço Suarez de Figueroa, comendador mayor de Leon, con dos mill é dozientos onbres de armas, ochoçientos ginetes é tres mill peones, lançeros é ballesteros, é salieron del real viernes onze de Jullio deste año de 1410 para yr á correr á Málaga, é fueron á dar çebada é á comer ribera de un rio que pasa entre Alora é Cartama. E otro dia sabado salieron por corredores Don Henrrique de Guzman, conde de Niebla, é Don Pero Ponce de Leon é Don Lorenço Suarez con los ginetes, é todos los otros cavalleros quedaron con sus batallas ordenadas é pusieron su real esa noche çerca de la villa de Cartama, é quemaronles el arrabal é todo el pan que tenian, é talaronles las viñas, é despues recogieron su gente é fueron su camino de Malaga, por saber del conde de Niebla que era ydo delante, el qual con los cavalleros que ya diximos allegó junto á los arrabales de Malaga; é salieron á ellos todos los mas de los moros de la cibdad y escaramuçaron con los xpianos hasta que vino la noche. E otro dia domingo de mañana, aviendo oydo misa, tornaron sus batallas or denadas á los almendrales é olivares de Malaga á provo

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car los moros que saliesen á la batalla, é salieron de la cibdad hasta quatrocientos moros de cavallo é mucha gen te de pie, é trabajaron por les defender la tala de las huertas é viñas que estavan en torno de la villa, é con todo eso el conde de Niebla é los demas les talaron todas las huertas é viñas é pelearon de tal manera con los moros que hizieron mucho daño en ellos é prendieron çien moros é á los demas hizieron entrar por fuerça en la cib→ dad é pusieron fuego en todo lo que pudieron, é no de xaron cosa fuera de la cibdad que no destruyesen, salvo una casa del Rey de Granada que estava en el campo, que la dexaron con pensamiento que avian de tornar á cercar á Malaga; é de los xpianos murió Hernando de Guzman, hijo de Juan Ramirez de Guzman, natural de Toledo, pocos peones, aunque fueron muchos heridos.

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Otro dia, martes por la mañana, tornaronse estos señores é vinieron delante en dos esquadrones: el conde de Niebla é Don Pero Ponce de Leon en uno, é en otro el comendador mayor, é unos vinieron por la ribera de la mar é otros por la sierra, los quales hizieron mucho daño en la tierra de los moros, é tornaronse al real del Infanter que tenia sobre Antequera.

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Çayde Alemin (1) vino al Infante por parte del Rey de Granada para que le diese treguas; y estando en el real concertó con algunos moros de los cativos que estavan en el campo del Infante, que para cierto dia é ora pusiesen fuego de alquitran con unas bayetas que les dió, al real, é quél haria ciertos hechizos con que avria tan

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ser así, estaria mejor dicho Cayde el alamin. Algunas veces Sid ó Seyd que es «señor, se encuentra tambien escrito Cayd y Cayde.2577

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gran viento quel fuego no se pudiese matar. El moro se fue á Archidona; la cosa fue descubierta é castigada, é aquel dia é aquella ora que dixeron hizo tanto viento é tan rezio que quebró los masteles de las bastidas...

A este real de Antequera vinieron nuevas al infante Don Hernando como el Rey Don Martin de Aragon, su primo, era muerto é no habia dexado herederos, é que en Aragon avia, grandes diferencias, porque unos querian tomar por Rey á este Infante, é otros á otras personas; mas finalmente este Infante fue recibido por Rey de Aragon.

CAPITULO UNDECIMO.

De cómo se ganó la cibdad de Antequera á los moros, é cómo el conde de Niebla ganó dos castillos á los moros.

Martes 16 de Setien bre, estando descuydados los xpianos de conbatir aquel dia, mandó el Infante echar el escala en una torre, é luego subieron por ella sesenta onbres darmas é echaron los moros de la torre, y apodera-> ronse della; é incontinenti mandó el Infante tocar alarma para que conbatiesen la cibdad. E luego el conde de Niebla con su gente y escala é cada uno con sus gentes, començaron á conbatir la cibdad de Antequera por la parte que le estaba señalado, é entraron la çibdad por fuerça de armas, é los moros acogieronse al castillo.

