Del manzanares al DarroGil Blas, 1922 - 245 páginas |
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Página xi
... fondo grave , sentimental y reflexivo , su entereza mo- ral , su originalísimo carácter . ¡ Cómo vive la España histórica y popular , con harta salud , con pulso acompasado y firme , en las más remotas aldeas , en los rincones más ...
... fondo grave , sentimental y reflexivo , su entereza mo- ral , su originalísimo carácter . ¡ Cómo vive la España histórica y popular , con harta salud , con pulso acompasado y firme , en las más remotas aldeas , en los rincones más ...
Página xii
... fondo de piadosa melancolía . Tal era don Amós de Escalante . Poco antes de su muerte , apenas sabía yo nada del poeta . Clásico en vida , sus libros se guardaban avaramente en las · casas de los hombres selectos ; agotadas las cortas ...
... fondo de piadosa melancolía . Tal era don Amós de Escalante . Poco antes de su muerte , apenas sabía yo nada del poeta . Clásico en vida , sus libros se guardaban avaramente en las · casas de los hombres selectos ; agotadas las cortas ...
Página xviii
... fondo de su alma siente una secreta envidia de los brocados de oro y los manjares suculentos : dice que puede y no quiere , cuando rabia de querer y no poder ... ¿ Cuándo esos infelices , que tienen seco el corazón XVIII PRÓLOGO D E.
... fondo de su alma siente una secreta envidia de los brocados de oro y los manjares suculentos : dice que puede y no quiere , cuando rabia de querer y no poder ... ¿ Cuándo esos infelices , que tienen seco el corazón XVIII PRÓLOGO D E.
Página xxi
... fondo de un mar de vapores que los anegaba y cubría , y cuyas blancas ondas , arrastradas por el viento , se desgarraban y rom- pían a nuestros pies , dejando sus blancos jirones , como el océano sus espumas , en las asperezas de las ...
... fondo de un mar de vapores que los anegaba y cubría , y cuyas blancas ondas , arrastradas por el viento , se desgarraban y rom- pían a nuestros pies , dejando sus blancos jirones , como el océano sus espumas , en las asperezas de las ...
Página xxiii
... fondo y saquear el seno de sus bolsillos , donde el pobre , descalzo de pie y pierna , mete la mano desnuda y encuentra , si no dineros , especies que dineros valen , y todo es pescar . El pechero , llano , útil , sufrido , muy hecho a ...
... fondo y saquear el seno de sus bolsillos , donde el pobre , descalzo de pie y pierna , mete la mano desnuda y encuentra , si no dineros , especies que dineros valen , y todo es pescar . El pechero , llano , útil , sufrido , muy hecho a ...
Términos y frases comunes
admiración agua aire alcázar alegre Alhambra alma amor Amós de Escalante Andalucía ánimo antigua árabe árboles ardiente arte artista asomaba belleza blanco Boabdil bóveda brazos brío Cádiz calle camino Catedral célebre cerca cielo ción ciudad color columnas corazón corre cristiano cuadro cuya Diego de Siloe dolor energía España español esparcen espíritu estaba estatuas estilo flores gala Generalife genio gentes gloria Guadalquivir hermosa hermosura historia hojas humana levanta lienzo llega magnífico mano mármol memoria mezquita Mihrab mirada misteriosa montañés monumento moros muerte mundo Murillo muro noble noche nombre novela obra obras ojos oscuro paisaje palacio palacio de Carlos parece pasión paso patio patria peregrino piedra pintado poesía poeta primera pueblo puerta recuerdos RICARDO LEON río ruido ruina salir Santa sarraceno Sevilla Sierra Elvira siglo soldados sombra templo tierra todavía torre Triana triste Valdés Leal vapor viajero viejo vigor vista vivo Washington Irving
Pasajes populares
Página 147 - Este despedazado anfiteatro, impío honor de los dioses, cuya afrenta publica el amarillo jaramago, ya reducido a trágico teatro, ¡oh fábula del tiempo!, representa cuánta fue su grandeza y es su estrago, ¿Cómo en el cerco vago de su desierta arena el gran pueblo no suena?
Página 147 - ¡oh fábula del tiempo!, representa cuánta fue su grandeza y es su estrago, ¿Cómo en el cerco vago de su desierta arena el gran pueblo no suena? ¿Dónde, pues fieras hay, está el desnudo luchador? ¿Dónde está el atleta fuerte?
Página 42 - Con mis lágrimas regué las palmas que el Forat riega, pero las palmas y el río se olvidaron de mis penas, cuando mis infaustos hados y de Alabas la fiereza me forzaron a dejar del alma las dulces prendas; a ti de mi patria amada ningún recuerdo te queda, pero yo triste no puedo dejar de llorar por ella.
Página xxii - Las aguas corrientes no son riqueza sólo; son vida del paisaje. Porque el agua posee los tres accidentes del vivir: luz, voz y movimiento; luz reflejada, como la luz de la pupila; voz ligera y amorosa, soñolienta y grave, como la voz de la garganta humana. No hay soledad donde el agua corre; no hay tristeza donde el agua mana; no hay desierto do'nde el agua vive. Fecunda el suelo y despierta el alma, arrulla el dolor, ensancha la alegría, es compañía y música, medicina y deleite; sobre sus...
Página 119 - Maestre, la muerte del hijo tierno, la prisión de Doña Blanca, sirven de infame proceso. Algunos pocos leales dan voces, pidiendo al cielo justicia, pidiendo al rey, y mientras que dicen esto, «Los de Enrique», etc.
Página 42 - Tú también, insigne palma, Eres aquí forastera; De Algarbe las dulces auras Tu pompa halagan y besan: En fecundo suelo arraigas, Y al cielo tu cima elevas: Tristes lágrimas lloraras Si, cual yo, sentir pudieras.
Página xxvi - Escalante vaga, misteriosa y melancólica sinfonía, que sugiere al alma mucho más de lo que con palabras expresa. Ambos han visto la Montaña como nunca ojos humanos la habían visto antes que ellos; ambos la han amado con amor indómito y entrañable, y puede decirse que su obra se completa para gloria de nuestra gente, que, después de haber guardado un silencio de siglos, habló al fin por sus labios inmortales.
Página 42 - Tú también, insigne palma, eres aquí forastera, de Algarbe las dulces auras tu pompa halagan y besan, en fecundo suelo arraigas y al cielo tu cima elevas, tristes lágrimas lloráras si cual yo sentir pudieras.
Página 44 - No admitas sentencia ajena Que nos tase el desagravio, Que sólo es buen juez Castilla Para el honor castellano. »No pienses en la riqueza, Ni en si está el Tesoro exhausto, Porque el más rico tesoro Es el honor bien guardado.
Página xiv - Los obras de este incomparable escritor aspiran un aliento verdaderamente poético; las sentencias son agudas, deleitosas y graves; las palabras, propias y bien sonantes; los modos de decir, escogidos y cortesanos; los números, aunque generosos y llenos, son blandos y regalados; el...