Y en otra el conde de Cabra, el comendador mayor de Leon, é Garçi Fernandez de Manrrique con la gente de Cordova. Y en otra el maestre de Alcantara con su gente, Don Juan de Estuñiga, é los capitanes Antonio de Fonseca é Antonio del Aguila, y en otra el maestre de Santiago; Puertocarrero, señor de Palma; Don Diego Fernandez Pacheco, marques de Villena; Don Peranrriquez, adelantado del Andaluzia; Don Pedro Puertocarrero, señor de Moguer; el conde de Miranda; el conde de Rivadeo, Don Juan Chacon, adelantado de Murcia; Don Bernardino de Velasco, hijo del Condestable, é otros cavalleros, con los quales fue çeñida é cercada Malaga por la parte de la tierra, hasta llegar á la mar, en la qual mandó el Rey estar juntas todas las naos, galeras é caravelas, fustas é otros navios, porque estuviese la cibdad cercada por todas partes, é dende á poco allegó por la mar Don Ladron de Guevara, con dos naos de armada que venia de Flandes, que lo enbiava Maximiliano, rey de romanos, hijo del emperador Don Federico, al Rey con çiertas lonbardas é tiros de polvora en favor del Rey.

Los moros de Malaga salian cada dia á escaramucar con los xpianos, é los xpianos con ellos, donde avia muertos de una é de otra parte, é los moros tiravan con sus lonbardas tantos tiros á la tienda del Rey, que le fue nescesario retraerla; é del real de los xpianos les davan tanta priesa con el artilleria, que derribaron las defensas de una torre é hizieron un portillo en el muro, por donde por fuerça de armas le ganaron los arrabales.

Algunos malos xpianos pasavanse á los moros, é dezianles que no se diesen á los xpianos, sino que se defendiesen, porque el Rey queria alçar su real, á ruego de la Reina, por ver la pestilençia que començava, é la mucha gente que se iva del real, por el largo tienpo que avia que tenian çercado á Malaga, lo qual sabido por el

TOMO X.

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Rey por les quitar, aquella, sospecha, enbió á rogar á la Reina que viniese al real, y ella vino con mucha gente de refresco, é apretaron mas el cerco. (szobað

Dos mill moros salieron, de Malaga é dieron sobre el marques de Cadiz, que avia allegado su estança un tiro de piedra de mano de las torres de Malaga, é salieron con tanto animo, denuedo é acometimiento, que pasaron por la estança del Marques é dieron en los xpianos, é mataron á Garci Bravo, alcayde de Atiença. [é á Iñigo Lopez de Medrano, é á Grabiel de Sotomayor, é á cinco capitanes, é hirieron al marques de Cadiz en un braço con una saeta, é hirieron á muchos, é peleando una ora hizieron rétraer á los moros. La Reina tenia en el real unbespital donde curavan de gracia á todos los heridos; é porqué los moros salian continamente á dar en las estanças de los xpianos mandó hazer una cava delante de las estanças, é en las partes que no se podia hazer cava hizieron una pared grande de tapias, é ansi ynpidieron la salida de los moros.

En tanto que esto pasava, el rey moro Viejo que est tava en Almeria, so cuya obidiencia estava la cibdad, de Malaga, siendo solicitado por sus moros que viniese ά enbiase á socorrer á Malaga, enbió cierta gente en socorro, é salió á ellos el rey Chiquito Muley Baudeli que estava en Granada, é peleando con ellos los desbarató é mató muchos dellos, é los que quedaron se tornaron á Almeria, é escrivió al Reyé á la Reina el servicio que les avia • 91tal sat sh hecho. 304 „Crated loan elf tag un gennil Los moros de Granada sentian grave dolor por el gercą de Malaga, é quisieran socorrerla porque los moros no perdierané los xpianos no ganarantan noblepgibdad; mas no osáron hacerlo por no perder el seguro quel Rey é la Reina les davan para labrar sus tierras é para llevar pah é todos los mantenimientos é mercaderias det reino de Castilla, de hat, of all obey asiat op sys

El Rey mandó á cada señor que dende sus estanças hiziesen minas que fuesen por debaxo de tierra á dar en los adarves para los poner en cuentos é derribarlos. Los moros que lo sintieron contraminaron é pelearon seis dias por las minas.

