Documentos para a historia contemporanea. José da Silva Carvalho e o seu tempo ...

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Imprensa nacional, 1891

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Página 390 - Espada, por razones de la más alta política, por las leyes del Reino, que así lo disponen expresamente, y por tu misma tranquilidad, que yo deseo tanto como el bien de mis pueblos, te doy licencia para que viajes desde luego con tu familia á los Estados Pontificios, dándome aviso del punto á que te dirijas, y del en que fijes tu residencia. Al puerto de Lisboa llegará en breve uno de mis buques de guerra, dispuesto para conducirte.
Página 391 - Vamos á hablar ahora del asunto que tenemos entre manos. Yo he respetado tu conciencia, y no he juzgado ni pronunciado sentencia alguna contra tu conducta. La necesidad de que vivas fuera de España es una medida de...
Página 389 - Debes creerme, pues me conoces, y hablo con el corazón que el mayor gusto que hubiera podido tener sería el de jurar el primero, y no darte este disgusto, y los que de él resulten; pero mi conciencia y mi honor no me lo permiten: tengo unos derechos tan legítimos...
Página 399 - He recibido tu carta del 30 del pasado, y su contenido me ha causado el sentimiento que puedes considerar. Inútil es alegar razones cuando no tengo otras que las espuestas, las cuales en mi juicio son sencillas, sólidas y verdaderas; pero que no son atendidas ó no se creen suficientes. Ahora me dices que resisto á tus órdenes, que quebranto tus mandatos con escándalo de tus pueblos, y que no emanen por...
Página 393 - Te doy las gracias por las órdenes tan estrechas que has dado á la tripulación; es regular que así las cumpla; pero mientras tanto el buque se está impregnando de los aires precisamente de Belem á donde está fondeado, y las personas que me han rodeado en Mafra, son las mismas que aquí y en todas partes, que son las de mi servidumbre. Me parece que he respondido á todos los puntos en cuestión, y me viene á la memoria Mr.
Página 389 - ... el de jurar el primero, y no darte este disgusto y los que de él resulten; pero mi conciencia y mi honor no me lo permiten: tengo unos derechos tan legítimos á la corona siempre que te sobreviva y no dejes varón, que no puedo prescindir de ellos; derechos que Dios me ha dado cuando fue su voluntad que yo naciese, y solo Dios me los puede quitar concediéndote un hijo varón...
Página 400 - Cortes extranjeras y no lo tuviste por decoroso á tu persona, por lo cual me vi precisado á pasar á todos los soberanos, con fecha del 23 de Mayo, una copia de mi declaración, y una carta simple de remisión para su conocimiento. Asimismo envié...
Página 390 - ... y también por los de mi corona — No quiero tampoco violentar tu conciencia, ni puedo aspirar á disuadirte de tus pretendidos derechos, que fundándose en una determinación de los hombres, crees que solo Dios puede derogarlos. Pero el amor de hermano que te he tenido siempre me impele á evitarte los disgustos que te ofrecería un...
Página 392 - Portugal como más conveniente á tu tranquilidad, cuando se halla combatido por una guerra encarnizada sobre su mismo suelo, y como favorable á tu salud cuando padece una enfermedad cruel, cuyo contagio te •hace recelar que perezca toda tu familia. En los dominios del Papa puedes atender como en Portugal á tus intereses. — No te someto á...
Página 399 - Yo le quería á nuestro lado ignorando tu empeño; pero no te negaré este gusto, como no te he negado ninguno que haya sido compatible con mis deberes.— No es lo mismo lo del pago de los dos millones que solicitas, y de que he tomado conocimiento como te ofrecí.

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