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porque la piedra la tenian al pie de la obra, y el agua en quatro grandes pozos que ay dentro de la cibdad, que en pocos dias se puso la obra en tal altor, que quando los moros se juntaron é vinieron á dar sobre ellos, se pudieron muy bien defender dentro de la cibdad, é aun salieron á dar en ellos, é con daño é perdida de los moros los hizieron por estonces retirar; pero porque los moros no desanparavan la tierra ni se quitavan de á la redonda, é no tenian lugar de salir por leña, enbiaron çiertos navios á la cibdad de Gibraltar, del duque de Medina Çidonia, de donde les llevaron leña é paja para los cavallos, que era lo que mas les faltava, é otros refrescos de provisiones.

E ansi peleando é trabajando en las obras acabaron de reparar los adarves é torres, é por la parte de la tierra atravesaron de la una mar á la otra una gran cava, é sobre ella una puente levadiza por donde se sirven de la puerta de tierra, é fortificaron la cibdad de tal manera, que de alli adelante no tuvieron temor ninguno á los

moros.

E costóle al duque de Medina Don Juan de Guzman doze quentos de maravedis solamente reedificar á Melilla de muralla, cava é barrera, é quedando por alcaide é capitan á Gomez Suarez, criado del duque de Medina, é alcaide de la su villa de Chiclana, esforçado cavallero é diestro en la guerra, se tornó Pedro de Estopiñan á dar quenta al Duque, su señor, de lo que quedava hecho, y el Duque holgó sobre toda manera del buen recado que se dieron é diligencia que pusieron Pedro de Estopiñan, é los que con él enbió, é mandóle luego que fuese al rey Don Fernando é á la reina Doña Isabel á darle quenta de cómo por servir á Dics é á sus Altezas él avia enbiado á reedificar é poblar á Melilla, é la tenian fortalecida á muy buen recado, é hazian mucho daño é guerra á los moros.

Destas nuevas holgaron mucho el Rey é la Reina, é loaron la persona é valor del Duque, é el animo de enprender lo que ellos no hizieron ni sustentaron, é porque aquella cibdad de Melilla era cosa muy preminente é nesçesaria á la seguridad destos reinos de Hespaña, é pueblo aparejado para dende alli conquistar á Africa, deseando que aquella cibdad permanesçiese, hizieron merçed al duque Don Juan de Guzman de le dar tres quentos de maravedis de juro é de renta en cada un año para ayuda á los gastos quel Duque alli avia de hazer con la gente que alli tenia, é dos mill hanegas de pan para ayuda al mantenimiento; é ansimismo para que hiziesen guerra dende alli á los moros, enbiaron dos capitanes suyos, que eran Manuel de Benavides é Hermosilla con la gente de sus capitanias para que estuviesen con la gente del Duque en guarda de aquella cibdad.

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El año siguiente tornó á enbiar el duque de Medina, Don Juan de Guzman, otra armada con Pedro de Estopiñan é Garcia de Leon é otros criados suyos proveer la cibdad de Melilla, é á hazer guerra á los moros, los quales despues que llegaron á Melilla, salieron de alli en sus navios, é fueron á dar en una aldea de Oran, que se llama Buçifar, que es á par de las Alhabibas, é con tanto animo y esfuerço pelearon con los moros que los vencieron, mataron é prendieron, é saquearon el pueblo, é traxeron á Sanlucar de Barrameda, donde estava el Duque, su señor, dozientos é sesenta moros é moras cativos, é muy gran despojo, de lo qual holgó mucho el Duque, é repartió la presa con los que se avian hallado en ella, que él no quiso recibir ninguna cosa.

Dende á algunos dias enbió el duque de Medina Don Juan de Guzman por capitan á la cibdad de Melilla á Gonçalo Mariño de Ribera, un cavallero de Sevilla muy onrrado é tio del Adelantado del Andaluzia, el qual hizo

muy buenos hechos con los moros, á los quales ganó la villa é castillo de Caçaça, como adelante diremos. E por aver el duque de Medina, conde de Niebla, Don Juan de Guzman, enprendido con tanto animo é gastos esta enpresa de Melilla, fue causa que los xpianos trabajasen por le dar conpañia, ganando como ganaron á Maçalquivir, á Oran, á Tripol é Bujia, á Bona é á la Goleta, é á otros pueblos que, con el ayuda de Dios, se irán ganando. E porque siempre destas cosas dan el loor á los inventorės dellas, es razon que lo lleve el duque de Medina, conde de Niebla, pues fue el primero que ganó é sustentó pueblo en Africa, é le han tenido é defendido é tienen estos señores de la casa de Niebla hasta el dia de oy. Oi dezir que este vocablo Melilla suena en lengua arabiga discordia (1), é que se le puso ansi nonbre á aquella cibdad por las continuas discordias que los moros de los reinos de Fez é Tremeçen tenian, sobre en cuyo termino caia.

