ción, no menos propia por haberes realizado en un movimiento general con todo el antiguo reino de Castilla, han venido a cuajar en las instituciones civiles, mercantiles, administrativas y políticas de nuestros días. Mengua de las letras vizcaínas era que permanecieran empolvadas y las más de ellas inéditas estas venerables ejecutorias de nuestra secular libertad hasta que la Junta de Cultura de la Excma. Diputación Provincial ha comenzado con este cuaderno a publicarlas.
En cuanto a la ejecución del encargo de dirigir esta publicación, con que me honró aquella Junta, me he atenido estrictamente al texto de los testimonios notariales, sin otra alteración que la de dar una sola vez el texto de cada privilegio omitiendo repeticiones. La ortografía del paleógrafo que los transcribió, aunque estoy lejos de entender que interpretó siempre acertada mente la de los originales, ha sido rigurosamente respetada. Al pie de cada diploma se indica la página de su HISTORIA en que Heros le comenta (comentario que hace innecesario cualquier otro) y tal cual errata que he advertido en el texto.