Un dia salieron la mayor parte de los moros de Málaga, é dieron unos en la estança de Cordova, é ótrós en la del alcaide de los donzeles, é otros por las minas, é otros por la mar, é otros por otras partes á una misma ora, porque como ellos tenian poco mantenimiento en la cibdad, é no esperavan socorro de fuera, fue cosa digna de hotar la osadia que aquella gente barbara tenia, espegialmente los gomeres de Africa en el pelear, la obidiençia á sus capitanes; su trabajo en el reparar de las defensas; su astucia en los trabajos de la guerra; su constançia en el que començaron: Los xpianos salieron á ellos, é pelearon seys dias, donde uvo muertos de una parte é de otra, hasta que los moros no pudiendolo ya çufrir, se retráxeron á la cibdad. i

Todos los moros del reino de Granada tenian gran dolor por el trabajo que pasaban en el cerco de Malaga, é un moro, llamado Abrahen Algerbi (1), natural de la cibdad de Gerba, que es en el reino de Tunez, que morava en una aldea de Guadix, concibió e sut animo de morir por matar al Rey é la Reina, porque con esta hazaña haria alçar el cerco de Malaga, é vengaria los moros de los males recibidos. Este moro para su proposito pu-' blicó que era santo, é que tenia revelaciones quel avia de hazer alçar el cerco de Malaga, é juntandose con él quatrocientos morós de los gomeres de Africa, vinieron con mucho secreto por partes remotas hasta Malaga, é

Corba es et puerto Ilamado por los nuestros ابر اصيم الجربي (1)

los Geltes, donde en 1560 ocurrió la rola de D. Alvaro de Sande.

dieron una mañana con tanto animo en los xpianos, que saltando los palenques é defensas, entraron los dozientos en Malaga, é los otros dozientos fueron muertos. !

Aquel moro Abrahen apartóse porque no le matasen; é hincóse de rodillas, puestas las manos, fingiendo que orava, é siendo preso por la gente del marques de Cadiz é llevado á su presencia, dixo quél sabia quando se tomaria Malaga é otros grandes secretos, é que no lo diria sino al Rey é á la Reina, é llevado á las tiendas del Rey é de la Reina que estavan durmiendo, el Rey é la Reina dixo que no lo queria ver, que lo sacasen fuera, é metieronlo en la tienda, donde estava Doña Beatriz de Bovadilla é Don Alvaro de Portogal, que estava desterrado de Portogal, dende la muerte del duque de Bragança, su hermano, el qual Don Alvaro fue padre del conde de Gelves, que oy es alcaide del alcaçar de Sevilla, é como el moro vió á Don Alvaro de Portogal é á Doña Beatriz de Bovadilla, pensó que era el Rey é la Reina, como los vió tanbien vestidos, é sacando un terciado que traia debaxo de la marlota, dió á Don Alvaro una gran cuchillada en la cabeça, de la qual llegó á punto de muerte, é tiró otra cuchillada á la Marquesa por la matar, é con la turbacion que tuvo, no le acertó donde quisiera, é dióle en un enbutido de lama que las mugeres usavan en aquel tienpo para hazer cadera, é acabaroslo de matar sino fuera porque se abraçaron con el moro, é incontinentemente le hizieron pedaços, y echaronlos en la cibdad con un trabuco.

Fue éste caso semejante á lo que Muçio Sçevola, ro→ mano, que deliberando morir por salvar la patria, errando el golpe que dió al rey Porsenna se quemó el braço en una hacha de fuego, diziendo que pagase la mano que avia errado el golpe, lo qual fue causa quel rey Porsenna con temor de cosa semejante alçó el cerco é se fue. Por el

consiguiente dió en el real de los xpianos gran turbaçion temiendo no huviese otros moros que intentasen á hazer otro tanto, é por esto mandaron poner dozientos cavallerós hijosdalgo castellanos para que guardasen que ninguna persona llegase al Rey é á la Reina con armas.

CAPITULO TRIGESIMOPRIMERO.

De cómo Don Henrrique de Guzman, duque de Medina, conde de Niebla, fue con mucha gente por tierra é navios por mar á servir al Rey al cerco de Malaga, é le prestó veynte mill doblas para los gastos de la guerra, é cómo se ganó Malaga.

Tantos fueron los trabajos que pasavan los xpianos en la cerca de Malaga, é las faltas de mantenimientos é de salud por los muchos dias que avia que alli estavan, é el trabajo de las continuas escaramuças é la falta del dinero é de las otras cosas nesçesarias, que ansi con esto como cón ver la pertinacia de los moros y el animo con que se defendian é esperavan que se defenderian, platicavan é aconsejavan al Rey é á la Reina que alçasen su cerco de sobre la cibdad de Malaga, é que podrian volver en mejor sazon é la ganarian, lo qual agora paresçia escusado, segun su mucha defensa é la gran falta de todas las cosas que avia en el real de los xpianos; é tratóse algun dia deste negocio, é las gentes de noche é á hurto se salian del real é se venian de çiento en çiento, de trezientos en trezientos á Castilla, que no bastava poner guardas ni ahorcar, ni castigar las gentes, lo qual con el temor que aquel hecho del moro puso, hazia poner alguna tibieza á la gente del real, y aun al Rey para proseguir el cerco.

Como esto supo Don Henrrique de Guzman, duque de Medina, conde de Niebla, determinó de hazer un servicio á Dios y al Rey que era de ir su persona é la de su hijo, é toda la gente de su estado, é toda la más gente