Y el miercoles adelante se dió el castillo de Antequera á partido, que dexando las armas, bastimentos é camas se fuesen con lo demas, dexando los xpianos que tenian cativos, é salieron dos mill é seiscientos é veynte é ocho moros, moras é criaturas, é el Infante los mandó poner en salvo en Archidona, é dió la tenençia de Antequera á Rodrigo de Narvaez, su donzel, é porque supó el Infante que cerca de Antequera avia algunas fortalezas que convenia dexar tomadas para la seguridad de Antequera,

mandó á Don Henrrique de Guzman, su primo, conde de Niebla é al Condestable que fuesen á los conbatir, y ellos fueron primero al castillo de Aznalmara, é conbatiendolo se dieron los moros á partido; é puesto recabdo en la fortaleza fueron á conbatir el castillo de Xebar, y el castillo se entró por fuerça de armas é mataron catorze moros é los otros se acogieron á la torre del Omenaje, é dieron lugar á que se saliesen de noche é tornaronse á Antequera, de donde partieron viernes dos de Otubre, é vinieron á Sevilla donde otorgaron las treguas á los moros por diez é siete meses, por poder el Infante yr á entender en las cosas de Aragon.

Las quales se declararon el año adelante é eligieron al infante Don Hernando de Castilla por Rey de Aragon, y él fue acompañado de muchos cavalleros castellanos á reçebir el reino de Aragon, é deste Rey Don Fernando de Aragon fue nieto el Rey Don Fernando el Católico, marido de la Reina Doña Isabel, que ganaron á Granada. Y el hijo mayor deste infante Don Fernando fue Don Alonso, Rey. de Aragon, que conquistó el reino de Napoles é fallesçió sin hijos; el segundo fue el Rey Don Juan de Navarra é de Aragon; el tercero el infante Don Henrrique, maestre de Santiago; el quarto el infante Don Sancho, maestre de Alcantara; el quinto el infante Don Pedro, é dos hijas, una Reina de Castilla, é otra Reina de Portogal, y eran el conde de Niebla Don Henrrique de Guzman, y este Rey Don Hernando de Aragon, primos segundos por la parte del linaje Real, que por la parte del linaje de los Guzmanes era primo tercero.

Fue este Rey de Aragon muy valeroso Rey, sino que vivió poco, y eso doliente de unas yervas que le dieron; é porque en esta sazon avia çisma en la yglesia de Dios entre tres papas, Benedito á quien obedecia Hespaña, é los otros dos Gregorio é Juan, los quales renunciaron el pon

tificado en manos del conçilio, é Benedito que estava en Aragon, no queria renunciar; é vino el emperador Sigis mundo á Aragon para hazer con el papa que renunciase el pontificado en el conçilio como los otros dos, y él no lo quiso hazer, é quitáronle la obediencia en Aragon, y murió el Rey Don Fernando de Aragon, aviendo cinco años que reinava, é juntamente murió su hijo el infante Don Sancho, maestre de Alcantara.

CAPITULO DUODECIMO.

Cómo nasçió al conde de Niebla una hija, que la llamaron Doña Maria de Figueroa, que fue casada con Don Henrrique Henrriquez, de quien dependen los condes de Alva de Liste.

En el año de 1414 parió Doña Theresa de Figueroa, condesa de Niebla, muger de Don Henrrique de Guzman, conde de Niebla, una hija en Sevilla, que bautizada la llamaron Doña Maria de Figueroa é de Guzman, que des-' pues que fue muger la casaron con Don Henrrique Henrriquez, hijo segundo del almirante don Alonso Henrriquez, de los quales desçienden los condes de Alva de Liste que oy son.

En el año adelante de 1416 salió de Castilla, por mandado de la Reina Doña Catalina, Juan Leçentor, françes, con una armada, é ganó las islas de la Palma, del Hierro, del Infierno, de Lançarote; pero no pudo ganar la Gran Canaria, porque se le defendió; é hizo en la isla de Lançarote un castillo de piedra é barro muy fuerte con que sugectava las otras islas; y el primer obispo destas islas fue un fraile, llamado Mendo, el qual convirtió muchos canarios á nuestra fe. E porque entre mosen Meneaute (1), que heredó aquellas islas de su

(1) Este Meneaute, conforme su nombre está escrito en el códice, no puede ser otro que Maciot ó Maciote de Bethencourt, primo del conquistador Don Juan, y que le sucedió en el señorío de aquellas islas, como se puede ver en Vieyra, Historia de las islas Canarias, tomo t..

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