El sitio de la cibdad de Melilla es que haze la tierra una entrada en la mar, é çercala por tres partes hasta batir en los muros, é por la parte de tierra va una cerca de mar á mar, y dizen que és semejante al sitio de Gibraltar, salvo que no tiene aquellos montes en ella, sino llano. E quentan dos cosas de Melilla que son notables: la una que dentro della no ay arbol ni prende, aunque lo pongan; é la segunda, que dentro della no ay ninguna hormiga (2). 7 fru

En este año de 1497 falleció Don Henrrique de Guzman, conde de Alva de Liste, capitan general de Perpiñan,

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(1) Jmalla en arábigo significa poner el pan á cocer sobre las cenizas calientes; hallar el camino largo y pesado; fastidiarse, hastiarse, ser atacado de fiebre ó de dolor en el espinazo. melilah es el calor producido por la fiebre, y tambien sed vehemente; pero es probablemente voz africana.

representa

(2) Sigue un dibujo de pluma que representa la ciudad de Melilla.

hijo del primer conde de Alva Don Henrrique Henrriquez é de Doña Maria de Figueroa é de Guzman, hija del conde de Niebla Don Henrrique de Guzman, que murió sobre Gibraltar, é murió este señor en Perpiñan despartiendo un ruydo, de una piedra que vino de una ventana, sin saber quien la echó. Mostróse en la casa de Niebla sentimiento de la muerte deste conde de Alva, como desçendido de la sangre é de la casa de Niebla.

En este tienpo, estando el Rey é la Reina en Toledo, fue á la corte Don Juan de Guzman, duque de Medina, conde de Niebla, y el Rey é la Reina le hizieron merced de la villa de Gausin é sus aldeas, que son: Benarrabá, Algataçen, Benamaoya, Benhama, Benhamahabu é otros: é yo he visto é leydo el previllegio é merçed dello, en el qual dize que dan aquellos pueblos é hazen merced dellos á Don Juan de Guzman, duque de Medina, conde de Niebla, é á sus descendientes, por los muchos serviçios que les avia hecho en las guerras de Granada y en otras partes, con todas las cosas á él pertenesçientes en aquella tierra, fecha en Toledo á treze de Mayo año del Señor de 1498 años.

E despues quel duque de Medina estuvo algunos meses en la corte tornó á Sevilla, donde falleció su madre la duquesa Doña Leonor de Mendoça de su muerte natural. Fue sepultada en el monesterio de Santisidro de Sevilla con su marido el duque Don Henrrique.

CAPITULO QUINTO.

De cómo Don Juan de Guzman, duque de Medina, partió de Sevilla con el Rey Don Fernando sobre los moros de las Alpujarras de Granada que se avian levantado.

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El Rey é la Reina, deseando que los moros del reino de Granada se tornasen xpianos mandóles predicar la fé de Jhuxpo, é el arcobispo de Granada y el de Toledo quedaron en Granada haziendo convertir muchos moros que venian del linaje de xpianos, por lo qual se alborotaron los moros y escandalizaron la cibdad, é muchos se salieron della é se fueron á las Alpujarras, é alçaronse contra los xpianos, é como el Rey Don Fernando, que estava en Sevilla, supo esto, partió á muy gran priesa con Don Juan de Guzman, duque de Medina, conde de Niebla, é con otros cavalleros á todo andar, é llegaron á Granada; y esto fue al principio del año de 1500, é apaçiguó el Rey la cibdad lo mejor que pudo, é fueron sobre Lanjaron, é tomaronla por fuerça de armas, é mataron é cativaron los moros que alli avia, é tomó el Rey á partido las Alpujarras, y á esto se halló tanbien presente el gran capitan Gonçalo Fernandez, é de alli se tornó el Rey, el duque de Medina. y el gran Capitan á Granada, donde mandó que todos los moros se convirtiesen é baptizasen, é ansi se convirtieron mas de sesenta mill personas, grandes é pequeños, en la cibdad de Granada é sú comarca, y en Granada no quedó ninguno por baptizar: el Rey y el duque de Medina se tornaron á Sevilla, donde en el mes de Abril deste año de 1500 vino á Sevilla Don Juan, rey de Navarra, con solos veynte de cavallo. Y el Rey le mandó hazer muy gran reçibimiento, y el duque de Medina, conde de Niebla, le hizo muchos serviçios, é le hizo algunos vanquetes en su casa, é ordenó una justa, é

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