DE MEXICO POR DON LUCAS ALAMAN. CON UNA NOTICIA PRELIMINAR DEL SISTEMA DE GOBIERNO QUE REGIA EN 1808 Y DEL ESTADO EN QUE SE HALLABA EL PAÍS EN EL MISMO AÑO. TOMO V MEXICO. IMPRENTA DE VICTORIANO AGUEROS Y COMP., EDITORES. 1885. PROLOGO. Destinado este quinto tomo á presentar en él á mis lectores la segunda parte de esta historia, que comprende desde la formacion y proclamacion del plan de Iguala por D. Agustin de Iturbide hasta la muerte de este jefe y el establecimiento de la república fode. ral mexicana, debia haberse terminado en el capítulo X del libro segundo; pero pareciéndome que quedaba incompleta la narracion interrumpida en aquel punto, juzgué indispensable extenderla hasta la entera anonadacion de las tres garantías, que fueron el objeto de! mencionado plan, concluyendo con presentar en el capítulo XII una reseña del estado actual de la nacion, en correspondencia co la que formé al principio del libro primero de la primera parte, babiéndome resuelto á hacer esta variacion que ha sido motivo de aumentar considerablemente este volúmen, no solo por el motivo expresado, sino tambien por ser probable que no pueda escribir la continuacion de esta obra, que seria ya de ménos interés, y aun cuando la escribiese, no se habria de imprimir en algun tiempo, concluyendo con este tomo lo que en el prólogo del primero ofrecí publicar; más para evitar en cuanto fuere posible uno de los inconvenientes que tiene escribir la historia contemporánea, he referido de una manera general, los sucesos desde la muerte de Iturbide hasta ahora, limitándome á los necesarios á mi objeto y omitiendo nombrar personas sino en el caso de ser del todo imposible escusarlo. De aquí deberá resultar, que si alguno se creyere ofendido, tendrá que darse él mismo á conocer haciéndose denunciante de su propia culpa, la que si he tenido que referir, ha sido callando el nombre del culpable. Si el efecto que una obra produce bastase para lisonjear el amor propio de un autor, debiera manifestarme contento de la mia, pues ella ha causado un cambio completo en la opinion y abierto el camino para que otros escriban con la libertad que no se habian animado á hacerlo hasta ahora; pero ese defecto no es debido á otra cosa, que á la verdad que he profesado y al deseo que el público tenia de conocerla. Muchos que fueron testigos de los sucesos que he referido ó que los oyeron contar á los que los presenciaron, se dolian de verlos ofuscados con las fábulas con que habian sido desfigurados, y algunos que se hallan en este caso, me han escrito felicitándome por haberlos presentado tales como ellos los vieron: para otros ha sido un mundo desconocido que se ha descubierto á sus ojos, cayendo el velo con que artificiosamente se habia tratado de ocultar la realidad de los hechos. Nadie ha po dido desmentir estos y en todas las censuras de que mi obra ha sido objeto, no se ha puesto en duda la certeza de lo que refiero, y lo más que se ha podido oponerme es, que o npuede dudarse de la verdad de mi relacion, pero que esa verdad no debia haber salido de una pluma me. xicana; como si la historia de México hubiese de ser un tejido de ficciones hasta que viniese á escribirla algun extranjero, ó como si Tácito debiese ser tenido por mal romano por habernos dejado la de los reinados de Tiberi y de Neron, ó Mr. de Barante por mal francés, por haber escrito con tremenda exactitud la de los duques de Borgoña de la casa real de Valois. Desde la publicacion del tomo 4 de esta obra, han salido á luz dos escritos históricos importantes: el uno del Sr. D. Luis Cuevas, con el título de: "Porvenir de México, ó juicio sobre su estado político en 1821 y 1851, y el otro la "Reseña histórica, que está publicando en el periódico la Ilustracion, el Sr. general D. José María Tornel. El primero me ha sido útil por las juiciosas observaciones que contiene, y del segundo me he aprovechado para la rectificacion ó ampliacion de algunos hechos de que el autor está mejor informado que otro alguno, por la ocasion que para saberlos le han presentado los altos puestes que ha ocupado en el gobierno, al tiempo que acontecieron los sucesos que refiere, aunque muchas ve ces no estamos conformes en el modo de calificarlos. De otras producciones de ménos importancia, solo haré mencion del discurso pronunciado en Morelia por el gobernador del Estado de Michoacan, con motivo de la funcion nacional de 16 de Setiembre de este año, por parecer expresamente dirigido contra esta historia. Siguiendo en él los progresos de las sociedades segun los principios de la Fisiología, pretende remediar los males de la república por las reglas de la Higiene y de la Ortopedia, ó por lo ménos hallar alguna compensacion de ellos en las de la Gimnástica, y quiere encontrar la explicacion natural de todos los acontecimientos políticos en los fenómenos del cuerpo humano; llama carcomido al imperio de Moctezuma, en la época de su mayor grandeza, para demostrar que debió caer puesto en contacto con el poder colosal de CárJos V, que estaba representando en México por un puñado de aventureros; atribuye todos los excesos cometidos en la revolucion que comenzó en 1810, á los males inevitables de ellas, como si lo que en estas es accidental pudiera servir de excusa para lo que en aquella fué un sistema atroz, en el que la matanza y el saqueo constituian el objeto y medios de la revolucion misma; y lo que parece todavía más extraño, acusándome de ingratitud por haber llamado al tribunal de la historia á los jefes de aquella revolucion, él mismo hablando en público en la ciudad que fué la cuna de Iturbide, en un discurso encomiástico de la independencia, ni aun siquiera mienta el nombre del que procuró á la nacion mexicana este inmenzo beneficio. Seria ignorancia? Parece indisculpable en el gobernador del Estado de Michoacan, y si esta estudiada omision ha de atribuirse á otro motivo, no puede hallarse sino en la opinion absurda que han querido establecer, los que para atribuir la independencia á los que la promovieron en 1810, pretenden persuadir que el mérito de la empresa consistió en haber dado el pri mer paso, aunque de una manera tal que fué el obstáculo que impidió el buen éxito de ella, y lo niegan al que con el mayor tino y felicidad ejecutó lo que aquellos intentaron y no pudieron llevar al cabo. No me habria detenido á hablar de este insignificante escrito, condenándolo al olvido ó al desprecio que el orador pide para |